La terrible experiencia de Nicholas Hoult en el set de Nosferatu: “Aullaban con la muerte en sus ojos; claramente me querían comer”

Mucho se ha escrito sobre las supuestas maldiciones que asechan a los protagonistas de las películas de terror más exitosas y tenebrosas. En el caso de Nosferatu, el nuevo film de Robert Eggers que en la Argentina llega a las salas el 2 de enero, no fue una maldición la que persiguió a Nicholas Hoult en el set, sino espeluznantes lobos hambrientos.

Según relató el actor esta semana en Late Night with Seth Meyers vivió un momento realmente aterrador durante el rodaje y temió por su vida. “Sentí un miedo que nunca antes había experimentado. Fue realmente intenso, algo que nunca jamás había sentido”, comenzó relatando. El episodio se produjo antes de comenzar a rodar una escena en la que a su personaje, Thomas Hutter, lo persiguen lobos en un laberíntico castillo.

“Yo estaba corriendo en el lugar y preparándome para la toma”, rememoró Hoult. “Y ellos estaban atados con correas y aullaban con la muerte en sus ojos. Claramente, me querían comer”, agregó. La situación se volvió realmente peligrosa. Pero no fue la única: cuando comenzaron a filmar esa misma toma, los lobos lograron escaparse. “Me di cuenta de que podían alcanzarme y no había dudas de que si eso ocurría todo iba a terminar mal. No sé qué hubiese pasado si no lograba salir por la ventana. ¿Para qué los entrenan?”, se preguntó el actor.

Esa toma finalmente no quedó en el corte final. Hoult contó que, según le reveló el realizador, fue descartada porque en el momento más álgido, él hizo una mueca “ridícula”. El actor revisó el metraje él mismo y estuvo de acuerdo en que era demasiado graciosa como para mantener la tensión, pero le confesó al director que esa mueca era producto de su “miedo real”.

La película, que está también protagonizada por Lily-Rose Deep, Willem Dafoe, Aaron Taylor-Johnson y Emma Corrin, cuenta con la presencia de Bill Skarsgård en el papel del Conde Orlok. Según contó el actor que interpretó al diabólico payaso de It (Eso), la filmación fue tan intensa que este fue el único rol en el que sintió pavor. En una entrevista con el director, Skarsgård señaló: “Nunca he tenido tanto miedo de un papel y probablemente no vuelva a tenerlo. Todo el proceso fue muy intenso. Una vez que empezás a canalizar algo que no sos vos, te sentís como un recipiente”.

“Cuando terminamos de filmar, pensé: ‘No quiero volver a interpretar algo tan malvado. No quiero volver a ponerme prótesis’”, reveló Skarsgård a la revista Empire. El productor del film Chris Comumbus también se refirió al clima que se vivía en pleno rodaje. Según él, Skarsgård era tan aterrador disfrazado que ni siquiera podía acercarse a él en el set.

La presencia de Skarsgård como el Conde Orlok/Nosferatu se mantuvo en secreto hasta días antes del estreno de la película en los Estados Unidos. Tanto en los tráiler como en los afiches, que muestran al Profesor Albin Eberhart Von Franz, Ellen Hutter, Thomas Hutter, Anna Harding y Friedrich Harding con la mitad superior de sus caras cubiertas de sombras mientras sus ojos brillan, la imagen de Orlok permanece oculta en una sombra negra. Esta decisión fue para generar más misterio sobre el personaje, pero también para que quedara en claro su carácter siniestro. No fue hasta unas semanas antes del estreno de la película que pudo verse a Skarsgård caracterizado como Nosferatu en algunas fotografías promocionales.

Conforme a los criterios de

Conocé más