Hollywood apuesta por el DVD
Las superproducciones se editan cada vez más rápido en disco digital y recaudan en ese formato más dinero que en el cine
LOS ANGELES (The Sunday Times).- Shrek, el ogro animado que arroja su sombra monstruosa sobre los cines británicos, está a punto de volverse mucho más grande. La comedia de 90 minutos se agigantará hasta las 11 horas de duración en un par de meses, cuando Dreamworks, la empresa de Steven Spielberg, lance "Shrek" en DVD, completa, con escenas ampliadas, una docena de juegos cibernéticos y las tomas eliminadas en la versión fílmica.
La película, con un costo de 60 millones de dólares, ya ha recaudado 350 millones en los cines de todo el mundo. En Dreamworks admiten que se sentirán decepcionados si el paquete de dos discos de DVD no les reporta otros cien millones para Navidad. Su único rival es la versión en DVD del éxito original de Walt Disney, "Blancanieves".
La edición especial de "Shrek", con un costo de 30 dólares, puede resultar excesiva inclusive para los standards de Hollywood, pero marca la madurez de un nuevo formato que está sacudiendo los cimientos de la industria del cine. Se espera que "Shrek" eclipse el récord de ventas logrado este año por "Gladiador", de Ridley Scott, que recaudó 50 millones de dólares durante la primera semana en los cines estadounidenses y 60 millones de dólares durante la primera semana de venta en formato DVD.
De pronto, mientras las entradas de los cines caen hasta representar tan sólo el 20% del ingreso de los estudios de Hollywood, la cola del entretenimiento hogareño está moviendo al perro de la taquilla. Y justo a tiempo. Exitos de taquilla de un costo demencial, como "Pearl Harbor", que costó 200 millones, ganan sumas récord durante el fin de semana de estreno en los cines, pero los estudios perciben menos del 50% de ese dinero. En cambio, gracias a arcaicos acuerdos con los videoclubes, los estudios consiguen alrededor de 13 dólares por cada DVD vendido. Cuando el DVD apareció, en 1997, era sólo un formato más que pretendía hacerse con el trono del video, el medio que había abierto un camino más que lucrativo durante 20 años, al llevar las películas del cine al living. Pero en la era del sonido estéreo de alta calidad, de la televisión digital y satelital, el video empezaba a mostrar síntomas de envejecimiento. Y aunque la mejor tecnología no siempre convence a los consumidores, el DVD (digital versatile disc) demostró rápidamente su superioridad con respecto al torpe disco láser de 12 pulgadas y al videodisco de baja calidad promovido por los fabricantes de Lejano Oriente y preferido por las ediciones piratas chinas.
El Divx era un disco de calidad que podía venderse barato porque se autodestruía después de ser pasado una vez; acababa con la preocupación por la piratería, pero los estudios de marketing revelaron que a los consumidores no les gustaba nada quedarse con unas cenizas plateadas. Para consuelo de esos consumidores, el plateado DVD plástico tiene la misma apariencia de un CD. Ambos se basan en tecnología de carga óptica, que comprime los datos evitando duplicaciones: cada sonido o color sólo debe incluirse una sola vez. Pero un DVD, de dos caras, está a una generación de distancia de un CD: guarda datos en billones de muescas microscópicas de una superficie plástica sólo legible por un rayo láser, creando así una capacidad de almacenamiento 14 veces mayor que la de un CD. Eso no sólo le permite almacenar el film con mejor sonido y color, sino también bandas de sonido en lenguas alternativas, videos musicales complementarios, el guión y el documental que registra cómo se filmó la película en cuestión.
Hay espacio para todo. Los estudios pueden ofrecer versiones para adultos y para niños del mismo film, y el director puede mostrar su adorada versión completa a todos aquellos que tengan la energía necesaria para verla.
"Es el nuevo consuelo que sirve para calmar a los actores por la escena eliminada en el montaje que no se verá en el cine", dice Cameron Crowe, director del nuevo film de Tom Cruise, "Vanilla Sky". "Y además hace que el film se vea maravilloso."
Sin embargo, fue la política industrial la que coronó al DVD, gracias a un empedernido defensor del formato, Warren Lieberfarb, director del departamento de entretenimiento hogareño de la Time-Warner, empresa que lo despidió dos veces en el pasado por promover ideas que se adelantaban a su tiempo. Lieberfarb, de 57 años, veterano de la guerra VHS-Betamax, sabía que la única manera en que el DVD sería exitoso era lograr que los siete estudios grandes de Hollywood lo respaldaran. Estaba dispuesto a usar cualquier argucia para que el sistema de DVD que había desarrollado en la Warner -asociada con Toshiba, la gigantesca compañía electrónica japonesa-, a principios de la década del 90, se convirtiera en el formato estándar de la industria. Un paso fundamental se cumplió cuando consiguió el respaldo de Rupert Murdoch, presidente de Fox, a cambio de que las emisoras de cable de la Warner difundieran noticias de la Fox.
Además, Lieberfarb persuadió a la Warner de que vendieran muy baratos los DVD a la cadena Blockbuster, para asegurarse de que el DVD tuviera un espacio junto al formato video. A cambio, Viacom, la dueña de Blockbuster, ordenó a su estudio, la Paramount, que respaldara el nuevo formato.
Precios en picada
La revolución del DVD empezó en 1997. Pero pronto se hizo evidente que algunos participantes fundamentales, como Spielberg y George Lucas -que estaba obsesionado por las nuevas tecnologías en el momento en que se disponía a filmar "La amenaza fantasma"- no confiaban en el nuevo formato. Paramount, Fox y Disney volvieron a acordar que lanzarían sus films en DVD además de hacerlo en video, alegando preocupación por las versiones piratas.
¿Qué ocurrió a continuación? Primero, el precio de los reproductores cayó de 500 dólares a menos de 200 durante los últimos tres años, y los DVD son vendidos en cadenas de supermercados como Wal-Mart. Segundo, la gente más creativa de Hollywood advirtió que podía divertirse con el DVD. Es posible que Spielberg se niegue a editar algo más que comerciales en el nuevo formato, pero durante los últimos doce meses otros directores han accedido a hacerlo.
James Cameron, que dirigió "Titanic" y que adora la tecnología, dio el puntapié inicial con dos discos de su aventura submarina de 1989, "El abismo". Y "Gladiador", de Dreamworks, le abrió los ojos a Hollywood y le hizo ver que el DVD es una mina de oro, ya que mucha gente joven está dispuesta a pagar 30 dólares por un buen DVD, es decir, diez veces más de lo que gastan por el alquiler de un video por una noche. Los best sellers del año reflejan este dato: "Gladiador" sigue en el puesto número uno, con ventas de cinco millones, seguido por "The Matrix", "X-Men" y "El patriota".
"El tigre y el dragón", de Sony, ya ha recaudado 50 millones de la venta en DVD. El año último, los ingresos de Hollywood crecieron en 3300 millones de dólares, y el DVD fue responsable de una ganancia neta de 60 millones. Hasta el momento, este año el público estadounidense ha gastado 4900 millones de dólares en entradas de cine y 2200 en DVD.
En la actualidad, en los hogares estadounidenses hay más reproductores de DVD que computadoras. Y Disney también participa en este crecimiento. Robert Chapek, presidente de la división Buena Vista Home Entertainment de la compañía, admitió recientemente que el DVD es el futuro. Y los resultados parciales de beneficios de Disney confirman la predicción: aunque sus ingresos generales decayeron en mil millones de dólares, debido a la escasez de público en los parques temáticos y la disminución de taquilla en los cines, sus ventas de DVD crecieron en un ocho por ciento, hasta alcanzar 1300 millones.
Un DVD exitoso necesita tanto trabajo como un buen video. Un equipo de cámaras independiente siguió al director Tim Burton mientras rodaba para la Fox "El planeta de los simios", para producir un documental. Burton retuvo algunas escenas dramáticas para poder agregarlas a la edición en DVD que saldrá el año próximo.
En cualquier caso, los analistas todavía no se ponen de acuerdo sobre la posibilidad de que el DVD reemplace al video. En 1997, se alquilaron 3,5 billones de videos, y 6 millones de DVD. Este año habrá 2,9 billones de videos alquilados y 692 millones de DVD, según la estimación de la firma Adams Media Research.
"Las ventas de video no sólo decaen por la aparición del DVD, sino que también bajan, porque los productos en DVD, más sofisticados, pueden conectarse en la computadora y en Internet, y eso aleja a muchos jóvenes del televisor", afirma un analista de Adams.
En otras palabras, es posible que el DVD sea el pasaje entre la tecnología "pasiva" -el video o el programa de televisión- y la "activa", los juegos computadorizados y otros entretenimientos interactivos en los que el consumidor se compromete físicamente.
Pero hay un problema por resolver: el de la piratería. El mes último, empezó en Washington el juicio contra una compañía de Internet que distribuyó un código llamado DeCSS, que permite a cualquier operador de computadora hogareña acceder al código de un DVD y hacer copias. En Internet ya se encuentran muchas copias piratas de los DVD favoritos, aunque por ahora no es posible bajarlas, salvo con una computadora industrial. La Unión Europea está estudiando los códigos de protección a los DVD que impidan a los fans británicos importar DVD estadounidenses, más baratos y completos que las versiones europeas.
Y hay otras preguntas: ¿es posible que los DVD, reproducidos en grandes aparatos de televisión, el "cine en casa", lleguen a reemplazar la experiencia cinematográfica? ¿Los estrenos glamorosos se convertirán en una vidriera para el más redituable mercado hogareño?
Sin duda, Disney ha probado, con cien millones de ganancia en los videos, que películas como "La sirenita II" y "El rey león II", que una compañía ni siquiera debe estrenar en los cines para conseguir una buena ganancia. Los optimistas dicen que las futuras reducciones de costo impulsarán a la industria a embarcarse en otra clase de distribución, la difusión digital de films a través de líneas satelitales y telefónicas. Adiós al celuloide. La calidad igualará al DVD. Y eso asegurará que, por bueno que pueda ser un disco de cinco pulgadas, nada puede ser mejor que salir una noche para ir al cine.
Tendencia en cifras
- 11
Horas
Dura la versión de la película animada “Shrek” en DVD. En el cine, no alcanza a los 90 minutos. Incluye tomas eliminadas y juegos cibernéticos con los personajes del film.
- 60
Millones de dólares
Recaudó la versión de “Gladiador” en DVD, en su primera semana de ventas en los Estados Unidos. En la primera semana de exhibición en los cines norteamericanos, “sólo” había alcanzado los 50 millones.
- 692
Millones
De películas en DVD serán alquiladas este año en los Estados Unidos, según las estimaciones. Hace sólo cuatro años, en 1997, esa cifra fue de apenas seis millones, lo que marca un abrupto crecimiento.
- 2200
Millones de dólares
En compra y alquiler de DVD llevan gastados este año los aficionados de los Estados Unidos.