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Estrenos de cine: Como el cielo después de llover, una película íntima, sutil y poética

Colombiana radicada en Argentina, Mercedes Gaviria Jaramillo pinta un emotivo retrato familiar a partir de filmaciones caseras de su padre, el cineasta antioqueño Víctor Gaviria

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PARA LA NACIONAlejandro Lingenti
Como el cielo después de llover, de Mercedes Gaviria Jaramillo, estreno del jueves 3
Como el cielo después de llover, de Mercedes Gaviria Jaramillo, estreno del jueves 3

Como el cielo después de llover (Colombia-Argentina/2020). Dirección y guion: Mercedes Gaviria Jaramillo. Fotografía: Mercedes Gaviria Jaramillo, Mauricio Reyes y Alejandra León. Edición: Rodrigo Traverso y Florencia Gómez García. Duración: 73 minutos. Calificación: apta para mayores de 13 años. Nuestra opinión: muy buena.

“Las conversaciones en una familia fundan el mundo que compartimos y le dan sentido a nuestro futuro”. Mercedes Gaviria Jaramillo cita de memoria un fragmento de Desierto sonoro, un libro de la mexicana Valeria Luiselli que un amigo le recomendó con la certeza de que iba a interpelarla. Mercedes nació en Medellín pero vive hace años en Buenos Aires, donde estudió cine y trabaja, justamente, como sonidista. Ese es apenas uno de los recuerdos que va hilvanando esta película íntima, emotiva y atrapante, que aprovecha muy bien la afición de un padre obstinado en el registro audiovisual de la vida cotidiana de una familia invadida por el cine.

Víctor Gaviria es uno de los nombres importantes del cine colombiano -director de películas notables como La vendedora de rosas (1998) y Rodrigo D: No futuro (1990)-, y tanto sus filmaciones caseras como las del rodaje de La mujer del animal (2016) le sirven a su hija Mercedes para revisar su pasado, explicar su presente e imaginar su futuro a través de un relato que aglutina diferentes capas narrativas (las imágenes prestadas, las propias -cargadas de una impronta poética que permiten vislumbrar la percepción fina de una cineasta-, la voz en off de tono abiertamente confesional) y que en el epílogo esboza un balance de todos los temas que recorre en apenas una hora: los recuerdos familiares, la poesía, el cine colombiano, el deseo, los tiempos desiguales en la crianza de los hijos que invierten hombres y mujeres, el feminismo, la belleza de lo ambiguo. Son piezas de un rompecabezas rearmado con amor, sutileza y sagacidad.

Por Alejandro Lingenti
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