Channing Tatum, la nueva estrella de Hollywood
El protagonista de Magic Mike, el film de Soderbergh estrenado anteayer, en un gran presente y con un ajetreado futuro
Channing Tatum empezó 2012 como uno más de esos chicos bonitos y musculosos de Hollywood que después de unos cuantos films y algo de reconocimiento tratan de dejar atrás al galán de dramas románticos para convertirse en estrella. Y, milagro de milagros, eso fue exactamente lo que terminó siendo. En el transcurso de un año, el actor de 32 años renació como intérprete megataquillero y el hombre más sexy del mundo, según la revista People, un título que en Hollywood es la señal más contundente de haber alcanzado la cima. De hecho, si de señales de éxito se trata ninguna más clara que la participación que tuvo Tatum en los premios Oscar, jugando a ser el Fred Astaire de la Ginger Rogers de Charlize Theron y luego presentando un premio junto con Jennifer Aniston.
El muchacho llegó a donde se lo propuso cuando pocos apostaban por él. Ahora, habiendo protagonizado tres películas seguidas que superaron los 100 millones de dólares en recaudación, su historia, peculiar, pasó a convertirse en leyenda. Después de todo, ¿cuántos aspirantes a actores que comenzaron como strippers lograron que Steven Soderbergh filmara una versión de sus vidas? Ninguno hasta Tatum, que además protagoniza el cuento, Magic Mike, que esta semana se estrenó en la cartelera local. ¿Y qué otro bailarín talentoso pero sin técnica y actor esforzado que de chico sufrió trastorno de déficit de atención y no teme admitir que no lee muy bien se convirtió en la estrella masculina del presente y el futuro inmediato en poco más de un año? Ninguno hasta Tatum. Y probablemente ningún otro pueda repetir la hazaña que consiguió, según el mismo cuenta, más a base de perseverancia que de talento.
El actor filmó 16 películas en cinco años convencido de que "en Hollywood tomarse un descanso es un problema porque el público de hoy tiene trastorno de atención. Te olvidan rápidamente o se cansan de que hagas siempre lo mismo. Tenés que rebuscártelas todo el tiempo". Algo que Tatum aprendió a hacer desde que pasó de bailarín en videos -entre sus créditos figura el de la canción "She Bangs", de Ricky Martin-, a actor novel con más materia que sustancia. Al menos al principio.
"Ciertamente no lo ubicaría en esa categoría de jóvenes actores a los que contratan sólo porque son lindos. Él viene al rodaje con ideas bien desarrolladas, pero, además, no se toma a sí mismo muy seriamente, lo que resulta muy refrescante", decía Steven Soderbergh al New York Times, en un artículo que intentaba explicar las razones detrás del éxito del actor con el que ya trabajó en tres films: La traición , Magic Mike y la inminente Side Effects .
A la búsqueda de esa nueva estrella capaz de ir de la acción al drama romántico, de la comedia al suspenso, la industria del cine parece haber encontrado en Tatum a su unicornio. Ser fantástico que puede hacer reír, emocionar y entretener a los públicos más diversos que en el último año empezaron a llenar las salas atraídos por las películas del actor.
"Los fanáticos de Tatum en la industria dicen que les parece atractivo a las mujeres porque es lindo, pero no tanto como para parecer inalcanzable. Al mismo tiempo, su actitud sencilla mezclada con algo de inmadurez hace que los espectadores masculinos lo vean más como un amigo que como la competencia", aventuraba el artículo del New York Times. Si se tiene en cuenta el éxito de Patrulla juvenil, The Vow y Magic Mike en la taquilla norteamericana, habrá que concluir que hay mucho de cierto en esa capacidad del actor de interesar a un amplio espectro de espectadores, una cualidad tan rara como buscada por la industria. Casi tanto o más que el talento para actuar. Algo que hasta el propio Tatum supo reconocer. "Sé que no soy el mejor actor, pero amo la actuación y mejoro con cada nueva película que hago", decía humilde el intérprete que empeñado en ese objetivo este año participará de la secuela de G.I. Joe junto con Bruce Willis, será el héroe del nuevo film de acción de Roland Emmerich, White House Down , junto con Jamie Foxx, se pasará al drama independiente junto a Mark Ruffalo y Vanesa Redgrave, protagonizará y producirá la segunda parte de Patrulla juvenil, y se sumará al elenco de la nueva película de los hermanos Wachowski. Lo dicho, una nueva estrella empeñada en seguir siéndolo por mucho tiempo.