Ben Affleck, cada vez más lejos de Batman

Por las fotos que mostraban a Ben Affleck en caída libre recibiendo pedidos de alcohol en la puerta de su mansión de Los Ángeles, luego ingresando por segunda vez en dos años a un centro de rehabilitación para tratar su adicción a alcohol y las noticias sobre la conclusión de su divorcio de Jennifer Garner con la que tiene tres hijos, estaba claro para el mundo que el actor y director de la premiada Argo no estaba pasando su mejor momento personal.

Claro que en Hollywood la vida íntima y la profesional suelen superponerse en una mezcla de glamour, sordidez, presupuestos millonarios y la esperada falta de empatía de los estudios de cine. Esa combinación es la que, según los expertos en costado financiero de la factoría de películas, está dejando a Affleck fuera de Batman, la postergada película en la que se suponía iba a volver a interpretar al superhéroe del cómic que ya encarnó en Batman v Superman: el origen de la justicia, Escuadrón suicida y La liga de la justicia. Y aunque ya hace tiempo que se hablaba de su posible reemplazo, especialmente desde que renunció a la dirección de la película y su sucesor, Matt Reeves (El planeta de los simios: La guerra), desechó el guion de Affleck y empezó a trabajar en uno nuevo que imaginaba a un Bruce Wayne/Batman más joven, ahora el cambio de estrella estaría directamente relacionado con el comportamiento del actor fuera del set.

Es que como antes había sucedido con Robert Downey Jr , las compañías de seguro que contratan los estudios de cine para asegurarse que los millones de dólares que invierten en las películas no se pierdan por los problemas que pueden afectar a sus estrellas, pedirían unos montos tan altos para asegurar a Affleck que volvería imposible la producción del film en cuestión. El caso del actor de Iron Man es tan raro como paradigmático y para Affleck, aspiracional. La historia de alguien que logró superar su persistente adicción a las drogas -que incluso lo llevó a pasar un tiempo en la cárcel-, pero que luego se recuperó al punto de convertirse en el actor más taquillero y mejor pago de Hollywood, si no fuera real bien podría haber sido una película de esas que cosechan dinero y premios.

En este momento y para el particular caso de Affleck, intérprete, director y guionista ganador del Oscar que desde el principio de su carrera parecía estar siempre en la frontera entre el reconocimiento y el desprecio de la industria, los expertos estiman que mantenerlo en el papel de Batman –un rol por el que fue criticado por los fanáticos del personaje desde el día en que se anunció su casting–, podría costarle a los estudios Warner la mitad del presupuesto de la película. Es decir unos 150 millones de dólares si se toma como base los 300 millones que costó La liga de la justicia. Más allá del dinero que implicaría para la producción sostener al actor en el papel también existen problemas de logística como los que tuvo que enfrentar Downey Jr durante años después de su recuperación. Pruebas de antidoping diarias, acompañantes de sobriedad y la desconfianza constante de los financistas que creían que tenerlo como protagonista era una apuesta demasiado alta. Teniendo en cuenta los esfuerzos que están haciendo los estudios Warner por lograr que sus films de superhéroes de DC logren alcanzar a los de Marvel , parece bastante evidente que Affleck es ahora un riesgo que no estarían dispuestos a correr.

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