Bárbara Lennie, la actriz de padres argentinos que hoy filma con Javier Bardem y Ricardo Darín

Ojos en primer plano. La expresión es de duda, desesperación, deseo y desolación. Una maternidad trunca la lleva a viajar al norte del país en busca del bebé que le prometieron. El calor del cuerpito del recién nacido en sus brazos transforma su mirada. La mamá, ya con el vientre vacío, prefiere no ver la escena. Malena es feliz. No mira el cómo, es totalmente ciega ante las manipulaciones macabras de los terceros que especulan con sus deseos y con esa pequeña vida. No ve. Sólo siente. Quiere ser madre... hasta que su mirada hace foco en lo que puede doler, lo que duele, lo que marca, las cicatrices, la miseria, lo vulnerable, el niño.

Bárbara Lennie , la chica de los ojos en primer plano, es la protagonista de Una especie de familia, una suerte de road movie que retrata el tema de las adopciones ilegales en el norte del país y que se estrenó la semana pasada en la pantalla grande con muy buenas críticas. Con su actuación, la actriz sostiene en tono muy íntimo una historia con pocos diálogos y muchos silencios, en los que el espectador puede tejer sus propios pensamientos con la trama.

“Malena viene viviendo casi por inercia y llega un momento en que el nivel de riesgo sobre lo que está haciendo es demasiado alto como para seguir adelante. Creo que se da cuenta de que no es la manera de tener un hijo, de que se le fue de las manos. Creo que lo principal es que la película plantea las preguntas y las contradicciones que se generan en torno a este tema dejando que sea el espectador el que las complete”, dice Lennie a LA NACION sobre la película dirigida por Diego Lerman .

Pero, ¿quién es la mujer detrás de este personaje? De padres argentinos, Lennie nació en España en 1984. Cuando era pequeña vivió en la Argentina, pero a los seis años junto su familia se instaló en el país ibérico, donde hoy triunfa como actriz. Tan así, que se encuentra filmando Todos lo saben con Penélope Cruz , Javier Bardem y Ricardo Darín, en Madrid. Además, ya cosechó varias nominaciones a premios y ganó el Goya a mejor actriz por su papel en Magical Girl (2014) y, en 2011, fue dirigida por Pedro Almodóvar en La piel que habito.

Desde la crítica española se destaca su facilidad de hacer personajes muy disimiles entre sí, desde una mujer que en tono de humor ve que la vida le pasa por delante sin poder tomar las riendas de su presente, en María y los demás (una suerte de Bridget Jones española) hasta interpretar a una víctima que analiza desde el silencio su venganza, en La piel que habito. Pero su carrera no sólo encontró terreno fértil en la pantalla grande, también lo hizo en la televisión española y en el teatro.

“Creo que la libertad, la comodidad y la plenitud de protagonizar diferentes personajes depende más de lo bueno o malo del guión, del director o directora con la que te encuentres, del momento vital que estés atravesando o de cómo de fluido se dé el trabajo con el equipo, que del género en sí en el que estés metida. Es verdad que cada estilo requiere afinar tu instrumento en una dirección u otra, pero todo puede ser fácil si te ayudan a tocar las notas adecuadas”, detalla Lennie.

Argentina, una especie de familia

En medio del rodaje del film junto a Darín, Bardem y Cruz, Lennie se toma un tiempo para contestar las preguntas de LA NACION. Habla sobre el film y de sus ganas de seguir trabajando en el país. Su idea es vivir su profesión como un viaje, sea en España, en la Argentina u otra parte del mundo. En teatro o en cine. Es celosa de su intimidad. Sólo se sabe de ella que está de novia con quien fue marido hace unos años de la recientemente fallecida sobrina de Miguel Bosse, Bimba y pasa sus días con las hijas de él.

-Cuando eras chica viviste un tiempo en la Argentina, ¿qué recordás de esos años?

-Recuerdo la casa en la que vivíamos, algunas plazas, calles, arboles. Recuerdo muchas situaciones familiares, la casa en City Bell de mis abuelos, la Navidad, el jardín, las inundaciones en casa, la tortuga que tenía. Lo que tengo más presente es el amor enorme que me daba mi familia, la felicidad total de mi primera infancia.

- Para filmar Una especie de familia viviste dos meses en Misiones y rodaron también en Catamarca, ¿cómo fue esa experiencia?

-Intensa... Toda esa cosa fronteriza, ese tráfico constante de personas y cargas varias, la naturaleza tan presente, verde, roja, el sol, el calor, la lluvias, los cortes constantes de electricidad, el estar bastante aislados tanto tiempo. Fue un viaje muy exigente y muy mágico al mismo tiempo. Catamarca es un lugar bellísimo, poético, inmenso. Me alucinó por completo. Nos encontramos con gente encantadora y rodamos muy felizmente. Creo que ese cambio de paisaje le da un vuelo muy magnético a la película. Como que de repente entra en otro estadío, más poético, menos pegado a la tierra.

- Algo que se destaca del film es la actuación de Yanina Avila, en el papel de la madre biológica del bebé. Tanto ella como otros de los participantes del film no son actores. ¿Cómo fue trabajar con personas que no eran actores?

-Por un lado, maravilloso y por otro, complicado. Al no compartir los mismos códigos ni el mismo lenguaje una tiene que hacer un doble esfuerzo. Es como si tuvieras que vivir las secuencias de una manera completamente verdadera y sin trampa actoral alguna y a la vez dirigir desde adentro lo que está pasando para que se cuente lo que se tiene que contar en cada momento. Pero fue muy especial. Sobre todo con Yanina que tiene algo de animal escénico increíble.

- A nivel personal, ¿hay algo que te haya afectado de la experiencia de rodar sobre ese tema tan delicado?

-Lo que me hizo es pensar sobre la maternidad, sobre lo que me genera a mí este tema. Me hizo cuestionarme algunas cosas y sobre todo me exigió mucha entrega emocional y física.

- ¿Cómo se conforma esa “especie de familia” en el film?

-La película plantea esa pregunta y creo que cada espectador decidirá cómo se conforma. Tengo la impresión de que la familia convencional es una especie en extinción. Necesariamente.

- Para Malena la maternidad, tanto la trunca como la deseada, parece estar en primer lugar. En vos a nivel personal, ahora que estás en pareja con un hombre que tiene hijas de otras parejas, ¿en qué lugar se encuentra?

-En un lugar íntimo.

- Hay quienes creen que la maternidad es un derecho, ¿qué opinás al respecto?

-Lo que tengo clarísimo es que no es una obligación. Y si una mujer quiere ser madre está en todo su derecho de ponerse en marcha para serlo. Creo que lo importante es que se desarrollen más políticas de protección de la maternidad e igualdad de géneros. Y creo que la maternidad como concepto es algo que cada mujer vive de manera diferente y única.

¿El sueño del crossover?

Una especie de familia es una suerte de pie que pone Lennie en el país para expandir su carrera. Con ganas de ampliar su viaje profesional hacia otras fronteras, confiesa que le “encantaría” hacer más films en el país y que hacer teatro también sería un sueño. “Tengo muchos amigos en teatro. Lo último que vi en el país es Mi hijo sólo camina un poco más lento dirigido por Cacace”, explica.

- Estás desarrollando una carrera a paso firme, ¿cómo la vivís?

-Estoy en un momento muy pleno de mi vida. Hago proyectos que me entusiasman y puedo elegir y vivir de lo que me gusta, así que me siento una privilegiada. Me encantaría que esto siga siendo así por mucho tiempo. También me gustaría generar el trabajo desde otro lugar, ponerme en un lugar diferente al de actriz.

- Estás filmando con Darín, Cruz y Bardem ¿cómo es esta experiencia? ¿De qué se trata el film?

-Puedo contar muy poco del film. Te puedo decir que es algo parecido a un thriller rural o social. Interpreto a una mujer que se llama Bea y que tiene un viñedo junto con su marido, Paco, que interpreta Javier Bardem. En un momento dado, ella ve cómo toda su vida peligra a partir de un suceso durante la celebración de una boda. Estoy fascinada con este proyecto. El director Asgar Farhadi es de otro planeta, su nivel de sutileza, precisión y sensibilidad. Y por supuesto, trabajar rodeada de estos actorazos es un lujo total.

- ¿Te gustaría hacer un crossover al estilo de Penélope Cruz?

-Me gustaría poder trabajar un poco en todas partes, eso es lo que me gustaría. El viaje de Penélope me parece maravilloso y admirable, es el suyo, único e irrepetible.

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