El sábado pasado Coti dio el primer autoconcierto de Buenos Aires en medio de la pandemia: cerca de las 18:30, para una primera función de prensa e invitados VIP, con su banda Los Brillantes, Coti comenzó su actuación sobre un camión convertido en escenario en el playón de Malloy’s, en el bajo de Martínez, mientras familias, parejas y grupos de amigos veían el recital desde dentro de 80 autos repartidos en filas.
"Traten de hacer ritmo con las bocinas o las luces", bromeó Coti con su público luego de la canción inicial de su set, en un intento de acortar la distancia física de este formato que a comienzos de agosto ya había sido probado por el grupo Abelardos en Comodoro Rivadavia. De esa manera, una lluvia de bocinazos casi espontánea instalaba un nuevo lenguaje de diálogo entre artista y espectador. Aceptando el juego, la distancia, y sobre todo el gélido viento que soplaba desde el Río de la Plata, Los Brillantes se despacharon con algunos himnos pop-rock de esos que ungieron a Coti como el arquitecto musical favorito de las radios: "Antes que ver el sol", "Otra vez", "Nada Fue un error", el hit coescrito con Julieta Venegas "Andar conmigo" y, el recientemente grabado durante la cuarentena, "Por ahí".
"Estamos felices, abriendo una puerta que ojalá no se cierre nunca", dijo visiblemente emocionado antes de tocar una versión muy rockera del también coescrito con Venegas "Lento". "Al final todo en la vida tiene su tiempo y hay que tener paciencia", agregó.
Para ingresar al predio hubo un estricto protocolo de sanidad, que incluyó revisión de temperatura a cada uno de los asistentes, el uso de tapabocas en las inmediaciones y la limpieza con alcohol en gel y turnos para acceder a los baños. Al mismo tiempo, para evitar la circulación arbitraria de la gente, hubo un servicio de catering mediante WhatsApp que iba puerta a puerta, se transmitió el audio del show con una mezcla especial en alta definición vía FM y, al finalizar el espectáculo, los autos salieron por un camino diferente al de la entrada.
"Todo esto es ir adaptándose a nuevas realidades. En ese sentido, los músicos estamos preparados. El hecho de haber estado en escenarios disímiles, algunos grandes, otros chicos, en teatros o en lugares abiertos, creo que me da la experiencia para adaptarme a una situación como esta. No lo veo como un inconveniente", dijo Coti a LA NACIÓN, agregando también la intención de llevar el ciclo hacia otras ciudades, considerando el permiso de las autoridades sanitarias. "La idea es extender esto, porque hasta que no esté la vacuna generalizada en la población, los conciertos, tal como los vivíamos antes, van a tardar en volver".
Tal como anticipó hace unos meses Rolling Stone, la iniciativa tomó forma a partir de Aerolife, el autocine generado en el estacionamiento del aeropuerto internacional de Carrasco, en Uruguay, y ya cuenta también con otros proyectos aprobados en Buenos Aires: ayer también debutó uno en el estadio Obras y próximamente comenzarán a operar otras propuestas en La Rural y Mandarine Punta Carrasco.
El gigante clubber de la Costanera Norte, en el que usualmente ingresaban entre 15.000 y 20.000 espectadores, dispondrá de dos salas: Mandarine Park (con espacio para 183 vehículos), y Mandarine Tent (con capacidad para 72). En un principio se proyectarán películas infantiles, así como también documentales y filmaciones de shows, para luego comenzar con autoeventos similares al de Coti y fiestas con DJs.
"Trabajar la habilitación para este espacio fue una buena experiencia porque el Ministerio de Cultura nos acompañó en todo y dispuso una persona que nos ayudó a articular con los distintos organismos: Tránsito, AGC [Agencia Gubernamental de Control], Salubridad", dice Martín Mercado, líder de Estamos Felices y uno de los programadores del autocine en Mandarine Park. Para las proyecciones instalarán una pantalla Full HD 4K, y para armar la grilla de los shows musicales ya están en conversación con distintos artistas como Benjamín Amadeo, Juana Molina y el DJ Mariano Mellino, entre otros.
A diferencia de otros eventos físicos, antes de comprar la entrada el espectador debe realizar una declaración jurada donde debe consignar la patente de su vehículo y, en caso de asistir acompañado, demostrar vínculo de convivencia o bien asumir responsabilidad legal en caso de que se trate de un amigo.
"Como esto es un tipo de espectáculo bastante más chico de los que solemos realizar, como quizás un festival masivo, los mayores recaudos logísticos que hay que tener son exigencias de precaución y sanidad del protocolo", destaca Mercado. "Por eso lo ideal es que la gente le ponga buena onda, entienda y respete como es la realidad de ahora". Desde la producción también destacaron la configuración de cuatro grupos de trabajo diferentes, que no se cruzan entre sí, para aislar y suplantar a todos los trabajadores del predio si apareciera algún caso de infección por covid-19. "Está bueno porque es una forma de reactivar la rueda y encima está pensado para toda la familia: los padres, los niños y obviamente los jóvenes a los que les gusta la música", completa Mercado.
Otras noticias de Covid
Más leídas de Espectáculos
En Nueva York. Mafalda, invitada especial en la gala de los Emmy Internacional, cumplirá uno de sus grandes sueños
“Eternamente agradecido”. Gastón Pauls reveló el rol que cumplió Marcela Kloosterboer en su recuperación de las adicciones
"El dolor fue real”. Denzel Washington: su cambio físico, la ayuda que recibió de Lenny Kravitz y una impensada confesión
"Destruido para siempre". La contundente respuesta de Pampita a García Moritán y el nuevo paso que dio en su relación con Martín Pepa