Venezuela: Repudio internacional ante la “designación ilegal" del Consejo Electoral y la “manipulación” de las elecciones
VENEZUELA.- El Grupo de Lima, el Grupo de Contacto, Estados Unidos y la Unión Europea coincidieron ayer en mostrar su repudio ante la puesta en marcha del plan revolucionario para convocar unas elecciones parlamentarias este año con control absoluto. Las últimas maniobras confirman que el chavismo no solo pretende manejar al árbitro electoral, sino también a los partidos que compitan e incluso a los candidatos que se presenten.
"(Los miembros del Grupo de Lima) rechazan y desconocen la ilegal designación de los miembros del Consejo Nacional Electoral (CNE) mediante una sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que vulnera abiertamente la Constitución venezolana y socava las garantías mínimas necesarias para cualquier proceso electoral y para el retorno de la democracia en Venezuela", destacaron en un comunicado firmado por los gobiernos de Colombia, Chile, Canadá, Brasil, Paraguay, Perú, Santa Lucía, Bolivia, Costa Rica, Guatemala, Honduras y Paraguay, además de la presidencia encargada de Venezuela.
Los países de la región insistieron en la necesidad de celebrar unas elecciones libres, justas y creíbles, con un CNE independiente, un TSJ imparcial, "así como la plena libertad de prensa y participación política de todos los venezolanos", requerimientos hoy alejados a años luz de la realidad venezolana.
"Maduro continúa con sus esfuerzos de manipular cualquier elección", señaló Estados Unidos por su parte. El Grupo Internacional de Contacto, con Uruguay a la cabeza, lamentó la renovación del CNE, que "socava la credibilidad del próximo proceso electoral". Esta declaración pública fue acordada por Uruguay, Panamá, Costa Rica, Ecuador, Gran Bretaña, la Unión Europea (UE) y siete de sus estados miembro: Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Portugal, España y Suecia.
Precisamente Nicolás Maduro eligió a la UE para descargar su última andanada diplomática: "La Unión Europea que se preocupe del coronavirus, que se preocupe del racismo. No se metan con Venezuela, fuera la UE de Venezuela con su visión colonialista. Aquí hace tiempo derribamos las estatuas de los colonialistas asesinos".
Pese a la polémica mundial, la apisonadora de la revolución no ha dejado de funcionar en las últimas horas. El TSJ ha repetido la misma operación de ayer y ha entregado las siglas y las sedes del centrista Primero Justicia (PJ) al diputado "traidor" José Brito. Se da el caso de que este parlamentario es uno de los que conforma el grupo alrededor del empresario colombiano Alex Saab, detenido en Cabo Verde y cuya extradición reclama Estados Unidos. Tanto Washington como Luisa Ortega, fiscal legítima de Venezuela, acusan a Saab de ser el principal testaferro de Maduro y el operador clave internacional de la revolución.
Con la toma de Acción Democrática (AD), acaecida anoche, y Primero Justicia, el chavismo se hace con los dos partidos más importantes de la oposición, en busca de la ecuación electoral perfecta: controlar al árbitro electoral y a las directivas de los partidos rivales, además de elegir quiénes serán los candidatos que se enfrenten a los suyos.
"Un bloque importante de la oposición quiere participar en las elecciones parlamentarias. Se están dado garantías extraordinarias. Bienvenidos, vamos al juego electoral", se ufanó el "presidente pueblo", que dejó traslucir su alegría por los últimos acontecimientos.
"Tenemos la oportunidad de sacarnos de encima a (Juan) Guaidó, a Julio Borges (canciller de Guaidó) y a Henry Ramos Allup (líder de AD) con el voto", aventuró Maduro, pese a que todos ellos están sancionados e inhabilitados. "Algunos han dicho que no van a las elecciones porque saben que las tienen perdidas, se las ganamos de calle", concluyó Maduro, pese a que todas las encuestas reflejan el mínimo respaldo electoral actual del chavismo.
En el seno de la oposición están convencidos de que en las próximas horas seguirá la persecución contra los dos partidos que quedan del G-4. Se trata del socialcristiano Un Nuevo Tiempo (UNT), que espera una sentencia en contra hoy miércoles, y de Voluntad Popular, el partido de Juan Guaidó y de Leopoldo López, refugiado en la Embajada de España en Caracas.
"Hay que recordarles a los miserables alacranes que el PSUV no ganó el poder, lo robó. En cambio, fuerzas como AD, PJ y todos los que han sacrificado nacieron para ir contra el totalitarismo que hoy ellos abrazan", protestó Guaidó.
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