Uruguay: el FA mantiene el favoritismo para el domingo, pero la oposición confía en el ballottage

MONTEVIDEO.- Uruguay vive la tensión de la veda electoral, tras una campaña proselitista que cerró con incertidumbre sobre el resultado de las elecciones del próximo domingo y ante una disyuntiva que los propios líderes exponen como un cruce de caminos para el país.

Conocidas todas las encuestas, no hay favoritos para ganar el gobierno, aunque sí se anticipa que sería necesaria una segunda vuelta el 24 de noviembre, entre el candidato oficialista, Daniel Martínez (Frente Amplio), y el desafiante Luis Lacalle Pou (Partido Nacional), abanderado de una coalición de partidos opositores al gobierno actual.

De las cinco encuestadoras, cuatro dan una intención de voto de 40% a 41% para el oficialismo, lo que sería una baja fuerte respecto al 48% de la última elección.

Pero la otra encuesta que hace su sondeo por redes sociales asigna 43,6% al Frente Amplio, lo que renueva la confianza del partido de gobierno de lograr la cuarta victoria consecutiva. Y además, las otras encuestadoras manejan una banda oscilante de dos o tres puntos, lo que alimenta expectativa para la izquierda.

El final de campaña fue con un repunte de la izquierda, que dejó atrás el pesimismo que persistía hasta el invierno y que tiñó Montevideo con su bandera tricolor, que recuerda uno de los símbolos del artiguismo.

Curiosamente, el otro fenómeno de campaña, el nuevo partido Cabildo Abierto, que tiene un perfil ideológico de derecha, también levanta una bandera del prócer José Artigas.

Ambas banderas son de 1815: la de Cabildo fue usada por Artigas en enero de ese año, y la del Frente Amplio fue izada en Montevideo en marzo de ese año.

Lacalle Pou trabajó un acuerdo con los otros partidos de la oposición, fundamental el Partido Colorado, un partido chico de centro izquierda (Partido Independiente) y el nuevo lema; las conversaciones muestran que hay consenso para presentarse como alternativa al Frente Amplio.

El Partido Nacional "blancos" tiene una intención de voto de 24,5% a 29%; los colorados, de 12% a 16%, y Cabildo Abierto, de 9,5% a 12%. O sea que esa alianza, dispuesta a suscribir un compromiso de programa, supera el 50%.

Por lo tanto, si la proyección de las encuestas va en línea con el resultado del domingo, esa alianza estaría logrando mayoría parlamentaria en ambas cámaras, y Lacalle Pou espera presentar eso como carta de triunfo.

En ese caso, el Frente Amplio no tendría control de Senado ni de Diputados y no contaría con partidos o sectores con los que pueda hacer acuerdos.

En tanto, respecto al plebiscito sobre medidas de refuerzo del combate al delito, con participación de un nuevo cuerpo integrado por militares y penas más duras para delincuentes, las encuestas muestran una mayoría a favor, pero con tendencia a la baja. Ninguno de los candidatos presidenciales acompaña la enmienda constitucional a plebiscitar, pero la opinión pública se ha mostrado mayoritariamente a favor de todo lo que es endurecimiento de penas, lo que hace imprevisible el resultado del plebiscito simultáneo a la elección.

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