Ursula von der Leyen va por su segundo mandato al frente de la Comisión Europea
La funcionaria alemana busca revalidar su cargo como titular del Ejecutivo del bloque de los 27, con la seguridad como tema central en la agenda
- 6 minutos de lectura'
PARÍS.– Tras meses de especulaciones, Ursula von der Leyen oficializó esta semana su candidatura a un segundo mandato al frente de la Comisión Europea (CE). La ex ministra de Defensa alemana lo anunció el lunes en Berlín durante una reunión de su partido, la democracia cristiana (CDU), que le otorgó de inmediato su bendición.
Una bendición que es apenas un primer paso en un largo y preciso camino. Después será el turno del congreso del Partido Popular Europeo (PPE), el 6 y 7 de marzo, en Bucarest, durante el cual la presidenta de la CE deberá ser formalmente designada jefa de fila –spitzenkandidat– de la derecha europea para las elecciones de junio próximo.
Se trata solo de una formalidad, sabiendo que Von der Leyen –“VDL”, como la llaman en Bruselas– no tiene otro adversario del PPE para esa cita electoral. La presidenta saliente de la Comisión es “la candidata natural” a su propia sucesión.
“Si el PPE llegara primero en las elecciones como lo prevén los sondeos, será la futura presidenta. Al menos es la que tiene más posibilidades de serlo, sabiendo que los 27 países miembros deberán, después de los comicios europeos, ponerse de acuerdo antes de que el Parlamento europeo valide esa decisión con una votación por mayoría”, analiza Jean-Dominique Giuliani, presidente de la Fundación Robert Schuman.
Las cosas fueron mucho más simples para Von der Leyen en 2019 cuando había sido designada in extremis, sin siquiera ser candidata. Los 27 venían de “eliminar” al alemán Manfred Weber y al holandés Frans Timmermans –respectivamente spitzenkandidat del PPE y de la familia europea social-demócrata (S&D)– antes de que el nombre de la protegida de Angela Merkel fuera propuesto por Emmanuel Macron y aceptado por sus pares.
El Parlamento Europeo había entonces criticado el método, convencido de que los jefes de gobierno y de Estado del bloque “le habían robado las elecciones”.
“Pero, si bien Von der Leyen no tiene más remedio que plegarse esta vez a las reglas, tampoco irá hasta el final de esa lógica. Porque, en efecto, no será oficialmente candidata por su partido, la CDU. Su nombre no estará en ninguna lista en Alemania”, analiza Giuliani.
Su caso no será el único. Antes que ella, el luxemburgués Jean-Claude Juncker tampoco fue formalmente candidato a una banca de eurodiputado al ser designado en 2014 jefe de fila del PPE.
Negociaciones
Para los jefes de Estado y de gobierno, el nuevo mandato de VLD para la Comisión no debería ser un problema. Los líderes deberán ponerse de acuerdo, es verdad. Pero, como también deberán escoger al futuro presidente del Consejo y al futuro Alto Representante de la UE para las Relaciones Exteriores seguramente cada uno de los miembros de las grandes formaciones políticas de la UE –PPE, S&D y Renew (liberales)– negociará su parte. En caso de bloqueo, los 27 podrían sacar un candidato de la galera, como hicieron en 2019.
Los nombres de la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, y del ex primer ministro italiano, Mario Draghi, circularon con insistencia estas últimas semanas, aunque nadie cree demasiado en esos escenarios. Partido mayoritario en el bloque desde hace décadas, el PPE, que cuenta con 12 líderes en la mesa del Consejo Europeo, aprovechará todo su peso. La votación se hace, además, a mayoría calificada.
“Teniendo en cuenta las múltiples crisis que debe afrontar la UE, los líderes preferirán optar por la estabilidad conservando a UVD”, afirma Patrick Martin-Genier, especialista en relaciones internacionales.
Currículum
Ursula von der Leyen tiene, en todo caso, un curriculum excepcional. Nacida en la ciudad belga de Ixelles en 1958 con el apellido Albretch, esa mujer menuda, serena e invariablemente sonriente, es perfectamente trilingüe (francés, alemán, inglés), diplomada en matemáticas y ciencias, egresada de ciencias económicas de las universidades de Gottingen y Munster y de la London School of Economics y doctora en medicina, recibida en la universidad Gottfried Wilhelm Liebniz de Hannover.
En 1986 se casó con el médico alemán Heiko von der Leyen, con quien tuvo siete hijos. Su carrera política comenzó en 1990, cuando se incorporó a la Unión demócrata-cristiana alemana (CDU), partido del cual su padre había sido vicepresidente federal.
Durante su primer mandato al frente de la CE, la ex ministra de Defensa alemana tuvo que hacer frente a crisis excepcionales e inéditas como el Covid-19 y la guerra en Ucrania. Aun cuando no faltaron errores de apreciación o de comunicación, esa jinete fuera de lo común ha sido capaz de dejar pasar la tormenta y volver a la competición, sin alejarse un milímetro de su proverbial cortesía.
Así sucedió a comienzos de 2021, cuando los líderes europeos, desesperados por la falta de vacunas, solicitaron a sus embajadores ante la UE y al comisario europeo Thierry Breton que se ocuparan del expediente. También sucedió cuando la CE propuso fijar una frontera en torno a Irlanda en el complicado caso del Brexit.
“Y más recientemente, en octubre de 2023, cuando VDL viajó a Israel y no dijo una sola palabra sobre los muertos de Gaza, olvidando que ella representa no solo a Alemania, sino a toda Europa”, dice Martin-Genier.
También se le reprochó ser demasiado solitaria y vertical. A fines de noviembre, un diplomático europeo lo evocaba en el caso del lanzamiento de la adhesión de Ucrania al bloque y los 50.000 millones de euros de ayuda prometidos a Kiev por VDL, como si ya hubiese sido decidido. “A fuerza de decir ‘yo decidí’, la gente termina por preguntarse ‘¿por qué ella?’”, lamentó.
Pero Von der Leyen tiene el apoyo del canciller alemán Olaf Scholz. Y muy probablemente el de Emmanuel Macron. La actual presidenta de la CE viajó mucho estos meses con los dirigentes europeos, sobre todo con la italiana Giorgia Meloni y el español Pedro Sánchez, cuyo apoyo será crucial.
“También pasó algunos días con el griego Kyriakos Mitsotakis el verano pasado. No hay duda que su decisión está tomada desde hace tiempo”, señala Giuliani.
Si lo obtiene, su segundo mandato será sin duda muy diferente del primero. El pacto verde (Green Deal), que trastornó a cantidad de capitales europeas con manifestaciones multitudinarias de agricultores, seguirá su camino, pero no tendrá el primer lugar. El tema central será la seguridad de la UE.
En momentos en que los europeos deben reforzar urgentemente sus medios militares, VDL defendió la semana pasada en Munich la creación del puesto de comisario europeo de la Defensa, a cargo de las industrias del sector. La ampliación de la UE y las reformas internas del bloque también serán temas prioritarios de su próximo mandato.
Otras noticias de Alemania
Más leídas de El Mundo
“No sabemos quién puede ganar”. Balotaje en Uruguay: las encuestas muestran una diferencia que se achica y anticipan una noche de suspenso
Tiene capacidad nuclear. Qué se sabe del misil hipersónico "experimental" que Rusia lanzó contra Ucrania
"Chicos de la vergüenza". Frida, la cantante de ABBA que se convirtió en la cara más conocida de un plan racial nazi
Mensaje a Occidente. Putin hace temblar a Europa con un misil y evoca una guerra mundial: ¿qué busca?