Tras los disturbios, Cameron da más poder a la policía
El gobierno emitirá una directiva para contener incidentes que contempla el toque de queda
LONDRES.- Después de haber provocado duras críticas de los jefes policiales por su decisión de contratar a un policía estrella norteamericano para aplicar la "tolerancia cero" en Gran Bretaña, el gobierno de David Cameron suavizó ayer sus cuestionamientos a la fuerza de seguridad y anunció que dará, en breve, más poder a la policía para enfrentar disturbios.
Entre las tácticas "más robustas" promovidas por el primer ministro, se encuentra el toque de queda y el arresto domiciliario para menores de 16 años.
"Bajo las leyes vigentes hasta ahora no hay posibilidad de decretar un toque de queda general en una zona determinada", dijo la ministra del Interior, Theresa May, al presentar las medidas en estudio.
También está limitada la posibilidad de imponer un toque de queda a los menores de 16 años, según el gobierno, protagonistas excluyentes de los incidentes, para que funcione como una suerte de "arresto domiciliario". "Son cambios de los que debemos hablar", dijo May.
Sus declaraciones se produjeron en medio de un fuerte debate en el país por la "criminalización" de la revuelta en Londres y otras ciudades inglesas que tuvo en vilo a Gran Bretaña en los últimos días.
Mientras el gobierno insiste en que los actos vandálicos, que incluyeron saqueos en varias ciudades, constituyen una expresión lisa y llana de criminalidad, varios analistas afirman que los hechos de violencia se vinculan con el severo ajuste de las cuentas públicas que está aplicando Cameron.
En cuanto a la policía, el gobierno se quejó de una "reacción blanda" de los agentes para contener los incidentes y contrató al comisario norteamericano Bill Bratton para aplicar la "tolerancia cero".
La decisión molestó mucho a los jefes policiales, fastidiados por el recorte del 20% en el presupuesto de la fuerza decidido por Cameron, que rechazaron "aprender lecciones" de los norteamericanos. Sin embargo, May -que hasta ahora fue una dura crítica de la actuación policial- cambió de actitud y buscó mostrarse ayer más conciliadora. Sostuvo que algunos policías dijeron sentirse "abandonados" por las autoridades, debido a críticas del pasado por las tácticas policiales, que los "condenan si actúan y también si no actúan".
Y añadió que los policías fueron criticados en el pasado por ser "demasiado duros", pero que ahora contarán con su apoyo si actúan "dentro de la ley y la razón".
Sin embargo, May estuvo lejos de contentar a la policía. Paul McKeever, vocero de la Federación Policial, sostuvo que el discurso de May "fue una verdadera cachetada en la cara" de la policía, debido a que la ministra "demostró que seguirá exigiendo más a pesar de los recortes presupuestarios al sector".
Por otro lado, el vicepremier Nick Clegg dijo que los causantes de los destrozos serán obligados a limpiar las zonas afectadas. Además, la policía encausó a un joven de 16 años acusado de asesinar a un jubilado de 68 años en los disturbios.
Agencias ANSA, Reuters y AP
EL GRUPO MURDOCH, OTRA VEZ EN LA MIRA
LONDRES (EFE).– El escándalo de las escuchas ilegales deNews of the World resurgió ayer, tras la divulgación de nuevas pruebas que señalan que esa práctica fue consentida por su entonces director Andy Coulson y encubierta durante años por la empresa News International, de Rupert Murdoch.