Simba: la emotiva mejoría del león al que sus captores le quebraron las patas
LA NACION
La historia de Simba, un cachorro de león que actualmente se encuentra en Daguestán, Rusia, conmueve a todos en el mundo virtual. El animal fue víctima de maltrato y explotado con fines comerciales: le fracturaron las patas traseras para que no pudiera moverse y lo utilizaban como "atractivo turístico" a través de la venta de selfies junto al felino.
Cuando tenía a penas unos meses los hombres que utilizaban al león le quebraron las patas para que "estuviera manso" cada vez que los turistas de Izberbash, una ciudad balneario rusa ubicada a orillas del Mar Caspio, quisieran sacarse una foto junto a él.
El animal estaba desnutrido y deshidratado, y cuando ya no fue "útil" para los traficantes de animales, decidieron abandonarlo: lo encerraron en un granero, lo encadenaron y lo dejaron librado a su suerte. Todavía no se sabe como terminó en un circo de la República de Daguestán, donde el animal se recuperó y fue puesto a la venta.
La historia del león llegó a Karén Dalakián, el director de una asociación protectora de animales de la región de Cheliábinsk, que puso en marcha un operativo de rescate y viajó 2500 kilómetros para salvarlo.
Al recuperar al felino el veterinario explicó que había recibido "una inmensidad de daños por parte del hombre": además de la fractura de sus patas tenía heridas en la columna vertebral, obstrucciones intestinales y una considerable pérdida de masa muscular en sus extremidades. En este sentido, denunció en sus redes sociales que nadie había investigado el caso de Simba.
"Estaba muerto de hambre, muy desmejorado y apenas se podía mover. Sus posibilidades de recuperación eran mínimas. Es un milagro que se haya podido rehabilitar y que hoy ya pueda saltar", sentenció Dalakián en diálogo con el Daily Mail. Según el experto fue gracias a la edad del cachorro que los huesos pudieron reconstituirse de una forma tan rápida.
El reclamo por una investigación seria sobre lo ocurrido llegó al mismísimo presidente de Rusia, Vladimir Putin, gracias a una videoconferencia sobre ecología y protección de animales que tuvo lugar el 5 de junio. "Todavía no había terminado el encuentro que se transmitió en directo por televisión y ya me estaban llamando de la policía de Daguestán", reveló el veterinario.
"Nuestra tarea no es solo salvar al cachorro, sino también castigar a los canallas que explotan a los animales", sentenció Dalakián, y le agradeció a Putin que pusiera cartas en el asunto para que encontraran a los traficantes de animales que maltrataban a Simba.
En las publicaciones más recientes del veterinario se ve al cachorro casi totalmente recuperado, jugando con los peluches que le regalaron. Cuando el felino que lleva su nombre en honor a la película de Disney, El Rey León, haya superado todos sus problemas de salud, analizarán las posibilidades de trasladarlo a África para que crezca en su hábitat natural.
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