Se estrelló un avión en la India: 158 muertos y ocho sobrevivientes

MANGALORE, India.- Un avión de pasajeros de Air India Express se estrelló ayer durante el aterrizaje en el sur de India, lo que causó la muerte de 158 personas, muchas de las cuales eran trabajadores indios que regresaban a su país desde Dubai.

Hubo sólo ocho sobrevivientes; tres de ellos, niños. El Boeing 737, con 166 personas a bordo, incluidos sus tripulantes, se salió de pista al aterrizar y chocó contra un muro de sacos de arena, antes de virar y golpear con un ala una estructura de hormigón.

El avión perdió el ala antes de precipitarse casi 300 metros por un barranco, y minutos después se prendió fuego. Antes de que comenzara el incendio, los sobrevivientes lograron escapar por una grieta que se abrió en el fuselaje.

"No teníamos esperanzas de sobrevivir, pero sobrevivimos", dijo a la televisión local Pradeep, un técnico indio que trabaja en Dubai.

"El avión se rompió en dos y salimos de él. En cuanto el avión aterrizó, esto ocurrió en cosa de segundos", añadió.

Umar Faruk, otro de los sobrevivientes, contó: "Luego del aterrizaje, el avión perdió el control, quizá por la explosión de un neumático, y comenzó a desviarse violentamente". Y agregó: "Se incendió y nosotros nos caímos. Miramos hacia arriba y hacia algo que se abría. Vi una brecha en el fuselaje y me tiré".

Con la cabeza vendada, Faruk dijo que luego caminó medio kilómetro hasta que los vecinos de una población cercana le trasladaron en una motocicleta a un centro sanitario.

En el momento de la explosión, lloviznaba, por lo que la pista estaba cubierta de agua. Hay especialistas que estiman que el punto de contacto con la tierra fue muy avanzado y que el piloto no tuvo demasiado espacio para frenar.

La pista de aterrizaje había sido inaugurada hace una semana, tras algunos trabajos de ampliación. De 2,5 kilómetros de largo, fue el blanco de varias críticas, porque las autoridades locales no habrían respetado para su construcción las normativas nacionales e internacionales.

Por su parte, el canciller indio, S.M. Krishna, calificó de complicada la pista de aterrizaje donde ocurrió el accidente, y dijo que "requiere mucha capacidad de parte de los pilotos".

El piloto, Zatlok Glusika, de 55 años, era un británico de origen serbio y trabajaba desde hacía dos años para la compañía nacional india. Era "muy experto", dijo el ministro de la Aviación Civil, Praful Patel, y sugirió que la zona de seguridad, alrededor de la pista, demasiado corta, pudo haber contribuido al desastre.

Se trata de una de las tragedias aéreas más graves de la India. La última ocurrió en 2000, cuando un avión de otra compañía nacional se precipitó en un barrio residencial, cerca del aeropuerto de Patna, estado septentrional de Bihar, hecho que causó la muerte de 60 personas.

Las investigaciones y la tarea de identificación de cuerpos comenzaban ayer a la par que se conocían dramas como el de Samir A. Shaikh, de 24 años, que perdió a 16 familiares en ese vuelo, entre ellos su esposa, dos hijos y una tía.

Entre los 158 muertos hay 19 niños (cuatro recién nacidos). Todos los pasajeros eran ciudadanos indios, según dijo un funcionario de Air India en Dubai. Muchos, posiblemente, eran trabajadores indios contratados en Dubai.

Air India Express es una aerolínea económica, filial de la estatal Air India, que ha estado luchando contra la creciente competencia de compañías privadas. "No hubo señales de auxilio de parte del piloto. Eso significa que entre el piloto y las comunicaciones del aeropuerto no hubo señales de ningún problema", dijo V. P. Agarwal, director de la Autoridad de Aeropuertos de la India.

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