Sacar a Maduro, la apuesta de Trump para cambiarle la cara a la región
WASHINGTON.- Los intentos del gobierno de Donald Trump para forzar la salida del presidente de Venezuela marcan el inicio de una nueva estrategia para que Estados Unidos ejerza mayor influencia en América Latina, según funcionarios del gobierno norteamericano.
En la mira no solo está la Venezuela de Nicolás Maduro , sino también Cuba , un antagonista que ha acaparado la atención norteamericana en la región durante más de 50 años, así como las recientes incursiones en la región de Rusia, Irán y China.
La creciente firmeza de Estados Unidos surge del deseo de la Casa Blanca de revertir el acercamiento parcial con La Habana promovido por el gobierno de Obama a través de una flexibilización de las sanciones comerciales y la apertura de la isla a las inversiones norteamericanas.
La política desarrollada durante los últimos dos años por el gobierno de Trump fue impulsada en parte por el ascenso en el poder de férreos opositores a Cuba, como Mauricio Claver-Carone, funcionario del Consejo de Seguridad Nacional que dedicó gran parte de su vida a lograr la destitución de Fidel Castro .
Las agencias de inteligencia cubanas están profundamente integradas a las fuerzas militares de Venezuela y al aparato de seguridad del chavismo. Venezuela, a su vez, le suministra petróleo a La Habana de manera casi gratuita. A medida que ambos países se fueron quedando más aislados, fortalecieron sus vínculos con Moscú, Teherán y Pekín.
Después de Cuba y Venezuela, los funcionarios norteamericanos ahora han puesto el ojo en Nicaragua. El Departamento de Estado ha advertido sobre el giro autocrático de ese país, entre la violencia y la represión del gobierno. Los nicaragüenses se están sumando a la ola de migrantes que fluyen en masa hacia la frontera de México con Estados Unidos.
"Estados Unidos quiere ver caer las tres puntas del triángulo: La Habana, Caracas y Managua", dijo en noviembre John Bolton, consejero en seguridad nacional, en un discurso en el que reveló la incipiente estrategia norteamericana. Bolton describió a esos tres países como "la troika de la tiranía", y agregó que "esa troika se desmoronará".
Ese mismo día, el gobierno de Trump anunció sanciones contra Cuba y Venezuela que incluían medidas contra entidades que son propiedad o están controladas por los militares y servicios de inteligencia cubanos y de organismos relacionados con el sector del oro en Venezuela.
La estrategia norteamericana entraña serios riesgos. Si el apoyo del gobierno de Trump al líder opositor venezolano Juan Guaidó no logra derrocar a Maduro, o si no logra debilitar los lazos entre Caracas y La Habana, la ya desesperante situación en Venezuela podría agravarse y dejar atado a Estados Unidos a una crisis. Se estima que ya son tres millones los venezolanos que huyeron de su país. Ese fracaso también dejaría sentada una victoria diplomática de David contra Goliat y podría fortalecer eventualmente la posición de China, Irán y Rusia en la región. La principal razón que movió al presidente Obama a buscar un acercamiento con Cuba fue la conclusión de su gobierno de que décadas de embargo económico no habían logrado tumbar al régimen de los Castro.
Es poco probable que Estados Unidos pueda arrastrar a otros países a tomar medidas contra Cuba. Para muchos aliados de Estados Unidos, Venezuela ya era un Estado paria, pero ahora algunos de ellos, como Francia y Canadá, tienen enormes negocios e intereses en Cuba.
Tras meses de contactos entre opositores venezolanos y el gobierno norteamericano, la asunción de Maduro el 10 de enero puso en movimiento a la Asamblea Nacional Venezolana y a la Casa Blanca.
El 22 de enero, altos funcionarios norteamericanos, como Mike Pompeo; el secretario de Comercio, Wilbur Ross; Bolton, y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, discutieron las opciones. En ese momento, Trump decidió que estaba listo para apoyar un cambio de régimen.
Esa noche, el vicepresidente Mike Pence llamó a Guaidó para expresarle la voluntad de Washington de apoyarlo. El día siguiente, Guaidó se autoproclamó presidente y Estados Unidos, junto con Canadá y la mayoría de los países sudamericanos, lo reconoció oficialmente.
"Notamos una verdadera unidad de criterio en la región en las últimas semanas", señaló un funcionario del Tesoro norteamericano. "Es difícil hablar de Venezuela sin hablar al mismo tiempo de Cuba".
La imposición de sanciones contra la petrolera estatal venezolana Pdvsa, anunciadas el 28 de enero, podría costarle a Venezuela hasta US$11.000 millones en exportaciones de crudo a Estados Unidos.
Entre los próximos pasos hay nuevas medidas contra La Habana, como volver a incluir a Cuba en la lista de Estados que financian el terrorismo. Eso podría impactar en el financiamiento y las inversiones de otros países que ahora tienen negocios en la isla, así como los fondos que obtiene por el turismo.
La lista de nuevas sanciones también incluye medidas contra funcionarios cubanos y el levantamiento de las excepciones al embargo que pesa sobre la isla, conocido como ley Helms-Burton, refrendado por todos los gobiernos norteamericanos desde su aplicación, en 1996.
El levantamiento de las excepciones al embargo permitirá que los ciudadanos norteamericanos demanden a individuos y empresas ante los tribunales de Estados Unidos por las propiedades que hayan sido confiscadas por La Habana. Como consecuencia, quedarían congelados miles de millones de dólares de inversiones extranjeras en Cuba.
Se espera que en las próximas semanas el gobierno de Trump anuncie nuevas medidas contra la isla, con el objetivo de obstaculizar la capacidad de La Habana para sostener al régimen de Maduro.
The Wall Street Journal
Traducción de Jaime Arrambide
Ian Talley, Jessica Donati y Vivian Salama
Otras noticias de Donald Trump, presidente de EE.UU.
- 1
Cómo el caso Pelicot relanzó debates jurídicos y sociales y qué podría cambiar tras la sentencia en Francia
- 2
Un ómnibus chocó con un camión y se prendió fuego: 32 muertos
- 3
Día clave en Venezuela: Maduro extrema la represión y piensa en su nuevo mandato como punto de partida hacia un “sistema cubano”
- 4
Vladimir Putin anticipó que habrá “más destrucción” en Ucrania tras los ataques contra Rusia