Rusia: las cárceles de Moscú, colmadas de seguidores de Navalny
MOSCÚ.- Más de 11.000 manifestantes fueron detenidos en todo Rusia tras las protestas en defensa de Aleksei Navalny durante los últimos dos fines de semana y en Moscú y San Petersburgo el martes, luego de que el tribunal sentenciara al opositor ruso a tres años de prisión. Los detenidos relataron sus miserables experiencias cuando las cárceles de la capital se vieron colapsadas y fueron retenidos en condiciones de hacinamiento con pocas precauciones ante el coronavirus.
En tanto, por segunda vez en la semana, Navalny compareció hoy ante un tribunal en Moscú, esta vez acusado de difamar a un veterano de la Segunda Guerra Mundial. El Comité Investigador ruso abrió en junio una pesquisa a Navalny por supuesta difamación por calificar a las personas que aparecían en un video promoviendo una reforma constitucional que permitía ampliar el mandato del presidente, Vladimir Putin, de "títeres corruptos", "gente sin conciencia'' y "traidores''.
Varios videos visibilizaron la situación de los detenidos. En uno, se ve a un grupo de personas dentro de un bus de la policía. Uno de los hombres comenta en la grabación que habían estado retenidos allí nueves horas, y que algunos se vieron obligados a permanecer de pie debido a la aglomeración de personas, sin acceso a alimentos, agua o baños.
"Fuimos detenidos el 31 de enero durante una protesta pacífica, y pedimos ayuda y atención pública por las condiciones inhumanas en las que nos vemos obligados a estar", suplica el hombre dentro del móvil policial. El video fue publicado por primera vez el martes en la aplicación de mensajería Telegram por Sasha Fishman, quien lo recibió de su amigo Dmitry Yepishin, uno de los detenidos en el vehículo.
Otro video muestras el interior de una celda con capacidad para ocho personas, con 28 reclusos hacinados dentro, esperando a ser transferidos. Los catres no tenían colchones y se puede ver la falta de limpieza de un inodoro similar a una letrina.
Desde que comenzaron las protestas, la represión policial en Rusia es motivo de críticas en todo el mundo, en particular en la Unión Europa y en Organismos Internacionales de derechos humanos. Estos últimos grupos comentaron que muchas comisarías se negaron a permitir la entrada de abogados para ayudar a los detenidos.
"Hemos visto antes muchas violaciones [de los derechos humanos]… pero probablemente la escala que vemos ahora es mucho más aterradora que antes", dijo a la agencia de noticias AP, Alexandra Bayeva, coordinadora del grupo de derechos OVD-Info que monitorea los arrestos policiales.
"Esta situación no fue provocada por la policía; fue provocada por participantes de manifestaciones no autorizadas", dijo Dmitry Peskov, el portavoz del Kremlin, quien reconoció el jueves que había más detenidos de los que los centros de detención en Moscú podían procesar.
Muchos manifestantes recibieron cargos por delitos menores que resultaron en penas de cárcel de cinco a 15 días.
Marina Litvinovich, miembro de la Comisión de Monitoreo Público que observa el trato de prisioneros y detenidos, dijo que Moscú simplemente no podía manejar tal afluencia de manifestantes condenados por delitos menores y que necesitaban ser encarcelados durante varios días.
"La primera crisis ocurrió cuando las camionetas y ómnibus de la policía [con detenidos] circulaban ansioso por Moscú y las cárceles no los dejaban entrar. No sabían dónde poner a la gente", dijo Litvinovich. "Algunas personas fueron devueltas a los recintos policiales. Algunos permanecieron todo el día dentro de camionetas de la policía cerca de las cárceles. Otros tuvieron suerte y les dieron comida y los llevaron a los baños. Algunos no tuvieron suerte y tuvieron que orinar en una botella ".
"Fue una situación muy desagradable", dijo Filipp Kuznetsov, quien fue arrestado el 23 de enero y sentenciado a 10 días de cárcel, pero no entró en su celda hasta el 27 de enero. Pasó la primera noche en una celda de detención y la segunda noche en un autobús de la policía esperando a que el centro lo acomode a él y docenas más en un lugar apropiado.
Mientras las cárceles de Moscú desbordaban de personas, las autoridades tuvieron que trasladar a los detenidos a centros de detención fuera de la capital. Se informaron colas de camionetas de la policía en Sakharovo, 65 kilómetros al sur de la ciudad. Las instalaciones en Sakharovo para el jueves por la noche albergaban a 800 personas, de las cuales alrededor del 90% fueron detenidas durante las protestas, informó Litvinovich a la agencia de noticias rusa Tass.
Dmitry Shelomentsev fue uno de los que tuvo que esperar en un vehículo policial durante varias horas en Sakharovo. Condenado a 15 días de cárcel, Shelomentsev envió a la agencia AP un video desde su celda donde estaban retenidas 28 personas, esperando ser trasladadas.
Contó Shelomentsev que no había suficientes camas, no tenían colchones, y que los agentes penitenciarios dejaron solo dos botellas de agua de cinco litros para compartir entre todos los internos. Aclara que tampoco tenían tazas para servirse el agua. Luego de cinco horas en la celda, comentó que lo transfirieron a una más pequeña, para cuatro personas.
"¿Qué medidas [del coronavirus] si éramos 28 en una celda y la gente bebía de la misma jarra?", respondió Shelomentsev cuando se le consultó sobre alguna precaución relacionada con el virus en los centros de detención.
La policía de Moscú dijo el jueves que a los que esperaban ser trasladados se les asignaron celdas de acuerdo con las regulaciones y que había suficiente espacio en las instalaciones de Sakharovo.
Entregarles provisiones y otros elementos básicos requirió esperar fuera de las instalaciones de detención durante horas a temperaturas bajo cero. Anna Chumakova, que pasó todo el día jueves haciendo fila, dijo que unas 150 personas se alinearon al mediodía, pero que solo menos de 40 pudieron recibir sus paquetes antes de la puesta del sol.
Dmitry Zakhvatov, abogado, mencionó que los informes señalaban que decenas de personas durmieron en los pisos de los recintos policiales. "Resaltan lo absurdo" de procesar a algunos aliados de Navalny por violar las restricciones de confinamiento por el coronavirus mediante la organización de protestas callejeras, dijo.
"Es el comienzo, no será solo la primera vez. Es el comienzo del proceso que estas cárceles siempre estarán llenas. Creo que la gente seguirá protestando y las autoridades seguirán siendo brutales", dijo Marina Litvinovich. La situación es "absolutamente sin precedentes".
Agencia AP
Temas
Otras noticias de Actualidad
Más leídas de El Mundo
"Nos engañó". Angela Merkel en el Purgatorio: su partido reniega de la excanciller y el país revisa su legado
Denuncia penal contra el chofer. Murió una pasajera que viajaba en el colectivo que chocó contra la rambla en Montevideo
"Por ustedes no es". La emoción de la reina Letizia al hablar con los afectados por las inundaciones en Valencia
La fortuna de los Windsor. Una investigación revela el origen de los millonarios ingresos del rey Carlos III y el príncipe Guillermo