Realizó una videollamada a su esposo por accidente mientras estaba con su amante y fue golpeada de forma brutal
Un hombre recibió una serie de llamadas explícitas de su cónyuge y fue detenido luego de darle una violenta golpiza
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Un hombre fue detenido luego de agredir brutalmente a su esposa, en un caso de violencia de género que estuvo al borde del asesinato. La violenta golpiza se produjo luego de que la mujer lo llamara de manera accidental mientras mantenía relaciones sexuales con otro hombre dentro de un auto.
La denuncia determinó que William Atkinson, de 34 años, recibió una serie de videollamadas explícitas de su cónyuge el pasado 21 de septiembre, e inmediatamente pidió a un amigo que lo llevara hasta el estacionamiento del hotel para enfrentarse a ella. Los agresivos golpes de Atkinson dejaron a la mujer sangrando, en estado de shock y luchando por respirar.
Según la acusación a la que accedió Daily Mail, al llegar al hotel Best Western del condado de Somerset en el estado de Nueva Jersey (Estados Unidos), Atkinson encontró a su esposa, de 32 años, y a su presunto amante (que no fueron nombrados en el informe policial) y comenzó a golpearla y patearla. Además, Atkinson también golpeó al hombre, quien pudo huir del lugar.
La feroz paliza dejó a la mujer con graves hematomas y sangrando profusamente por la cara, la nariz y la boca. Además, el informe detalló que los oficiales la encontraron “luchando por respirar y pidiendo ayuda”.
Tras ser detenido por los agentes, Atkinson intentó explicar su brutal reacción y se justificó al afirmar que su pareja lo había “incitado” con las vulgares videollamadas. Además, manifestó a los investigadores que solo había golpeado a su mujer con la mano abierta, y no con el puño cerrado ni mucho menos con patadas. Pero un testigo declaró que lo había visto “patear activamente” a la mujer en la cara.
La policía recuperó una de las zapatillas de Atkinson en el lugar de los hechos y constató que estaba empapada de sangre. Sin embargo, los efectivos no pudieron obtener una declaración de la víctima, a la que describieron como “extremadamente intoxicada” y poco cooperativa.
La persona que denunció inicialmente la agresión, en una llamada al 911, aseguró a los agentes que había oído disparar un arma en medio de la disputa. Y aunque “ningún testigo vio quién tenía una pistola”, la policía recuperó un arma de fuego descargada dentro del vehículo en el que llegó Atkinson, pero no encontró ningún cargador ni cartuchos.
Los oficiales también encontraron en el lugar de la brutal agresión un cuchillo y una pistola eléctrica que, según Atkinson, pertenecían a su cónyuge.
Atkinson fue acusado de asalto agravado y de imprudencia temeraria, un delito grave y un delito menor, respectivamente. Sin embargo, otro expediente judicial de un caso similar de hace varios años atrás indicó que la esposa de Atkinson tiene un alarmante pasado delictivo.
En 2016, la mujer fue arrestada por intento de asesinato después de que una discusión con un exnovio terminara a los disparos. En aquella oportunidad, la esposa de Atkinson se declaró culpable y fue condenada a dos años de libertad condicional. Las autoridades no saben si Atkinson era el novio de la mujer en ese momento, es decir, la persona contra quien la mujer disparó el arma de fuego.
Mientras tanto, Atkinson está detenido en la cárcel del condado y se le impuso una fianza de 30.000 dólares. El acusado confesó y admitió sus actos, pero justificó su ataque en una reacción furiosa ante una infidelidad y una supuesta provocación de su mujer. A partir de este momento, la resolución del caso dependerá de la Justicia.
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