París: en plena polémica por su uso, murió un joven en monopatín eléctrico
LA NACION
PARÍS.- Cuando los monopatines eléctricos se vuelven tan populares como polémicos, anoche murió en París la primera persona mientras se trasladaba en esta nueva modalidad de transporte.
El accidente ocurrió alrededor de las 22.30 (hora local), en el distrito de Goutte-d'Or, en el distrito 18 de la capital francesa, según informa el sitio France Info.
De acuerdo con fuentes policiales, el joven accidentado, de 25 años, no respetó la prioridad a la derecha cuando el camión lo embistió. El conductor del camión fue arrestado y se encuentra bajo custodia.
El accidente muestra "la necesidad de recordar las reglas elementales que los usuarios tienen que respetar", dijo Emmanuel Grégoire, primer adjunto de la alcaldesa de París.
"Hay que movilizar a la policía nacional para sancionar a los usuarios que se saltan un semáforo, por ejemplo", añadió.
Una problemática urbana
El accidente fatal ocurre cuando este medio de transporte está en el centro del debate en muchas de las ciudades más importantes del mundo. En París a pesar del crecimiento exponencial, el uso de los monopatines eléctricos no deja de generar controversia y miradas de censura cuando se cruzan en el camino o dejan sus vehículos cruzados en la vereda.
A principios de año se estimaban en 15.000 los dispositivos de alquiler en París. Para fin de año estiman que serán 40.000. Más de una decena de empresas de alquiler operan en la capital francesa. Cada día, cientos de personas se mueven en estos aparatos a orillas del Sena.
Las firmas de alquiler debatieron este año con la alcaldía normas de buena conducta "para un uso controlado y sostenible" y "respeto por el espacio público y la seguridad de los vehículos parisinos".
No es que faltan medidas de regulación: hay multas de 135 euros por andar en la vereda y de 35 euros por estacionar en cualquier lado. Pero no fue suficiente, y a partir de septiembre se prohibirán los dispositivos que excedan los 25 km/h y se deberá transitar exclusivamente por las bicisendas.
Cuestionamientos en todas las ciudades del mundo
Nueva York , a pesar de ser una de las ciudades que suele marcar tendencia en el mundo, se mostró inflexible a la llegada de los monopatines eléctricos a pesar de que las empresas de alquiler golpean a las puertas de los despachos oficiales para que se animen a dar de una vez la señal de largada.
Quienes se arriesguen en Nueva York a transitar en estos nuevo medio de transporte que es furor en muchas otras ciudades del mundo serán objeto de multas de 500 dólares y la confiscación del aparato.
En Barcelona otra de las ciudades donde los monopatines son parte del paisaje urbano la Generalitat determinó que a partir de septiembre estos vehículos deberán transitar obligatoriamente en las bicisendas.
También en Alemania el código de tránsito debió ser reformado adaptándose a la novedad de los "vehículos de propulsión eléctrica sin asiento", según figura en la nueva legislación. Las reglas obligan a los monopatines a circular en bicisendas o en las calles, y se prohíbe el uso a menores de 14 años.
Agencia AFP
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