NUEVA YORK.- En una carta y en correos electrónicos, el líder de Nxivm intentó distanciarse del ritual con el que se marcaba a las mujeres que había llevado a algunos miembros a abandonar el grupo que funcionaba como una secta.
No obstante, las marcas ceremoniales de algunas mujeres involucradas en Nxivm seguían un guion creado por el líder, Keith Raniere, y un puñado de selectos seguidores que le habían prometido completa obediencia, de acuerdo con cuatro conversaciones registradas presentadas la semana pasada como evidencia en el juicio contra Raniere por extorsión y tráfico sexual.
"¿Piensas que la persona que es marcada debería estar completamente desnuda y atada a la mesa como un tipo, casi, de sacrificio?", le preguntó Raniere a la actriz Allison Mack en una grabación.
A continuación, Raniere explicó su visión de cómo los cuerpos de las mujeres deberían ser acomodados antes de ser marcados: "Las piernas rectas y extendidas, los pies sujetados al lado de la mesa, las manos probablemente arriba de la cabeza, sostenida casi como si estuviera atada".
Las mujeres, a las que se refirieron como "esclavas", demostraban su sumisión de una manera indeleble: su piel era quemada con un símbolo que incluía las iniciales de Raniere.
Las grabaciones ofrecieron el primer relato contemporáneo de cómo Raniere ayudó a idear una de las prácticas más secretas y controversiales del grupo dentro de Nxivm. Las marcas estaban vinculadas a una sociedad secreta conectada con Nxivm llamada DOS, un acrónimo de una frase en latín que puede traducirse como "Dominio de las Acompañantes Femeninas Obedientes", con la que había asegurado repetidamente no tener ninguna relación.
Raniere ha negado cualquier hecho ilegal. Su abogado, Marc Agnifilo, dijo el 26 de mayo en un correo electrónico que Raniere estuvo involucrado en la creación de la sociedad secreta pero que no era un miembro. "Él colaboró con los miembros de la primera línea en la creación del grupo y tenía la esperanza de que las mujeres tomaran el control más adelante", dijo Agnifilo.
Además de mostrar cómo Raniere planeó meticulosamente las ceremonias donde marcaban a las mujeres, las grabaciones también ilustran el control que tenía sobre ciertos seguidores."La persona debería pedir ser marcada", dijo Raniere a Mack en una grabación. "Ella debía decir: ‘Por favor, márquenme. Sería un honor’, o algo así, ‘un honor que quiero portar por el resto de mi vida’".
Mack respondió y dijo en dos ocasiones: "Está bien". Una testigo en el caso, Lauren Salzman, dijo en su testimonio que le solicitaron que dijera exactamente esas palabras antes de ser marcada en 2017.
Al juicio de Raniere en la Corte de Distrito Federal en Brooklyn, el cual comenzará su cuarta semana hoy, no le han faltado momentos sorpresivos e incluso impactantes. Ha habido testimonio de que Raniere sostuvo un encuentro sexual con una menor de edad y que personas dentro de Nxivm lo veían como omnisapiente y prácticamente infalible.
No obstante, las marcas a las mujeres que se unieron a la "sororidad" clandestina dentro de Nxivm, llamada The Vow (el voto) o DOS, están en el centro del caso de Nxivm y ofrecen el ejemplo más visible y gráfico del control de Raniere.
Una organización de autoayuda
Raniere, de 58 años, cofundó Nxivm (pronunciado Nex-i-um) en la década de los noventa como una organización de autoayuda con sede en una ciudad suburbana al norte de Nueva York. Ahora enfrenta un juicio por los cargos de crimen organizado, suplantación de identidad, extorsión, trabajo forzado, lavado de dinero, fraude electrónico y tráfico sexual.
Aunque se presentó a sí mismo como un humanitario parecido a un gurú, fiscales y exmiembros de Nxivm han descrito a Raniere como un charlatán que explotaba a sus seguidores.
Entre ellos estaban las ocho mujeres que Raniere reclutó para que se unieran a DOS, y que fueron denominadas como "amas DOS de primera línea". Cada una reclutaba esclavas adicionales, y esas esclavas a su vez reclutaban a otras. Se suponía que todas debían ser leales a Raniere, quien era llamado "gran amo".
Para unirse a DOS, las mujeres entregaban una "garantía" que podían ser fotografías sexuales explícitas u otro material delicado que tenía el objetivo de asegurar su obediencia sin cuestionamiento, de acuerdo con testimonios del juicio. Algunas se dice que fueron asignadas por sus amas para sostener encuentros sexuales con Raniere.
La indignación sobre las marcas causaron que algunos miembros de Nxivm y DOS partieran y generaron publicaciones en blogs y artículos informativos. Poco después, surgió la información de que las autoridades estaban investigando al grupo.
Raniere parecía reconocer que los reportes en los medios sobre las marcas podrían convertirse en una amenaza para Nxivm. Después de que una historia sobre las marcas fuera publicada en The New York Times, envió por correo electrónico un comunicado sobre su postura a las amas de primera línea, de acuerdo con testimonios.
Escribió que las mujeres que habían sido marcadas ahora eran humilladas por una "embestida misógina" y agregó que DOS "no tiene nada que ver" con Nxivm, según testificó Salzman.
"Esta sororidad es autónoma, independiente y distinta de Nxivm, Keith Raniere y asociados", decía el comunicado, y agregaba que él había tenido "poco conocimiento o autoridad en el asunto".
En una carta por separado dirigida a los miembros de Nxivm, Raniere escribió: "Siento que es importante clarificar que la sororidad no es parte de Nxivm y que no estoy asociado con el grupo".
Salzman, que era una ama de primera línea en DOS, testificó que Raniere ideó un plan para decir que la marca no tenía la intención de incluir sus iniciales pero que representaba los siete chacras, los cuatro elementos o "Bar Alfa Mu" -una combinación, aparentemente, de un símbolo matemático y dos letras griegas-.
"Les mentí a todos", testificó Salzman sobre el involucramiento de Raniere en DOS. "Le mentí a toda la comunidad sobre ello. Les mentí a los medios sobre ello".
Las nuevas grabaciones de las reuniones de Raniere con las amas de primera línea de DOS muestran su papel como un arquitecto del grupo, al hablar sobre cómo debería estar estructurado y al reconocer que la marca en sí estaba vinculada con él.
"El monograma, como está actualmente, está muy directamente relacionado con mis iniciales", dijo Raniere en una reunión grababa en 2016.
El grupo discutió sobre cómo cubrir ese hecho, y una mujer dijo: "Si tienes un esposo, y ahora tienes esta cosa, pienso que va a intentar averiguar de qué se trata". Otra mujer dijo que la marca parecía como un "tipo de símbolo alienígena extraordinario".
Raniere dijo en la conversación con Mack que las marcas deberían evocar un "sentimiento de sumisión", y que las mujeres deberían pedir ser marcadas antes de ser sometidas "para que no parezca que se ejerce coerción". Agregó que videograbar las marcas ofrecería una garantía adicional y que las mujeres por ello deberían ser colocadas en "una posición más vulnerable".
Mack dijo que el dolor de las marcas podría ser visto como un símbolo del amor de las esclavas por sus amos. Raniere estuvo de acuerdo. "Es el amor de los santos", dijo "Es el amor de los seres más puros que deambulan por la Tierra".
Colin Moynihan
- 1
- 2
Un ómnibus chocó con un camión y se prendió fuego: 32 muertos
- 3
Cómo el caso Pelicot relanzó debates jurídicos y sociales y qué podría cambiar tras la sentencia en Francia
- 4
Día clave en Venezuela: Maduro extrema la represión y piensa en su nuevo mandato como punto de partida hacia un “sistema cubano”