Nuevo ministro de Irán: quién es Ahmad Vahidi, el influyente militar que está acusado por el atentado contra la AMIA
El funcionario del nuevo gobierno de Raisi fue titular de la cartera de Defensa durante la gestión de Ahmadinejad; es buscado por Interpol por el caso del ataque en Buenos Aires y está en la lista negra de Estados Unidos
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Ahmad Vahidi es buscado por Interpol desde 2007, después de gestiones realizadas desde la Argentina para dar con los acusados iraníes por el atentado contra la AMIA del 18 de julio de 1994. Entre ellos se encuentra este influyente militar, exministro de Defensa y ahora nuevamente funcionario del gobierno de Irán, encabezado desde la semana pasada por el ultraconsevador Ebrahim Raisi.
Personaje cuestionado en la Argentina y la región por sus vínculos con el ataque en el que murieron 85 personas, Vahidi siempre contó con el aval del régimen teocrático, como volvió a quedar demostrado hoy con el nuevo nombramiento como ministro del Interior.
Vahidi fue ministro de Defensa entre 2009 y 2013, durante la presidencia de Mahmoud Ahmadinejad, el mandatario que firmó el memorándum de entendimiento con el gobierno de Cristina Kirchner, quien a partir de ese pacto está acusada de encubrir a los sospechosos del ataque a la AMIA.
En ese momento, en septiembre de 2009, la designación de Vahidi en el gobierno iraní fue repudiada por el Parlasur. “La decisión adoptada por el presidente iraní constituye una afrenta innombrable a las víctimas de la masacre y sus familias, y por eso merece el repudio de toda la comunidad de naciones democráticas”, afirmó en aquel momento la asamblea parlamentaria del Mercosur, en un comunicado oficial.
En 2010, además, el gobierno de Barack Obama incluyó a Vahidi en su lista negra. “Estamos agregando a nuestra lista una serie de instituciones e individuos que están ayudando a Irán a financiar programas nucleares y de misiles y a evadir las sanciones internacionales”, dijo el entonces secretario del Tesoro, Timothy Geithner.
Al año siguiente, en junio de 2011, también vivió un momento tenso en la región, cuando fue expulsado de Bolivia.
Durante una gira por la región, Vahidi compartió dos actos con el entonces presidente Evo Morales, lo que provocó una queja formal desde la Argentina. David Choquehuanca –en ese momento canciller de Bolivia y en la actualidad, vicepresidente- envió una carta de disculpas a su par Héctor Timerman, en la que calificó como un “grave incidente” la visita del funcionario acusado.
“El gobierno de Bolivia ha tomado las previsiones correspondientes a fin de que el señor Ahmad Vahidi abandone de inmediato el territorio boliviano”, decretó Choquehuanca, tras la interpelación del fallecido fiscal Alberto Nisman, quien era titular de la Unidad de Investigaciones por el ataque a la AMIA.
Influyente general
En 1994, cuando ocurrió el atentado contra la AMIA, Vahidi era el jefe de una unidad de elite de la guardia revolucionaria iraní: las fuerzas Al Quds, responsables de las operaciones militares del gobierno de Teherán en el extranjero y de numerosos atentados terroristas en diferentes partes del mundo. Con rango de general, tuvo durante más de una década un rol preponderante en el ejército.
El grupo de los acusados y reclamados por el Estado argentino ante la Justicia internacional lo completan el expresidente de Irán Alí Akbar Hahsemi Rafsanjani; los exministros Alí Fallahijan y Alí Akbar Veleyati; el ex comandante Moshen Rezai; el exjefe de Seguridad Exterior Imad Fayez Moughnieh; el exconsejero cultural de la embajada Mohsen Rabbani, y el tercer secretario de la delegación diplomática en Buenos Aires, Reza Ashgari.
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