Murió el expresidente de Francia Jacques Chirac
PARÍS.- El expresidente francés Jacques Chirac falleció hoy a los 86 años en su casa de París a causa de una infección pulmonar. La noticia fue confirmada por su familia. "Murió esta mañana, acompañado por sus seres queridos y en paz", anunció su yerno Frederic Salat-Baroux.
El exmandatario, quien gobernó el país de 1995 a 2007 y que antes había sido alcalde de la capital de Francia, llevaba años retirado de la vida pública. Dirigente conservador, tuvo que gobernar en coalición con un gobierno socialista liderado por Lionel Jospin y en las elecciones de 2002 se enfrentó al ultraderechista Jean-Marie Le Pen en la segunda vuelta. Ganó con un 82%.
Según lo publicado por el diario Le Figaro, en los últimos años el estado de salud de Chirac se deterioró considerablemente: en 2005 fue víctima de un problema vascular cerebral y desde 2016 se mostraba con movilidad reducida y problemas de memoria.
Pese a haber abandonado el Palacio del Elíseo en 2007 siempre mantuvo su popularidad. Fue muy respetado por los demás mandatarios e incluso conocido por haber impuesto una regla para no intervenir en la escena política: no criticar a su sucesor, Nicolas Sarkozy, y "nunca interferir con su acción por ningún comentario". Además fue uno de los primeros jefes de Estado en pronunciar advertencias ante el cambio climático y el segundo presidente de Francia con más años en el cargo.
Como Charles De Gaulle, Chirac dedicó gran parte de su mandato a defender el estatus de Francia como una gran nación en el escenario mundial, una reputación que reforzó cuando se opuso a la invasión de Estados Unidos a Irak en 2003. Fue además el primer gobernante galo en reconocer el papel de Francia en el Holocausto.
La Asamblea Nacional y el Senado, tras enterarse de la muerte del exmandatario, guardaron inmediatamente un minuto de silencio.
Su carrera
Chirac a menudo era recordado por su gusto por la cerveza mexicana Corona, su mal inglés y una actitud distante, aunque también por ser una persona muy enigmática que disfrutaba del arte asiático y de la poesía japonesa, aunque siempre prefería restar importancia a su faceta intelectual.
Pero quizás el aspecto que más lo marcó fueron los constantes cambios en sus opiniones políticas, que le valieron apodos como "camaleón Bonaparte" y "la veleta".
También fue apodado Houdini por su habilidad para salir de situaciones difíciles, como cuando sobrevivió a un procesamiento por uso indebido de fondos públicos en diciembre de 2012, que lo convirtió en el primer jefe de Estado en ser condenado desde el colaborador nazi Philippe Pétain en 1945.
Había nacido en 1932 en París, en el seno de una familia de clase media. Comenzó muy joven su carrera política a fines de la década de 1950, tras estudiar en el elitista Instituto de Estudios Políticos de París y en la Escuela Nacional de Administración.
Agencias AFP, Reuters, AP y DPA
Otras noticias de Francia
Más leídas de El Mundo
"Nos engañó". Angela Merkel en el Purgatorio: su partido reniega de la excanciller y el país revisa su legado
Denuncia penal contra el chofer. Murió una pasajera que viajaba en el colectivo que chocó contra la rambla en Montevideo
Injerencia. Moldavia y Georgia, los otros países acariciados por las garras del Kremlin
"Por ustedes no es". La emoción de la reina Letizia al hablar con los afectados por las inundaciones en Valencia