Más presión internacional para desconocer las elecciones en Venezuela

CARACAS.- La Unión Europea (UE) y el presidente colombiano, Juan Manuel Santos , redoblaron la presión internacional contra el chavismo cuando solo faltan 17 días para la celebración de unas elecciones presidenciales a las que su candidato, Nicolás Maduro , llega como máximo favorito ante la abstención que promueve el opositor Frente Amplio Venezuela Libre.

Por un lado, Bruselas insiste en reclamar la suspensión de las elecciones ante la ausencia de unas condiciones "libres, transparentes, creíbles e inclusivas". Y, por el otro, Santos, que lidera la presión continental contra Caracas, develó que la nueva Constitución que prepara el chavismo pretende "abolir el sufragio universal" para convertirse "oficialmente en una dictadura" como Cuba. Rápidamente, el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela rechazó como una "injerencia grosera" el pedido del Parlamento Europeo.

Al coro internacional se unió ayer la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que reapareció en escena para reiterar que los comicios son una "farsa" de la que no formará parte. Fue un grito de advertencia para poner orden en sus filas, ya que algunos de sus dirigentes se van separando a cuentagotas para apoyar por su cuenta a Henri Falcón, el disidente que se inscribió, en rechazo a la decisión de la alianza.

La suma de voces no frenó ni un solo segundo a Maduro, que prosigue su campaña contestando a unos y encarcelando a otros. Los últimos en padecer las decisiones electorales del gobierno fueron el presidente y 10 directivos del Banesco, uno de los principales bancos del país, a quienes la Fiscalía acusa de operaciones especulativas contra la moneda local (el bolívar).

El presidente prefirió disparar sus cañones dialécticos contra los "enemigos" del exterior. "¡Qué carajo me importa lo que diga Europa! ¡Qué carajo me importa lo que diga Washington!", clamó Maduro anteayer en un mitin en La Guaira. El candidato chavista se mantiene firme en su principal estrategia: "Estoy pensando en un premio bien bueno para todos los que voten con el carnet de la patria".

Los bono-regalos (hasta ahora de 700.000 bolívares, pero aumentados a 1,5 millones en el 1º de mayo ante la marcha imparable de la hiperinflación) son la principal herramienta del chavismo para "proteger al pueblo" y para empujarlo hasta las urnas frente a la abstención que predica la oposición. El mandatario insistió hasta la saciedad en que "todo el que tenga carnet de la patria tiene que votar, eso es dando y dando".

Diosdado Cabello, el número dos del chavismo, también se refirió a un "incentivo para la gente para ir a votar", aunque insinuó que en esta ocasión podría no ser en efectivo, sino con "los libros del comandante Hugo Chávez".

El carnet de la patria es la principal herramienta de control social y político desarrollada por la revolución bolivariana desde el año pasado, ya presente en las tres elecciones de 2017. De hecho, los bonos repartidos por la Navidad, Reyes Magos, Carnaval, Semana Santa, el Día de la Mujer o el 1º de mayo son solo para los llamados patriotas, a pesar de tratarse de fondos del Estado.

Llueva, truene o relampaguee, le gusta decir a Maduro para dejar muy claro que no piensa dar ni un solo paso atrás. De momento, ni siquiera se molestó en contestar al presidente del país vecino, a pesar de la gravedad de sus acusaciones.

Santos señaló que la "espuria" Asamblea Constituyente "está redactando una nueva Constitución para hacerla aprobar después de las elecciones con el nuevo mandato [de Maduro]". Y agregó: "Ahí lo que van a hacer es una mayor represión, porque la información que tenemos es que uno de los artículos abolirá el sufragio universal para implantar un sistema corporativo como el que eligió la Asamblea Constituyente. Es un fortalecimiento de un régimen dictatorial".

El presidente colombiano lo dijo en una entrevista con el canal Univisión, al apoyarse en los informes elaborados por sus servicios de inteligencia. El periodista Andrés Oppenheimer ya había adelantado la denuncia presidencial en el diario El Nuevo Herald. Santos confirmó así la sospecha que ya sobrevolaba en Caracas en torno a la redacción de la nueva Carta Magna, en manos de la Asamblea que hoy mantiene poderes absolutos, como si se tratase del Parlamento cubano.

El chavismo respondió a Santos a través del fiscal revolucionario Tarek William Saab, que afirmó que es totalmente falso. "El derecho humano del voto jamás podrá ser abolido", dijo.

Santos endureció su postura hacia el gobierno chavista cuando su país ya sufre los efectos de la diáspora masiva, que ha llevado a Colombia a cerca de un millón de venezolanos. "Estas elecciones no serán limpias, ya están haciendo todo para que sea un fraude. Y hay una paradoja: entre más se deteriora la parte social y económica más se sofistica la parte de la represión social", afirmó el mandatario.

Entre las denuncias que desplegó en su entrevista, el presidente colombiano comparó a la futura Venezuela con Cuba, incluso en la "conformación de milicias, cerca de 13.000 con 40 militantes por célula". Son las que "cuando haya una protesta, van y la reprimen, igualito que los CDR [Comités de Defensa de la Revolución] de Cuba", agregó.

Advertencia del FMI a Caracas

El Fondo Monetario Internacional (FMI) emitió en las últimas horas una declaración de censura contra Venezuela por considerar que la nación sudamericana no ha proporcionado en los plazos estipulados estadísticas sobre su economía. Si Venezuela no aportara la información requerida, el FMI podría terminar decidiendo su expulsión del organismo internacional. El Banco Central de Venezuela dejó de publicar periódicamente cifras oficiales en 2014.

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