Malestar social tras el atentado en Turquía
Hubo un paro sindical y protestas contra el gobierno
ESTAMBUL (ANSA).- El premier de Turquía, Ahmet Davutoglu, ratificó ayer que desde el "primer momento" relacionaron el doble atentado suicida cometido el sábado en Ankara con la modalidad de Estado Islámico (EI). "Fue sin duda un ataque suicida. Visto el modo en el cual se cometió, desde el primer momento pensamos que Daesh [acrónimo árabe de EI] era responsable", afirmó 48 horas más tarde sobre la pista privilegiada de la tragedia del sábado, que causó decenas de muertos.
Una versión que no convence a muchos turcos, que ayer salieron a las calles en el primero de dos días de huelga para protestar contra el gobierno, al que acusan de negligencia y complicidad. El clima sigue siendo tenso, como demuestra una alarma de bomba que en la tarde de ayer obligó al cierre de una línea del subte de la capital.
Las investigaciones, sobre las cuales ayer se impuso el secreto de sumario, apuntan hacia la pista jihadista. Davutoglu rechazó las acusaciones de fallas en la seguridad, aunque prometió investigaciones en mérito. "Intentaron influir en las elecciones, pero se realizarán de todos modos. Estos ataques no nos transformarán en Siria", advirtió. En tanto, las autoridades dijeron ayer que las víctimas fatales del doble atentado suman 97, de las cuales 91 fueron identificadas. El partido filo-kurdo HDP sigue afirmando que son 128.
Para recordar a las víctimas, decenas de miles de turcos se plegaron ayer al paro sindical y se ausentaron de universidades y oficinas. Una movilización que se suma a la de la sociedad civil, con el lema "Detenemos la vida".
"Estamos de luto, estamos de paro", anunciaron por la mañana adhesivos sobre las puertas de muchas oficinas públicas. Fuera de las principales universidades de Ankara y Estambul, estudiantes y profesores se encontraron a las 10.04, la hora local exacta a la cual estallaron las bombas. Manifestaciones en señal de luto que en muchos casos se transformaron en cortejos de protesta contra el "Estado asesino" y el presidente Recep Tayyip Erdogan, acusado de haber fomentado la violencia para recuperar consenso en vista de las elecciones anticipadas del 1° de noviembre. Los partidos AKP, de Davutoglu, y los opositores de la socialdemocracia y el filokurdo anunciaron hoy la suspensión de los actos de campaña para los próximos días.