Macron viaja de emergencia para intentar contener la inesperada revuelta en Nueva Caledonia
Viajará sorpresivamente esta noche para intentar calmar la creciente tensión en el archipiélago; el níquel como telón de fondo
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PARÍS.- El presidente de Francia, Emmanuel Macron, viajará este martes a Nueva Caledonia, para intentar calmar junto a las autoridades locales los episodios de disturbios violentos contra una reforma del padrón electoral en los que murieron hasta ahora seis personas en este territorio francés del Pacífico, que obligaron al mandatario a tomar medidas de emergencia.
“El presidente anunció en el Consejo de Ministros su viaje [a Nueva Caledonia]. Partirá esta noche para establecer una misión”, declaró la vocera del gobierno francés, Prisca Thevenot, sin precisar su duración ni más detalles de la visita.
Macron tenía previsto acudir el miércoles a Normandía, en el norte de Francia. En su lugar, volará al archipiélago ubicado al este de Australia, a 10 husos horarios de París, que se ha visto envuelto en enfrentamientos armados letales, saqueos, incendios provocados y otros disturbios que dejaron seis muertos- entre los que había dos gendarmes- en la última semana.
Las protestas estallaron el 13 de mayo en respuesta a una reforma del padrón electoral promovida por el gobierno francés que, según los líderes del pueblo autóctono canaco, diluirá su influencia en las instituciones de este territorio.
El pasado miércoles, París decretó el estado de emergencia durante un mínimo de 12 días en un territorio donde la población indígena lleva años reclamando la independencia de Francia, y envió 1000 efectivos para reforzar las fuerzas de seguridad, que habían perdido el control de algunas zonas de la capital, Numea.
“Frente al estallido de violencia, la prioridad es restablecer el orden para permitir que se reanude el diálogo en Nueva Caledonia”, afirmó la vocera.
“El regreso a la calma está empezando a llegar. La situación no está totalmente normalizada, pero está mejorando. Somos claros: queda mucho por hacer antes de la vuelta a la normalidad. El gobierno está totalmente implicado”, agregó Thevenot.
Desde el fin de semana, una de las prioridades de las autoridades francesas es despejar la autopista que lleva al aeropuerto internacional de la capital de barricadas y restos de vehículos calcinados, para preparar la posible salida de los turistas varados.
Australia y Nueva Zelanda enviaron aviones a Nueva Caledonia el martes para empezar las repatriaciones.
La ministra australiana de Exteriores, Penny Wong, indicó que habían recibido autorización de las autoridades francesas para llevar a cabo dos vuelos de evacuación. Horas después, un Hércules C-130 de sus fuerzas aéreas, con capacidad para 124 pasajeros, aterrizó en Numea.
Situado entre la costa oriental de Australia y las islas Fiji, este archipiélago del Pacífico goza de un estatus especial gracias al Acuerdo de Numea de 1998, que permitió la transferencia de numerosas competencias desde París.
Pero el acuerdo también congeló el censo para las elecciones provinciales en este territorio colonizado por Francia en el siglo XIX, en las que solo pueden participar los votantes inscritos en 1998 y sus descendientes.
La reforma propuesta por París prevé incluir a las personas radicadas allí desde hace diez años, pero los independentistas consideran que esto reducirá la influencia de los canacos. Macron quería su aprobación “antes de finales de junio”.