Los que lo vivieron en carne propia

ROBERT PERAZA
Su homenaje fue conmovedor, silencioso. Hace diez años, su hijo, Robert David Peraza, trabajaba en el piso 104 del World Trade Center cuando el avión de American Airlines se estrelló entre el piso 93 y el 99 del edificio. Ingeniero de sistemas de 68 años, Peraza fue uno de los muchos padres presentes en el acto.

AUGUST LARSEN
Tiene nueve años: nació apenas unos días después del 11-S. Ayer, calcó con un crayón el nombre de su padre, Scott Larsen, un bombero de 35 años que murió durante las tareas de rescate y al que nunca conoció.

VASANTHA VELAMURI
No pudo contener el llanto. Permaneció ayer durante largo rato frente al nombre de su esposo, Sankara, un inmigrante indio que había llegado hacía 30 años y que, en el momento del atentado, trabajaba como especialista en impuestos.

PETER NEGRON
El 11 de septiembre de 2003, a los 13 años, conmovió al mundo al leer un poema para recordar a su padre, Pete. Ayer, a los 21, volvió a hablar: dijo que quiere transmitirle todas sus enseñanzas a su hermano, de 12.

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