Caso Julen: los padres del niño muerto en un pozo piden prisión para el dueño del predio
El 13 de enero pasado mientras la familia almorzaba, Julen, un niño de 2 años, cayó en un pozo de más de 100 metros de profundidad y 25 centímetros de diámetro en una finca de Totalán. Tras doce días de intenso trabajo de excavación el equipo de rescate encontró el cuerpo sin vida del pequeño, a 70 metros de profundidad.
El pozo donde cayó Julen no contaba con autorización y no tenía ningún tipo de señalización. Siete meses después, José Roselló y Victoria García, los padres de Julen, piden tres años y medio de cárcel para David Serrano, el dueño del terreno en donde falleció el pequeño.
La Fiscalía había solicitado tres años de de condena para Serrano y aunque los progenitores del menor se sumaron a su criterio, presentaron un escrito de acusación y pidieron una pena incluso mayor que la solicitada por el Ministerio Público.
Tanto la Fiscalía como Roselló y García atribuyen a Serrano el mismo delito: homicidio por imprudencia. "La condena dependerá de la valoración que el juzgador realice de las circunstancias personales concurrentes en el condenado, la gravedad de los hechos y de los resultados producidos", explicó Antonia Barba, abogada de la familia a Diario Sur.
El pozo no contaba con seguridad
Dentro de la denuncia, argumentan que Serrano cometió una "multitud de infracciones" ya que el hombre no había tomado las medidas de seguridad requeridas para el sondeo que estaba realizando en su finca, tampoco obtuvo permisos administrativos que requiere la construcción que terminó con la vida de su hijo. La Junta de Andalucía le había abierto un expediente por "infracción muy grave" en materia de seguridad minera.
Los padres también afirman que el dueño de la fina "nunca les pidió perdón y se ha limitado a acusar a otros". El abogado de Serrano, presentó un informe en el que señala a los rescatistas como los responsables de lo ocurrido. De acuerdo con lo publicado por el diario El Mundo, el letrado asegura que Julen no murió al caer en el pozo sino que lo hizo debido a los golpes en la cabeza que recibió por parte de los socorristas.
La letrada argumenta que el reglamento que desarrolla la Ley de Prevención de Riesgos Laborales establece la obligación del promotor -David Serrano- de elaborar dicho estudio de seguridad y salud en el trabajo que contenga una identificación y evaluación de los riesgos que entraña esa obra.
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