Impacto en los mercados globales por los temores sobre la economía de EE.UU.

BANGKOK.- Lo que el jueves comenzó como una desagradable caída de las acciones japonesas se convirtió hoy en un enorme descalabro, ya que el índice Topix, que incluye todas las acciones de la Bolsa de Valores de Tokio, registró la peor pérdida en un solo día desde el “Lunes Negro” de 1987 y la caída se extendió a Europa y amenazaba con continuar en Wall Street.

La Bolsa de Nueva York abrió este viernes en clara baja y los rendimientos de los bonos cayeron, tras un aumento de la tasa de desempleo en Estados Unidos en julio (a 4,3%, el nivel más alto desde octubre de 2021), una señal de desaceleración en la mayor economía del mundo.

Durante las primeras operaciones, el índice Dow Jones cayó un 0,93%, mientras el Nasdaq, predominantemente tecnológico, bajó un 2,53%, lastrado en particular por Intel, que se desplomó en 28% tras el anuncio de la supresión de 18.000 puestos de trabajo. El índice ampliado S&P 500 también retrocedió, en 1,51% esta mañana.

Las acciones del fabricante estadounidense de semiconductores Intel se desplomaron un 28% en Wall Street después de que el grupo anunciara un importante plan que prevé el despido de más del 15% de su personal antes de finales de año. El gigante estadounidense perdió además más de 30.000 millones de dólares en valoración de mercado, mientras que la acción caía a 20,95 dólares, un descenso del 28% a media mañana. Intel, que está a la zaga de sus competidores en chips adaptados a la inteligencia artificial generativa (IA), anunció el jueves que aspira a reducir sus costos en 10.000 millones de dólares recortando un 15% de su plantilla, equivalente a unos 18.000 empleados.

Antes, el índice Nikkei 225 de Japón se desplomó un 5,8% ante el pánico de los inversionistas por los signos de debilidad de la economía estadounidense. La caída de más de 2000 puntos dejó al índice cerca de su nivel de enero, y eliminó enormes ganancias impulsadas por el entusiasmo por la inteligencia artificial que elevó las acciones de los fabricantes de chips y otras empresas relacionadas.

El índice de referencia japonés Nikkei 225 se hundió de tal forma que algunos informes dijeron que fue la peor pérdida en un solo día desde el Lunes Negro de 1987. El Nikkei había alcanzado un máximo histórico de 42.224,02 el 11 de julio.

Las caídas se produjeron tras un retroceso en Wall Street, después de que los débiles datos elevaron la preocupación acerca de si la Reserva Federal podría haber perdido su oportunidad para rebajar las tasas de interés antes de que socaven el crecimiento económico. El presidente de la entidad, Jerome Powell, apuntó que la reducción podría llegar en septiembre luego de que el Banco Central estadounidense se mantuviera firme en una reunión esta semana.

La caída se extendía por Europa y se encaminaba a continuar en Wall Street más tarde en el día.

Los analistas dijeron que los operadores también estaban vendiendo acciones japonesas para posicionarse para comprar acciones estadounidenses.

Las acciones japonesas han sido golpeadas después de que el Banco de Japón aumentó su tasa de interés de referencia el miércoles, a un modesto 0,25% desde el 0,1%. Como se esperaba, el yen ha subido frente al dólar, potencialmente perjudicando las ganancias de los fabricantes y desinflando un auge turístico.

Empresas afectadas

Mitsubishi UFJ Financial Group Inc. se desplomó un 12%. Las acciones de Toyota Motor Corp. cayeron un 4,2%, las acciones de Sony Group Corp. perdieron un 6,7% y SoftBank Group Corp. cayó un 8%.

Un descenso de casi un 19% en la cotización de las acciones de Intel tras el cierre del mercado agravaron el pesimismo. El fabricante de procesadores anunció una reducción del 15% en su enorme plantilla -alrededor de 15.000 puestos de trabajo- para poder competir mejor con rivales de más éxito como Nvidia y AMD.

Al inicio de la cotización en Europa, el DAX alemán perdía un 1,4% hasta los 17.834,67 puntos, mientras que el CAC 40 se dejaba un 0,7% hasta los 7.315,93. En Londres, el FTSE 100 caía un 0,4% hasta 8.245,92. En Japón, los mercados regresaron a los niveles de enero luego de que el mes pasado alcanzaron un máximo histórico por encima de los 42.000 puntos. El Nikkei 225 perdió 2216,63 puntos y se quedó en 35.909,70, con las acciones de bancos, empresas tecnológicas y fabricantes como las más afectadas por el volumen de ventas.

En otras partes de Asia, el Hang Seng de Hong Kong cedía el viernes un 2,1% hasta 16.950,46 puntos, mientras que el índice Composite de Shanghái caía un 0,9% a 2.905,34.

El índice MSCI de acciones mundiales caía un 0,8%, el índice europeo Stoxx bajaba un 1,8% y los futuros indicaban que el índice S&P 500 de Wall Street abriría un 1,4% a la baja. Las ventas se produjeron después de que el jueves se publicó en Estados Unidos una encuesta sobre la actividad de las fábricas más débil de lo esperado, y antes de que el viernes se publique en Estados Unidos el informe mensual sobre las nóminas no agrícolas, que, según las previsiones de los economistas, mostrará que el crecimiento del empleo se redujo a 175.000 puestos en julio, frente a los 206.000 de junio.

El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años, bajaba cuatro puntos básicos en la jornada del viernes a 3,978%, tras caer 14 puntos básicos durante la noche. Los rendimientos de los bonos caen a medida que suben los precios de los títulos. El rendimiento a dos años, que suele reflejar las expectativas de tasas de interés a corto plazo, tocó su nivel más bajo desde mayo de 2023 antes de rebotar ligeramente al alza hasta el 4,165%.

En los mercados de divisas, el yen subía un 0,4% a 148,8 unidades por dólar, prolongando así el rápido rebote de la debilitada moneda, aliviada esta semana por la subida de las tasas de interés por parte del Banco de Japón a niveles nunca vistos en 15 años. La libra esterlina se encaminaba a una caída semanal del 1% frente al dólar mientras los operadores especulaban con la posibilidad de que el Banco de Inglaterra aplique un nuevo recorte de tasas en noviembre, luego de que el jueves realizó el primero de este ciclo.

Los mercados de materias primas reflejaban en general los temores sobre el crecimiento mundial, mientras el oro sumaba un 0,7% a 2.464 dólares la onza y el crudo Brent, aunque subía ligeramente en el día a 79,70 dólares el barril, se encaminaba a su cuarta pérdida semanal consecutiva.

Lunes negro

El índice Nikkei 225 es el principal índice bursátil de Japón. Representa un promedio ponderado de precios de 225 acciones seleccionadas de las empresas más grandes y líquidas que cotizan en la Bolsa de Valores de Tokio (Tokyo Stock Exchange, TSE). Estas empresas abarcan una amplia gama de sectores industriales, incluyendo tecnología, manufactura, finanzas, transporte y consumo, entre otros.

Creado en 1950, el Nikkei 225 es similar al Dow Jones Industrial Average en Estados Unidos, en el sentido de que es un índice de precios ponderados y es uno de los indicadores más utilizados para medir el desempeño del mercado de valores japonés. La composición del índice es revisada anualmente para asegurar que sigue siendo representativo del mercado japonés en general.

Una de las caídas más significativas del Nikkei 225 ocurrió el 19 de octubre de 198: el famoso Lunes Negro, después de que las acciones cayeran en todo el mundo, con el índice de Tokio cayendo 3.836,48 puntos, o casi un 15%, y otros mercados mundiales desplomándose aún más. Los inversores vendieron acciones creyendo que los precios eran demasiado altos.

Luego, los mercados de Japón se recuperaron relativamente rápido porque el país todavía estaba en medio de una burbuja financiera que llevaría al Nikkei a casi 39.000 antes de colapsar a principios de 1990. El Nikkei no recuperó ese pico anterior de 38.915,87 hasta principios de este año.

Agencias AP y Reuters

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