La primera dama, una celebrity en medio del secretismo
Ri Sol Ju se destaca entre la austeridad norcoreana por su belleza y su estilo occidental
Apodada irónicamente "la Kate Middleton norcoreana" por la prensa británica, y en un tono más crítico, "la Asma al-Assad asiática", Ri Sol Ju, la esposa del máximo líder norcoreano, Kim Jong-un, se convirtió en poco tiempo en una celebridad, en la limitada escala que permite el secretismo del régimen. Pero muchos interpretan su popularidad como una deliberada estrategia del régimen para dar una imagen de cercanía entre el líder y el pueblo.
Casada con Kim Jong-un en 2009 o 2010 (la fecha exacta se desconoce), la bella ex cantante pop se ha hecho conocida por su elegancia, de estilo occidental, y su pasión por las carteras de diseñador, en un país donde dos tercios de la población pasan hambre, según datos de las Naciones Unidas.
Su figura despierta todo tipo de rumores, incluido el de su participación en un video pornográfico por el que, según trascendió, su compañera de grupo musical y supuesta ex novia de Kim Jong-un, Hyon Song-wol, fue ejecutada en agosto pasado por orden del líder supremo. Medios surcoreanos publicaron que la ejecución buscaba proteger la reputación de Ri, versiones que merecieron el repudio de Pyongyang por "insultar la más alta dignidad" de la primera dama.
A pesar de que el secretismo norcoreano hace que se conozcan pocos detalles de la vida de la primera dama y de la familia en general (incluido el nacimiento de su primogénita, que se conoció de casualidad por la ex estrella de la NBA Dennis Rodman, un curioso amigo del dictador), lo poco que se sabe revela un estilo que contrasta fuertemente con el de las mujeres del fallecido Kim Jong-il, que rara vez aparecían ante la prensa y de quienes se desconocía hasta el nombre.
Cada aparición pública de Ri da que hablar. Su debut como primera dama fue en julio del año pasado, sentada en un concierto al lado de su marido, con un vestido negro ajustado, al mejor estilo Chanel.
Desde ese momento, se convirtió en el foco de atención y admiración de sus compatriotas femeninas, por sus polleras cortas y al cuerpo, sus tacos altos, y carteras Christian Dior, todo muy inusual para las norcoreanas, habituadas a usar vestidos amplios, que no marcan las curvas, o ropa de trabajo de estilo Mao.
Además, lejos de la tradicional vestimenta en tonos de grises, Ri suele vestirse con colores: verde, bordó, amarillo y ropa a lunares.
Su peinado también llama la atención por su estilo occidental. En septiembre pasado se la vio con el pelo muy corto, sin la melena al hombro que solía lucir. Muy alejada del tradicional cabello largo de las mujeres de su país.
La figura de Ri es interpretada como una estrategia del régimen para mostrar a Kim Jong-un como un líder más compasivo y cercano a su pueblo de lo que fue su padre y predecesor. En sus apariciones públicas, la joven se muestra sonriente, rodeada de bebes y chicos, y el régimen se encargó de difundir fotos de la pareja conversando amablemente con una típica familia norcoreana en el living de su casa.
Pero son muchos los que advierten que el cambio de estilo del liderazgo norcoreano no implica cambios reales en un país en donde todo sigue igual desde hace medio siglo.
En los últimos meses, las habituales críticas al régimen se mezclaron con todo tipo de rumores sobre la vida de la pareja en las redes sociales de Corea del Sur.
"La repentina aparición de Ri Sol junto a Kim Jong-un es tan sólo el resultado de una estrategia de imagen norcoreana. Kim Jong-un está tratando de cambiar su imagen, y en abril forzó a una mujer casada llamada Ri Sol Ju a vivir con él, sin casarse", tuiteó desde Corea del Sur un anónimo usuario, @0998bell , y fue retuiteado más de 300 veces.
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