La oposición desafía a Putin en las calles
Hubo protestas y unos 500 detenidos en Moscú y en San Petersburgo; para los observadores, las elecciones no fueron transparentes
MOSCU.- En abierto desafío al primer ministro Vladimir Putin después de su aplastante triunfo electoral del domingo , miles de personas salieron ayer a las calles en Moscú y San Petersburgo para protestar por un "fraude masivo", una acusación que se suma a las denuncias de "irregularidades" de los observadores internacionales.
Unos 500 manifestantes fueron detenidos durante las protestas, entre ellos el bloguero anticorrupción Alexei Navalny, una de las figuras más influyentes del país.
Según la oposición, unas 20.000 personas se sumaron a la manifestación en la plaza Pushkin, centro neurálgico de las protestas, para exigir nuevas elecciones. Al mismo tiempo, unas 15.000 personas, según la policía, se congregaron en las inmediaciones del Kremlin para respaldar al presidente electo.
Putin obtuvo anteayer una contundente victoria (cerca del 64% de los votos), pero su triunfo quedó empañado por las críticas vertidas por los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), para quienes los comicios "no fueron justos".
Las denuncias de irregularidades llevaron a varios países a cuestionar la holgada victoria de Putin. El Departamento de Estado norteamericano pidió una investigación "independiente y creíble", mientras que el canciller francés, Alain Juppé, dijo que "cuanto menos, la elección no había sido ejemplar".
Entre los detenidos en las marchas de Moscú figuran el escritor Eduard Limonov, del movimiento opositor La Otra Rusia, y el popular Navalny.
"¿Quién está en el poder? Nosotros somos el poder", dijo Navalny antes de ser detenido. Junto con Limonov y Navalny, unas 500 personas fueron detenidas en Moscú, según las distintas fuentes, cuando los manifestantes se negaron a desalojar la plaza Pushkin. La policía también arrestó a decenas de activistas de la oposición en San Petersburgo, cuando pretendían congregarse en el centro de la ciudad para pedir nuevos comicios.
"Exigimos el fin de las represiones políticas, la investigación de los fraudes masivos, la reforma política y elecciones legislativas y presidenciales anticipadas", dijo uno de los líderes de la protesta en Moscú, Vladimir Ryjkov, al leer una resolución del comité organizador, el movimiento "Por unas elecciones limpias", que calificó la elección de "farsa".
La Comisión Electoral divulgó ayer los resultados definitivos de las elecciones de anteayer. Putin, que ya fue presidente de 2000 a 2008 y sucederá en el cargo al actual mandatario, Dimitri Medvedev, obtuvo el 63,60% de los votos; el candidato comunista Guennadi Ziuganov logró el 17,18%, y el millonario Mikhail Projorov, recién llegado a la política con el consentimiento del Kremlin, obtuvo 7,98 por ciento.
Para los expertos de la OSCE, las condiciones de la campaña electoral estuvieron "claramente sesgadas" a favor de Putin. Los observadores dijeron que detectaron irregularidades en el recuento de votos "en cerca de un tercio de los colegios electorales". "No hubo una verdadera competencia y el abuso de recursos del gobierno garantizó que nunca estuviera en duda quién sería el vencedor", dijo Tonino Picula, uno de los observadores electorales. Por su parte, Tiny Cox, un destacado experto de la OSCE, señaló que habían notado algunas mejoras respecto de las elecciones parlamentarias del 4 de diciembre, que, según la oposición, estuvieron plagadas de irregularidades. "No vimos las violaciones que vimos en diciembre; vimos muchos menos casos de relleno de urnas", afirmó.
Irregularidades
Pero los observadores de la OSCE dijeron que Putin recibió una clara ventaja frente a sus rivales en los medios de comunicación, y que el oficialismo utilizó recursos estatales para mantenerse en el poder en Rusia seis años más. La OSCE pidió que todas las denuncias de irregularidades fueran investigadas exhaustivamente. Aunque las conclusiones de los observadores no son vinculantes legalmente en Rusia, socavan el triunfalismo de las autoridades electorales rusas y confirman la preocupación de la oposición y de los gobiernos occidentales.
Las autoridades rusas no respondieron al informe preliminar de la OSCE, pero Tatiana Voronova, miembro de la Comisión Electoral, denunció una visión "politizada e inadecuada" de la situación en Rusia, según la agencia Interfax.
"Hemos ganado en una lucha abierta y honesta", dijo anteanoche Putin ante 100.000 seguidores reunidos cerca del Kremlin. "Hemos demostrado que nadie puede imponernos nada", añadió. El ex agente del KGB denunció en las últimas semanas los "intentos de injerencia", urdidos en su opinión en el extranjero para minar su popularidad y favorecer a la oposición.
Según la ONG rusa Golos, Putin habría obtenido el 50,26% de los votos en la primera vuelta de los comicios presidenciales, lejos del 64% que le otorga la Comisión Electoral. El sitio de Internet Control2012 denunció, por su parte, cerca de 6000 casos de violación de la legislación electoral, en particular el "transporte masivo de electores", una maniobra que permite a un grupo de personas votar varias veces en diferentes centros gracias a autorizaciones fraudulentas.
Gestos a la oposición
El Kremlin había garantizado unos comicios democráticos, después de la ola de protestas, sin precedentes en la "era Putin", surgida a raíz de las denuncias de fraude presentadas por la oposición y los observadores independientes en las elecciones legislativas de diciembre pasado.
En un guiño a la oposición, el vocero de Putin, Dimitri Peskov, dijo que el presidente electo es "favorable al diálogo con todos los que estén dispuestos a un trabajo constructivo".
En el mismo sentido, Medvedev -impulsado por Putin a la presidencia en 2008 ante la prohibición constitucional de realizar dos mandatos consecutivos- pidió al fiscal general que estudie la legalidad de 32 casos penales, incluido el del ex magnate petrolero Mikhail Khodorkovsky, que llegó a ser el hombre más rico de Rusia.
Khodorkovsky dirigía la mayor compañía petrolera del país, Yukos, hasta que fue arrestado en 2003 y encarcelado por un delito de evasión fiscal y fraude, después de que mostrara ambiciones políticas y se enemistara con Putin.
Agencias AP, Reuters, AFP y EFE