La Justicia alemana ratificó la condena por asesinato a una mujer de 99 años que trabajó en un campo nazi
Al inicio del juicio, Irmgard Furchner trató de eludir el proceso escapando de su residencia de ancianos; se convirtió en una de las fugitivas más longevas del mundo
- 3 minutos de lectura'
El Tribunal Federal de Alemania confirmó este martes la condena de una mujer de 99 años por complicidad en asesinato. Se trata de Irmgard Furchner, quien se desempeñó como mecanógrafa en un campo de concentración nazi en los últimos dos años de la Segunda Guerra Mundial.
En 2022, Furchner había sido condenada a dos años de prisión en suspenso por complicidad en el asesinato de 10.505 personas durante su etapa como secretaria a los 18 y 19 años -desde junio de 1943 hasta abril de 1945- en el campo de concentración de Stutthof. A pesar de que su abogado aseguró que su participación se limitaba a la realización de actividades “cotidianas” como mecanógrafa, el Tribunal Federal rechazó su argumento.
Ahora, se ratificó su sentencia, por lo que se confirmó que la decisión del tribunal inferior es firme y no puede ser recurrida. “El principio de que las actividades profesionales típicas y neutrales de ‘naturaleza cotidiana’ no son delictivas no se aplica en este caso”, indicaron los jueces del tribunal de Leipzig. Y precisaron: “La acusada sabía lo que hacían los autores principales y los apoyó en ello”.
Alrededor de 65.000 personas murieron de inanición y enfermedad o en la cámara de gas del campo de Stutthof, ubicado cerca de Gdansk, en aquel entonces todavía ciudad alemana de Danzig. Entre ellos había prisioneros de guerra y judíos atrapados en la campaña de exterminio de los nazis. Muchos fueron transportados desde allí para ser gaseados en Auschwitz.
Una fugitiva longeva
Cuando inició el juicio en 2021, varios supervivientes del campo brindaron testimonios acerca de los abusos cometidos en las instalaciones. Luego, la acusada trató de eludir el proceso judicial escapando durante la madrugada de su residencia de ancianos, pero fue detenida por la Policía y enviada a prisión de forma preventiva; convirtiéndose, a sus 96 años, en una de las fugitivas más longevas del mundo.
Este caso representa el último de una serie de nonagenarios acusados de crímenes del Holocausto, en lo que se considera una carrera de los fiscales para aprovechar la última oportunidad de hacer justicia a las víctimas de uno de los peores asesinatos en masa de la historia. Según trascendió, al finalizar el juicio, Irmgard se lamentó por lo que ocurrió y, sobre todo, por “haber estado en Stutthof en ese momento”.
Debido a su importancia histórica, se realizaron grabaciones durante el proceso judicial que ahora pasarán a manos de los Archivos Federales de Alemania. La mujer fue condenada con lo que en Alemania se conoce como una “pena juvenil”, ya que en el momento en que cometió los delitos tenía menos de 21 años.
Otras noticias de Justicia
Más leídas de El Mundo
Tras la embestida contra la prensa independiente, el director del diario Haaretz asegura que “Netanyahu no nos hará callar”
56 muertos. El enojo por un penal durante un partido de fútbol terminó en una letal avalancha en África
Nuevo desafío a Macron. Francia al borde de una crisis política: moción de censura para destituir el gobierno de Barnier
¿Expansión del Kremlin? Las masivas protestas en un país del Cáucaso llevan a Rusia a lanzar una alarmante comparación con Ucrania