La confundieron en Twitter con Liz Truss, primera ministra del Reino Unido, y se volvió viral por sus descabelladas respuestas

Luego de reunirse con la reina Isabel II de Inglaterra, este martes, Liz Truss se ha convertido oficialmente en la primera ministra del Reino Unido. Llega a reemplazar a Boris Johnson y tras haber derrotado en las elecciones al exministro de economía Rishi Sunak. El acceso al nuevo cargo ha significado para esta mujer del Partido Conservador ponerse frente a los múltiples desafíos que enfrenta su nación, pero también recibir, en el universo de las redes sociales, una innumerable cantidad de mensajes de bienvenida, congratulaciones y también algunas críticas de los usuarios de otra opinión política.

Hasta ahí, nada que escape a la normalidad del mundo de las redes. Pero en todo este asunto de los mensajes destinados a la flamante mandataria, hubo un hecho curioso. Resulta que fueron muchísimos los usuarios de Twitter que confundieron la cuenta de la primera ministra con la de otra mujer de nombre similar y enviaron allí sus mensajes. Pero la usuaria que recibió erróneamente miles de tuits reaccionó con humor a la confusión y se dedicó a contestar varios de ellos con un toque de ironía.

La causa de que esta mujer anónima, que no usaba Twitter desde 2018 y que contaba apenas con unos 100 seguidores, fuese confundida con la flamante primera ministra del Reino Unido tiene que ver con sus nombres de usuario en Twitter. Mientras que quien se puso a cargo del destino de 67 millones de británicos cuenta con el alias @trussliz, la muchacha que recibió los mensajes por error, que también es inglesa, carga con el nickname tuitero de @liztruss.

Los mensajes que recibió la “falsa” primera ministra

Con ese nombre de usuario, Liz Trussel recibió cientos de mensajes, entre ellos, de cuentas oficiales como el que envió la primera ministra de Suecia, Magdalena Andersson, que escribió: “Felicitaciones a Liz Truss, quien asumirá el cargo de Primera Ministra de Gran Bretaña. Suecia y Gran Bretaña continuarán nuestra profunda y amplia cooperación. Es importante para nuestros ciudadanos, las economías y la seguridad”.

En este caso, como en tantos otros, la destinataria ‘errónea’ de la felicitación de la mandataria sueca no se quedó callada y envió una pícara respuesta: “Espero hacerle una visita pronto. Tenga listas las albóndigas”.

En otro caso, Liz Trussell fue etiquetada por una periodista de la BBC, Hayley Hassall, con una noticia que hablaba de la primera ministra, ella, la falsa primera ministra, escribió: “Me estoy preparando para visitar Balmoral (uno de los palacios de la reina). Espero conocer a los Corgi”, en referencia a la raza de perros que son las mascotas adoradas de la monarca.

La apócrifa Liz Truss recibió también un mensaje crítico de una diputada del partido verde, Caroline Lucas, que cuestionaba tanto a Johnson como a la nueva mandataria, cuya llegada al poder la calificaba como “desastre”. Otro usuario de Twitter se dio cuenta de que la política se había confundido de destinataria, y bromeó: “Apuesto a que a ella le gusta el pastel”, a lo que inmediatamente, Trussell respondió: “Amo los pasteles”, con el emoji de una torta a su lado.

Así y a través de otros mensajes, la mujer que confundieron con Truss se rio de la situación y continuó con sus respuestas en broma a los requerimientos, felicitaciones y críticas por su asunción a un cargo que está muy alejado de su realidad. Todo esto produjo, por ejemplo, que la cifra de sus 100 seguidores aumentara hasta llegar hasta casi los 22 mil.

También provocó que muchos usuarios simpatizaran con ella y la postularan, se supone que en broma, a que realmente sea ella la que ocupe en el futuro el lugar de la primera ministra. Muchas de las cuentas oficiales que le habían escrito por error, en tanto, borraron sus mensajes, pero otros redoblaron la apuesta, como la citada diputada Lucas, que, al percibir su error con respecto al destinatario, escribió: “Francamente ella (Liz Trussell) probablemente haría un mejor trabajo en este puesto”. Otra vez con su humor característico, Trussell contestó: “En eso estoy. ¡Las Vegas para todos!”.

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