Irán: "Israel debe ser borrado del mapa"
El presidente Ahmadinejad dijo que el Estado judío es una "mancha nefasta" y se mostró a favor de los ataques palestinos
TEHERAN.- En medio de la creciente tensión entre el régimen islámico de Irán y los países occidentales por las ambiciones nucleares de Teherán, el presidente ultraconservador iraní, Mahmoud Ahmadinejad, dijo ayer que Israel es "una mancha nefasta" que "debería ser borrada del mapa", declaración que despertó duras condenas en todo el mundo.
La explosiva afirmación de Ahmadinejad, que asumió el poder en agosto último, fue interpretada en Israel y Estados Unidos como la confirmación de que Irán busca dotarse de armas nucleares, pese a que Teherán sostiene que su programa atómico tiene sólo fines civiles.
Aunque este tipo de declaraciones forman parte de la propaganda habitual del régimen de Teherán, ésta es la primera vez en muchos años que un funcionario de tan alto rango llama públicamente a la desaparición del Estado judío.
Con un tono que recordó el lenguaje del fundador de la revolución islámica, el ayatollah Khomeini -que en repetidas ocasiones pidió la destrucción de Israel-, Ahmadinejad consideró al Estado judío una entidad "artificial" y criticó a varios de sus vecinos por intentar acercarse a Tel Aviv.
"Como dijo el imán [Khomeini], Israel debe ser borrado del mapa", dijo el mandatario ante más de 4000 estudiantes durante una conferencia llamada "Un mundo sin sionismo".
"Todo el que reconozca a Israel arderá en el fuego de la furia de la nación islámica; cualquier [líder islámico] que reconozca al régimen sionista reconocerá la rendición y la derrota del mundo islámico", dijo Ahmadinejad.
El mandatario iraní también se mostró favorable a una intensificación de los atentados palestinos contra Israel. "No hay duda de que una nueva ola de ataques en Palestina borrará este estigma [Israel] del rostro del mundo islámico." Ahmadinejad reiteró en su discurso que "la nación musulmana no permitirá a su enemigo histórico vivir en su propio corazón".
Los miles de estudiantes que lo escuchaban empezaron a gritar "muerte a Israel" y "muerte a Estados Unidos".
La declaración de Ahmadinejad contrasta marcadamente con la postura de su predecesor Mohammed Khatami, un reformista que durante sus ocho años de gobierno intentó mejorar las relaciones entre Irán y Occidente.
Las palabras de Ahmadinejad llegan en un momento de fuerte tensión entre Irán y los países occidentales por su negativa a abandonar su programa nuclear. Mientras Estados Unidos e Israel acusan a Irán de buscar armas atómicas, Teherán afirma que necesita el combustible nuclear para producir electricidad. Otro factor preocupante es que Irán ha desarrollado misiles balísticos capaces de transportar cargas nucleares hasta Israel. "Esto subraya las preocupaciones que tenemos sobre las intenciones nucleares de Irán", dijo el vocero de la Casa Blanca, Scott McClellan.
Por su parte, Israel anunció que pedirá la expulsión de Irán de las Naciones Unidas. El viceprimer ministro israelí, Shimon Peres, catalogó la actitud de Ahmadinejad como un "crimen contra la humanidad", que contraviene la Carta de la ONU.
El canciller israelí, Sylvan Shalom, dijo que los dichos de Ahmadinejad demuestran que Irán representa un peligro "evidente y actual, no sólo para Israel, sino para el mundo entero".
Bomba atómica
"Consideramos que Irán está tratando de ganar tiempo para desarrollar la bomba atómica", dijo el jefe de la diplomacia israelí. "Llegó la hora de denunciar el caso iraní ante el Consejo de Seguridad de la ONU", agregó.
Las declaraciones del presidente iraní despertaron también duras protestas de Alemania y Francia, que junto con Gran Bretaña condujeron por casi dos años negociaciones con Teherán sobre su programa nuclear. Los gobiernos de Francia y España convocaron a los embajadores iraníes en sus países para pedirles explicaciones.
Irán e Israel han sido enemigos desde la creación de la república islámica, en 1979. El rechazo de Irán a reconocer a Israel es uno de los temas que más enfrentan a Teherán con los países occidentales -especialmente con Estados Unidos- junto con la presunta financiación por parte de Teherán de grupos terroristas palestinos.
Como cada año, Irán organizó para mañana, el último viernes del Ramadán, grandes manifestaciones antiisraelíes en todo el país.