Impresionante video de un niño que cae a la alcantarilla
Una placentera caminata familiar por las veredas de la ciudad china de Zunyi casi culmina en tragedia cuando un niño de tres años que paseaba con sus padres pisó una tapa de alcantarilla floja, cayó dentro del hueco y despareció en un segundo de la vista de sus progenitores. Afortunadamente, el menor pudo ser rescatado velozmente por su padre y no sufrió heridas graves.
Todo el hecho, que ocurrió en la citada ciudad del sur de China el pasado 1 de agosto, fue registrado por una cámara de seguridad de la ciudad. Allí se observa al pequeño que se acerca a la alcantarilla sin percibir el peligro que corre. Luego de un instante de vacilación, el niño pisa la tapa que, como estaba rota, cede a la presión de la pisada y se hunde junto al niño, que desaparece de la imagen, literalmente tragado por la tierra.
El video muestra que ante la caída del niño, sus padres desesperados se acercan al pozo. Ambos miran para adentro del hueco, y el padre incluso intenta meterse, pero al ver que era imposible, se acuesta en la vereda y mete parte de su cuerpo para rescatar al niño. Finalmente, y cuando se habían acercado al lugar otras personas, el papá sacá toma al niño del brazo y logra sacarlo del pozo.
"Había agua sucia en el interior, y el niño no podía ver con claridad -dijo un testigo a un medio local -. Estaba bastante asustado y sufrió algunos moretones en sus pies".
La policía llegó al lugar y se puso en contacto con gente de mantenimiento de la ciudad para que arreglaran la tapa rota, que fue inmediatamente cambiada para evitar nuevos accidentes similares, según informó la señal CCTV.
Otras noticias de Hoy
- 1
Mi Burrito Sabanero: la historia del niño venezolano que popularizó el villancico y no recibió “ni un bolívar partido por la mitad”
- 2
Vladimir Putin anticipó que habrá “más destrucción” en Ucrania tras los ataques contra Rusia
- 3
Un ómnibus chocó con un camión y se prendió fuego: 32 muertos
- 4
Cómo el caso Pelicot relanzó debates jurídicos y sociales y qué podría cambiar tras la sentencia en Francia