Gran Bretaña podría sacar el ejército a las calles
"Pueden asumir algunas tareas", indicó el primer ministro británico David Cameron, que también amplió el poder policial ante violentos con pañuelos y capuchas
LONDRES.- El primer ministro británico David Cameron anunció hoy que la policía dispondrá de más poderes para reprimir los disturbios, y no descartó recurrir al ejército en el futuro, después de que la noche anterior transcurriera en calma, tras cuatro días consecutivos de violencia.
"Mi responsabilidad es velar por que se considere toda eventualidad, incluidas algunas tareas que el ejército puede asumir, y que dejaría las manos libres a la policía en la línea del frente", declaró Cameron ante el Parlamento reunido en sesión extraordinaria y agregó que los policías tendrán ahora el poder de quitarles las máscaras, pañuelos y capuchas a los sospechosos de actividades criminales.
Muchos de los saqueadores que sembraron el terror en los últimos días en varias ciudades del país tenían el rostro cubierto, lo que complica la identificación en las cámaras de vigilancia.
"El contraataque ha comenzado de verdad. En cuanto a la minoría descontrolada, los criminales que se llevaron lo que pudieron, les digo: vamos a perseguirlos, vamos a encontrarlos, vamos a acusarlos, vamos a castigarlos. Van a pagar por lo que hicieron", indicó el líder conservador en la sesión parlamentaria para lidiar con una crisis que podría definir su mandato de 15 meses.
Ante estos disturbios que causaron cuatro muertos, las autoridades estudian las condiciones para aplicar un toque de queda y de impedir el uso de las redes sociales y de los servicios de mensajería a las personas que se sirvan de éstos para fines criminales.
Esta es una clara referencia al sistema de mensajería gratuito y codificado de los teléfonos de la marca Blackberry, utilizado mayoritariamente por los alborotadores.
En un discurso firme, el jefe del gobierno, que tuvo que suspender sus vacaciones el martes, dijo que los disturbios que tuvieron lugar en Londres y otras grandes ciudades inglesas durante cuatro días no tenían nada que ver con la política, sino que eran "robos" perpetrados por "gamberros oportunistas".
Reconocer un error
Cameron afirmó que "no permitirá que exista un clima de miedo en las ciudades" y reconoció que había "muy pocos" policías desplegados durante el auge de los disturbios, el lunes por la noche, y que las tácticas utilizadas fracasaron. El primer ministro también anunció un paquete de medidas para ayudar a numerosos propietarios de viviendas y comercios afectados.
Anoche no se produjeron disturbios, tras incrementarse del número de efectivos de las fuerzas del orden público en las calles. Además, llovió en muchas regiones del país, mientras Gran Bretaña comenzaba a estimar el costo de los daños materiales.
Unos 16.000 policías fueron desplegados en Londres durante las dos últimas noches en respuesta a los disturbios, durante los cuales cuatro personas murieron en el país y docenas de comercios y viviendas fueron quemados.
Los alborotadores saquearon desde el sábado numerosos comercios e incendiaron edificios en varias ciudades de Londres, que debe acoger los Juegos Olímpicos en 2012.
"A un año de los Juegos Olímpicos, necesitamos mostrarles que Gran Bretaña no destroza, sino que construye, que no se da por vencida, sino que se levanta, que no mira para atrás, sino siempre para adelante", estimó Cameron.
Las imágenes de violencia en el barrio de Hackney, muy cercano a la zona donde se disputarán los Juegos el próximo verano boreal, incomodan a las autoridades deportivas, que buscan nuevas maneras de reforzar la seguridad en la cita olímpica.