Francisco: "No estamos en contra del aborto por religión, es un problema humano"

A BORDO DEL VUELO PAPAL (De una enviada especial).- En la tradicional conferencia de prensa que suele brindar en sus vuelos de regreso a Roma, el Papa prefirió hablar en términos generales cuando se le preguntó por la reciente legalización del aborto en Irlanda lograda en un referéndum y sobre el debate que hubo en los últimos meses en la Argentina por el tratamiento legislativo de una ley con el mismo fin, que finalmente no se aprobó. "Sobre el aborto ustedes saben qué pensamos. El problema del aborto no es un problema religioso. Nosotros no estamos en contra del aborto por religión, no. Es un problema humano", dijo, tajante. "Y debe estudiarse desde la antropología. Analizar el aborto partiendo desde el hecho religioso es pasar por encima del pensamiento. Yo nunca permito que se comience a discutir dónde está el problema del aborto y se comience desde el hecho religioso. Es un problema antropológico, es un problema humano", insistió.

Nunca permito que se comience a discutir dónde está el problema del aborto y se empiece por el hecho religioso. Es un problema antropológico, un problema humano

Pese al cansancio acumulado en un viaje difícil e intenso, en el que no paró ni un minuto, Francisco se quedó en lo que suele llamar "la fosa de los leones" un total de 45 minutos de diálogo. Antes, a través de su vocero, hizo saber que quería que las preguntas tuvieran que ver con el viaje.

En el Airbus de Air Lingus, a 10.000 metros de altura, Francisco apareció distendido y contento por el resultado de su viaje a Irlanda, pese a que el tema de los abusos dominó una visita en la que fue muy cuestionado. En ese sentido, confirmó que fue por sugerencia del grupo de víctimas con el que se reunió el sábado último que decidió hacer en la misa final un inédito acto penitencial. "Sufrí mucho, creo que hacía falta escuchar, y de esa reunión salió la propuesta de pedir perdón hoy en la misa, pero sobre cosas concretas", dijo.

También explicó por qué no se crearon tribunales para juzgar a obispos que encubrieron o abusaron, un viejo reclamo de la sobreviviente irlandesa Marie Collins, que dejó hace un año y medio la Pontificia Comisión para la Protección de Menores por falta de avances.

"Yo la estimo mucho a Marie. Ella tiene la idea fija de que en el motu proprioComo una Madre Amorosa decía que sería bueno hacer un tribunal especial. Pero después se vio que eso no era viable ni conveniente por las diversas culturas de los obispos que podían ser juzgados", dijo. Y detalló que ahora se hace un jurado especial para cada obispo, "que es el más capaz para tomar el caso".

Sufrí mucho [en la visita a Irlanda], creo que hacía falta escuchar, y de esa reunión [con las víctimas] salió la propuesta de pedir perdón hoy en la misa"

Cuando se le preguntó qué le diría a un padre a quien su hijo le anunció que quiere ir a convivir con una persona del mismo sexo, Francisco contestó con apertura. "Primero le diría que rece. No condenar, dialogar, entender, hacer espacio al hijo y a la hija. Hacer espacio para que se exprese. Nunca diré que el silencio es un remedio. Ignorar al hijo y la hija con tendencia homosexual es una falta de paternidad y maternidad. 'Tú eres mi hijo, tú eres mi hija, como sos, hablemos'. Y si el padre o la madre no pueden, pidan ayuda, pero siempre en el diálogo, porque ese hijo y esa hija tienen derecho a una familia".

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