Francisco expulsa del sacerdocio a un clérigo chileno en el centro del escándalo de abusos

ROMA.- En otro paso para demostrar su determinación a seguir adelante con la limpieza de la Iglesia chilena y una política de "tolerancia cero" contra el escándalo de abusos sexuales por parte de sacerdotes, el Papa expulsó hoy alsacerdote pedófilo chileno Fernando Karadima, emblema de este terrible delito.

De 88 años y conocido expárroco de El Bosque, de un barrio acomodado de Santiago de Chile, Karadima había sido sancionado por el Vaticano en 2011 a una vida de "penitencia y oración", luego de ser hallado culpable de abusos sexuales y psicológicos reiterados de menores.

Pero el Papa -que se reunió con algunas de sus víctimas más conocidas en mayo pasado en el Vaticano después de comenzar un proceso de renovación en la Iglesia local, sacudida por años de encubrimientos y abusos- quiso ser más drástico. Con un decreto especial, decidió dimitir del estado clerical a Karadima, agravando al máximo el castigo anterior, que suele infligírsele a los sacerdotes ya ancianos.

"El Santo Padre tomó esta decisión excepcional en conciencia y por el bien de la Iglesia. El Santo Padre ha ejercido su 'potestad ordinaria, que es suprema, plena, inmediata y universal en la Iglesia' [Código de Derecho Canónico, canon 331] consciente de su servicio al pueblo de Dios como sucesor de San Pedro", indicó un comunicado del Vaticano. Este detalló que el decreto, que fue firmado por el Papa ayer, entró en vigor automáticamente desde ese mismo momento y comportó también la dispensa de todas las obligaciones clericales. Este le fue notificado hoy a Karadima.

"Hay dos claves para entender este decreto: la primera, que el Papa lo hace en conciencia. La segunda clave, la motivación: por el bien de la Iglesia", explicó a la prensa el vocero papal, Greg Burke. "Francisco está actuando como pastor, como padre, por el bien de todo el pueblo de Dios", agregó.

Burke destacó que la expulsión de Karadima significa "un paso más en la línea férrea del Papa ante los abusos", al rojo vivo en los últimos meses luego de terribles informes en diversos países. "Estábamos ante un caso muy serio de podredumbre y había que arrancarlo de raíz. Se trata de una medida excepcional, sin duda, pero los delitos graves de Karadima han hecho un daño excepcional en Chile", indicó.

Karadima, personaje muy ligado a sectores conservadores de la Iglesia chilena y en su juventud conocido por su carisma, fue el mentor de varios obispos chilenos, entre ellos el exobispo de Osorno Juan Barros. Su caso fue el detonante de una investigación ordenada por el Papa en febrero pasado, después de viajar al país y darse cuenta de que se había equivocado al defender a este cuestionado prelado.

Después de leer elinforme elaborado por el arzobispo Charles Scicluna, el máximo experto en pedofilia del Vaticano -a quien envió a investigar y escuchar a las víctimas de abusos-, el Papa pidió perdón por sus errores de apreciación -por haber defendido a Barros- y luego de convocar al episcopado a Roma, indujo su renuncia en bloque, un hecho sin precedente.

La expulsión de Karadima fue recibida con gran satisfacción por sus víctimas más emblemáticas. "El pedófilo Karadima expulsado del sacerdocio. Nunca pensé que vería este día. Un hombre que le arruinó la vida a tantas personas. Agradezco que Francisco haya tomado esta determinación al fin. Espero que muchos sobrevivientes sientan un ligero alivio hoy", tuiteó Juan Carlos Cruz.

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