Evo Morales, sobre la muerte del turista argentino en Bolivia al que le negaron atención médica: “Pido disculpas humildemente”
El expresidente boliviano sostuvo, sin embargo, que Alejandro Benítez sí fue asistido en un hospital de la zona y apuntó a que parte de los medios y los políticos “están exagerando”
- 5 minutos de lectura'
Después de que el argentino Alejandro Benítez fuera embestido por un camión cuando viajaba en moto por una ruta entre Santa Cruz de la Sierra y Cochabamba, en Bolivia, y sus allegados denunciaran que allí le negaron atención médica, el expresidente Evo Morales dijo que solicitó información sobre el caso y sostuvo: “Pido disculpas humildemente”.
Sin embargo, aseveró que el argentino sí recibió asistencia sanitaria, basado en información que recibió de parte del alcalde de la localidad adonde fue derivado Benítez, mientras que la Cancillería argentina enviará una nota para quejarse ante el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia.
“No tenía mucha información, pido disculpas humildemente”, comenzó Morales en Radio 10, que siguió -en principio en la misma línea que las versiones cercanas al docente jubilado salteño que falleció-: “Acabo de informarme con el alcalde de la zona de Cochabamba. Me informó el detalle: que eran tres hermanos con motos, turistas seguramente. Uno de ellos se tropezó con un trailer. En ese momento estaba una ambulancia por ahí, la ambulancia lo llevó al hospital”.
Después de que los amigos que viajaban con Benítez dijeran que el personal de salud boliviano le exigía 1000 pesos para la urgencia y para ser trasladado luego a un hospital de mayor complejidad, Morales indicó, contrario a esa versión: “Se atendió, está en el informe médico, lo reconocen sus dos compañeros”.
El expresidente, que tiene una alta injerencia en el gobierno de su alfil Luis Arce, sostuvo que el argentino estaba “muy accidentado en la cabeza” y sí admitió que pueden haber existido complicaciones para el traslado. “Tal vez no había un avión para sacarlo de ahí hacia Cochabamba o La Paz, pero se atendió. Creo que algunos medios y políticos están exagerando”, sostuvo Morales, quien hizo eje en la “solidaridad” de los habitantes de esa región donde ocurrió el siniestro.
Y para resumir, insistió: “Mi hermano alcalde me llamó, repito: posiblemente faltó algún transporte aéreo, pero se ha atendido, y sus mismos compañeros reconocen la atención que se prestó”.
Ayer Emanuel Suares Reynaga, uno de los integrantes del grupo de argentinos que viajaba por Bolivia junto a Benítez, dijo que al docente jubilado “lo dejaron morir” y que se podría haber salvado si recibía atención. “Le dije [al médico] que mi amigo estaba agonizando y me dijo ’tu plata no sirve’. Le dije que le dejaba toda mi plata, que agarre mi moto si quería, y recién ahí aflojaron. Pero ya había pasado una hora y media de que mi compañero estaba agonizando porque ellos no tenían medicamentos, no tenían nada, todo decían que les compremos”, se quejó en Cadena 3 Suares Reynaga.
Agradecimiento a la Argentina y dardos a Macri
Por otra parte, Morales se mostró agradecido a la Argentina por el asilo político que le brindó el presidente Alberto Fernández cuando debió huir de su país en 2019 durante la crisis que terminó con Jeanine Áñez -ahora presa- frente al Ejecutivo. “Es una enorme emoción, orgullo, volver a la Argentina”, expresó el antes mandatario boliviano, que desde las 13.30 comparte un almuerzo con el jefe de Estado local como parte de esta visita, que también incluyó un paso por Rosario.
Dijo, también, que la administración del Frente de Todos lo “cuidó” durante casi un año y acotó: “Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina [Kirchner], junto con [Nicolás] Maduro, Miguel [Díaz Canel] de Cuba, como en México, me salvaron la vida. Y sobre todo la Argentina. Desde acá juntos luchamos para recuperar la democracia y la patria grande. Siempre un gran recuerdo y enorme satisfacción”.
De todas formas, Morales evitó pronunciarse sobre las fricciones expuestas en la cúpula de la Casa Rosada, aunque sí les recomendó a Fernández y Cristina Kirchner enmendar las tensiones hacia el interior del Frente. “Cuando hay diferencias, hay que debatir a puertas cerradas”, recomendó el referente boliviano, quien dijo no haber tenido problemas con su vicepresidente Álvaro García Linera, pero sí con algunos ministros que se resistían a la hora de decidir las nacionalizaciones que encaró su gestión.
La sintonía con el frentetodismo quedó contrastada con los duros términos en los que habló Morales contra la gestión de Mauricio Macri, a la que acusó de haber enviado armas a su país durante el estallido de 2019, un hecho por el que hay una causa abierta en la Justicia argentina, que lo tiene como protagonista al referente de Pro.
“Para mí era patria o muerte, mucho esfuerzo denunciando para que no haya muertos, casas quemadas... Felizmente en mi gestión como presidente no hubo masacre”, sostuvo Morales, quien consideró que su país sufrió un golpe de Estado que iba por el litio boliviano. “Cuando no pueden ganar democráticamente, Estados Unidos organiza ciertos golpes de Estado y, cuando los países democráticamente se liberan, [viene el] bloqueo y el castigo económico”, acotó el líder del Movimiento al Socialismo (MAS).
Otras noticias de Evo Morales
Tensión en Bolivia. Evo Morales propone una mesa de diálogo y el gobierno de Luis Arce denuncia el secuestro de 200 soldados
Por actos durante su exilio en la Argentina. Patricia Bullrich reveló una denuncia del Gobierno contra Evo Morales por trata y abuso sexual
Tensión en Bolivia. El gobierno boliviano denuncia que partidarios de Evo Morales retienen a 200 militares en sus cuarteles
Más leídas de El Mundo
"Nos engañó". Angela Merkel en el Purgatorio: su partido reniega de la excanciller y el país revisa su legado
Denuncia penal contra el chofer. Murió una pasajera que viajaba en el colectivo que chocó contra la rambla en Montevideo
Injerencia. Moldavia y Georgia, los otros países acariciados por las garras del Kremlin
La fortuna de los Windsor. Una investigación revela el origen de los millonarios ingresos del rey Carlos III y el príncipe Guillermo