Estados Unidos: un gobernador amenaza con declarar la “invasión” de inmigrantes y piensa movilizar al Ejército
La decisión le permitía obtener poderes de “guerra”, analizan una presentación ante la Corte estadounidense
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La situación de los inmigrantes en la frontera entre México y Estados Unidos puede cambiar radicalmente si prospera la idea que analiza el gobernador de Texas, Greg Abbott. El mandatario republicano reconoció que baraja declarar una “invasión” de su territorio por parte de los inmigrantes que llegan desde México.
La declaración de invasión le permitiría a Abbott asumir poderes y facultades como si se encontrara en una guerra, y ampliar, de esa forma, sus competencias, según consignó The New York Times. El dirigente se ha quejado en más de una oportunidad respecto de la falta de acciones ante la “creciente” ola de personas que cruzan la frontera.
Para llevar adelante a su cometido, Abbott tiene que apelar a un artículo de la Constitución federal que estipula que los estados no pueden participar en una guerra, con excepción de que “realmente sean invadidos”.
En el análisis de la declaración trabajan los abogados de Abbott y también el equipo del fiscal general de Texas, Ken Paxton, que ha manifestado preocupación por la cuestión.
La medida pondría a Texas en un choque frontal con el gobierno federal, a cargo del presidente Joe Biden, al permitir que la policía estatal arreste y deporte a los inmigrantes, según informa ‘The New York Times’, que señala a dos fuentes al tanto de las conversaciones.
El gobernador texano insiste en que sigue “abierto a opciones”, pero dijo estar preocupado por las “consecuencias no deseadas” en caso que no se tomen medidas para frenar la inmigración ilegal.
Abbot ya movilizó a miles de tropas de la Guardia Nacional para que vigilaran los puestos fronterizos. De hecho, ordenó inspecciones de seguridad de los camiones provenientes de México, lo que provocó por varios días una interrupción del comercio internacional.
Abbott había ordenado inspecciones, en respuesta al anuncio del gobierno de Biden de que pondría fin a la vigencia de una ley de salud pública que limita las solicitudes de asilo en la frontera con el propósito de evitar la propagación del Covid-19. Una vez que eso suceda, se prevé que aumentaría el número de migrantes hacia Estados Unidos.
A su vez, el mandatario, que gobierna desde 2015, impulsó la construcción de 32 kilómetros de nuevas vallas fronterizas para impedir los cruces ilegales. También destinó prisiones estatales para alojar inmigrantes y alquiló colectivos para llevar a los inmigrantes desde Texas a Washington DC respecto de los trámites de deportación.
“Conseguir la atención de Washington”
De acuerdo a The Texas Tribune, un grupo de legisladores estatales comenzó a presionar al fiscal general en el último tiempo para involucrarse en la discusión legal de la declaración de invasión. Abbott aceptó el jueves estudiar la medida.
El medio texano sostuvo, además, que un grupo de funcionarios de la administración de Donald Trump han hecho lobby también por la medida. También lo ha realizado el Consejo de la Guardia Nacional Fronteriza, que agrupa a los soldados que custodian las fronteras.
Un miembro del Comité de Seguridad de Frontera del Senado, el demócrata, Juan “Chuy” Hinojosa, dio su versión a The Texas Tribune en este sentido. “Hasta que la administración Biden no lo aborde correctamente, con control de documentación correspondientes, mano de obra y equipamiento necesario, el gobernador Abbot empujará los límites y mantendrá su foco en este asunto hasta que Washington le asigne atención”, indicó.
Con información de Europa Press
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