“Es una pesadilla de nunca acabar”: la agónica espera de una familia argentina que busca a su hija en Miami
Pablo y Andrea Langesfeld revelaron los momentos posteriores al derrumbe del edificio donde vive su hija Nicole
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Ya pasaron más de diez días desde una de las mayores catástrofes urbanas que ocurrieron en Estados Unidos, que ubicó a Miami como protagonista, cuando una de las torres del complejo Champlain Towers South se convirtió en escombros en cuestión de segundos. El paso del tiempo no logra aliviar el dolor incesante de la familia Langesfeld, que sin agotar las esperanzas, espera la aparición con vida de Nicole Langesfeld, una de las 118 personas desaparecidas.
“Es una pesadilla de nunca acabar”, dijo a LA NACION Pablo Langesfeld, el padre de “Nicky”, como la llaman sus seres queridos, con la voz quebrada e intentando controlar en cada palabra la tristeza que lo aborda desde el 24 de junio.
Nicole Langesfeld, de 26 años, es estadounidense nacida en Miami. Sus padres son argentinos y residen en el país hace aproximadamente 30 años, donde formaron su familia y tuvieron dos hijos: Nicole y su hermano menor, Martín.
En enero, “Nicky” se casó con Luis Sadovnic, de Venezuela, su novio desde hacía siete años. Se conocieron en la Universidad de Florida en Gainesville, mientras Langesfeld comenzaba sus estudios en la carrera de abogacía.
La reciente novia apenas se había mudado hacía unos meses al departamento de su marido, el 804 del octavo piso del edificio, cuando ocurrió la tragedia. Ahora, los familiares de ambos son parte de la desesperada búsqueda por encontrarlos.
La madrugada de aquel jueves se transformó en una pesadilla para Pablo y su esposa Andrea, la madre de Nicole. “Nos enteramos muy temprano y fuimos corriendo. Prácticamente desde que ocurrió el incidente no volví a mi casa. Así como estaba salí”, contó Pablo. “Una tragedia que no tiene palabras”.
Desde entonces, los días se viven “minuto a minuto”, asegura Pablo, en medio de una desgarradora espera por buenas noticias del equipo de rescatistas que trabaja en el lugar del incidente.
“Las esperanzas siguen”, asegura el padre con un profundo dolor. “Es muy duro. Vivimos minuto a minuto. Es durísimo”.
Pablo recuerda los momentos felices que pasó con su familia, a la cual considera “muy, muy unida” y con quienes lleva “la mejor” relación. “Íbamos prácticamente todos los fines de semana a la playa. El edificio estaba en la playa. Disfrutábamos a full”.
Del mismo modo habla de la relación entre Nicole y su hermano Martín, de 23 años. “Siempre muy muy unidos con su hermana y con Luis, el esposo”.
De eso se trata la vida para Nicky, “de vivirla con sus seres queridos, amigos, familiares y animales. Disfruta de ellos como motor de vida que también la impulsan a desarrollarse especularmente en su vida profesional”.
Nicole terminó su carrera universitaria en la Universidad de Miami, donde se recibió con honores y cumplió su sueño de ser abogada. Trabaja en Reed Smith, una firma de abogados global donde fue contratada a tiempo completo en 2019.
Andrea, su madre, cuenta a LA NACION que es una excelente y exitosa abogada. Disfruta mucho su carrera y se dedica a crecer profesionalmente día a día.
“Desde chiquitita que quería ser abogada”, confiesa su padre, conmovido. “Es lo único que quería ser”. Así es como realiza su trabajo de manera impecable. Persona responsable si las hay, siempre dedicó y buscó la manera de equilibrar su vida entre el trabajo y seres queridos, al ser apasionada por lo que hace.
“Es una persona alegre, divertida, trae luz a todos lados. Es una belleza de persona, por dentro y por fuera”, describe Andrea Langesfeld. “Estoy tan orgullosa de ser su mamá”.
Quienes mejor la conocen, aseguran que “Nicky” es muy querida por todos: “No hay una persona que no la recuerde con tanto amor, tanto cariño, con tanta luz. Porque lo que Nicky tiene es una luz”, dice Andrea, quien aparte de madre y mejor amiga, es su confidente.
Madre e hija iban más allá de una relación común. Si bien Nicky ya no vive con ella, tienen cotidianamente momentos para encontrarse. Su madre es su consejera número uno y la persona que mejor guarda sus secretos.
“Todo el mundo que conoce a Nicky la ama, las descripciones de su personalidad son trasmitidas con puro amor, ya que eso irradia e irradiará por siempre: amor”.
Entre la tristeza, florecen los comentarios de apoyo a la familia, quien asegura estar muy agradecida por la ayuda que recibió por parte de los rescatistas, sus amigos, la comunidad judía de la cual son parte e incluso de los argentinos que acompañaron a la distancia.
“El apoyo fue inmenso. Quiero agradecer mucho a la gente”, mencionó Pablo Langesfeld.
La familia estuvo reunida durante la semana pasada con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien viajó el pasado jueves al lugar de los hechos para reunirse con las autoridades, los rescatistas, y las familias de las víctimas.
“Como mínimo, quieren recuperar los cuerpos”, dijo Biden tras las reunión en un breve discurso. “Son realistas. Ya es bastante malo perder a alguien, pero lo difícil, lo realmente difícil, es no saber si sobrevivieron o no. Simplemente no tener ni idea”, agregó.
El equipo de rescatistas retomó las tareas de búsqueda y rescate en la noche de ayer luego de la demolición final del edificio. Las autoridades decidieron tirar abajo la estructura que se mantenía en pie ante la preocupación de que estuviera en riesgo de venirse abajo, lo que pondría en peligro a las cuadrillas que trabajan en el lugar.
El total de personas fallecidas por el derrumbe del edificio en Florida es de 27, luego de que se encontraran tres víctimas que aún no fueron identificadas en la mañana de hoy.
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