En la noche del miércoles 29 de enero, un avión de pasajeros de American Airlines, operado por PSA Airlines bajo la marca American Eagle, chocó con un helicóptero militar Blackhawk (H-60) durante su llegada al Aeropuerto Nacional Reagan, y cayó en las heladas aguas del río Potomac. El trágico accidente dejó varias víctimas fatales, y los equipos de rescate continúan trabajando para hallar sobrevivientes. En respuesta a esta tragedia, Robert Isom, CEO de American Airlines, se dirigió al público mediante un video publicado en el sitio oficial de la aerolínea.