El dolor de la reina Letizia al hablar sobre Anna y Olivia, las hermanas desaparecidas en Tenerife

La reina Letizia se emocionó al referirse a Anna y Olivia, las dos niñas desaparecidas en Tenerife. Buscadas desde el pasado 27 de abril, este jueves se supo que fue hallado el cuerpo de Olivia, de seis años, en una bolsa con un ancla a unos mil metros de profundidad en la costa española. Todavía continúan los intentos para encontrar a Anna, la hermana menor, de apenas un año de edad.

En un evento organizado para mujeres por una entidad bancaria, Letizia compartió su angustia en un conmovedor mensaje. “Es difícil evitar la expresión de dolor y de tristeza por el asesinato de menores, según las noticias que nos han golpeado en las últimas horas”, comenzó con la voz quebrada la esposa de Felipe VI.

Luego agregó, al borde de las lágrimas: “Me refiero a las niñas de Tenerife y a la niña asesinada en una localidad sevillana, una menor de 17 años”. Así, la reina también manifestó su dolor por la muerte de Rocío Caíz: tras estar desaparecida durante una semana, en las últimas horas la pareja de la adolescente confesó haberla asesinado y descuartizado.

Para cerrar su discurso, Letizia expresó: “No creo que haya nadie esta mañana que no intente ponerse en la piel de las personas que aman a estas niñas”.

El caso de Anna y Olivia, las niñas desaparecidas en Tenerife

La tarde del 27 de abril, Tomás Gimeno, de 37 años, recogió a sus dos hijas para llevarlas a cenar, según las investigaciones. Primero se presentó en la casa de su exesposa, Beatriz Zimmermann, para recoger a Anna. Luego fue a por Olivia a una práctica del colegio en Santa Cruz de Tenerife, en Islas Canarias, y se trasladó con ambas niñas al municipio de Igueste de Candelaria, según han explicado la Guardia Civil y autoridades locales.

Más tarde esa misma noche, Gimeno fue visto en el embarcadero del Puerto Deportivo Marina de la Cruz de Tenerife. Las cámaras de seguridad registraron su presencia, pero no se le vio acompañado de las niñas.

Sin embargo, el hombre hizo dos viajes a su auto para llevar seis bolsas a la embarcación que tenía atracada en ese esa marina deportiva del norte de la ciudad, y se sabe que realizó dos viajes en su bote. En el primero, la Guardia Civil se encontró con Gimeno y lo amonestó por saltarse el toque de queda vigente entonces en Tenerife por la pandemia de Covid-19. A su vuelta a tierra, dos horas después, volvió sin las bolsas que subió a su bote y estuvo un rato cargando su teléfono celular.

Además, tuvo varias conversaciones telefónicas con Zimmermann, a quien le dijo que nunca más volvería a ver a sus hijas ni tampoco a él. Pasada la medianoche, volvió a zarpar y ya no regresó a tierra.

El barco de Gimeno fue encontrado sin nadie abordo y sin el ancla al día siguiente, cerca de Puertito de Güímar, al sur de Tenerife. Desde entonces comenzó la búsqueda de la Guardia Civil y las autoridades locales, a la que se sumó el Instituto Oceanográfico Español con el buque “Ángeles Alvariño” especializado en reconocimiento del fondo marino.

El pasado 7 de junio, se encontró una botella de aire comprimido y una funda de edredón de Gimeno, lo que daba indicios de un posible punto de rastro de las niñas y el padre. Luego de más operaciones de rastreo, las autoridades informaron este jueves del hallazgo de un cuerpo a mil metros de profundidad que más tarde confirmaron como el cadáver de Olivia Gimeno Zimmerman. Estaba en una bolsa atada al ancla faltante del barco de su padre.

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