"El ataque a Italia fue favorecido por las agencias calificadoras"

ROMA.- "Italia no es Grecia." Para Gianfranco Pasquino, politólogo italiano que tuvo entre sus maestros a Norberto Bobbio y Giovanni Sartori, Italia ha sido víctima de un ataque especulativo sin precedente en los últimos días porque es un blanco mucho más grande e importante que Grecia para ganar dinero.

Muy crítico de las agencias de calificación, Pasquino, profesor de ciencia política de la Universidad de Bolonia y director de la maestría Europa-América latina que ese mismo instituto dicta en Buenos Aires (adonde viajará en breve), tampoco descartó la existencia de un intento desde el exterior de desestabilizar el euro, en una entrevista con La Nacion.

-¿Cómo evalúa el ataque especulativo de los últimos días? ¿Italia es como Grecia?

-No, Italia ciertamente no es Grecia. Pero resulta claro que si los especuladores (pueden ser bancos de inversión o algunos clientes que tienen mucho dinero, y no necesariamente tienen que ser occidentales, sino que también pueden ser chinos) se dan cuenta de que pueden hacer mucho dinero con Grecia, saben que pueden hacer muchísimo más dinero con Italia. Por lo tanto Italia es, en este sentido, un blanco muy grande. Creo que Italia tiene capacidad de reaccionar y quizás ya ha reaccionado, pero es evidente que se trata de un ataque muy fuerte, también favorecido por estas agencias de calificación norteamericanas, que me parecen un poco superficiales y, quizás, un poco interesadas, ellas también, con sus clientes.

-¿Cree que ahora la aprobación "relámpago" del plan de ajuste presupuestario por parte del Parlamento salvará a Italia?

-La aprobación "relámpago" es muy importante porque es también una señal de que la clase política italiana, oficialista y de oposición, sabe reaccionar de manera adecuada en una situación de crisis. Pero también es necesario que estas medidas de austeridad funcionen y por lo tanto queda por verse si las medidas funcionan enseguida, reduciendo el spread entre los títulos de Estado italianos y los alemanes, favoreciendo también el relanzamiento del crecimiento económico. Porque el problema italiano es doble: una altísima deuda pública y un bajísimo crecimiento de la economía.

-¿La falta de credibilidad de Italia se debe a estos dos factores económicos y también a la decadencia de Silvio Berlusconi?

-Creo que existe en esta crisis el elemento de la decadencia de Berlusconi, no sé cuán fuerte, pero evidentemente existe. Por otra parte, este elemento de algún modo está contrabalanceado por el hecho de que Tremonti (Giulio, ministro de Economía) tiene credibilidad internacional. Todos los que quieren que la economía mejore saben que si Tremonti se queda, hay posibilidades. Pero si Berlusconi se libera de Tremonti, la situación se torna mucho más complicada. Y, por otro lado, tenemos suerte porque Mario Draghi ha sido designado como el nuevo presidente del Banco Central Europeo, lo cual indica que hay economistas buenos y personas confiables en Italia.

-Usted antes mencionaba que podría haber también chinos entre los especuladores; ¿para usted existe un interés externo en una desestabilización del euro?

-Sí, claro. No es que los chinos estén interesados en desestabilizar el euro, pero sí están interesados en ganar plata y poseen un porcentaje (3 o 4%) de títulos italianos. No acuso al gobierno chino, porque pueden ser los capitalistas que hay en China, sino a un conjunto de factores que al final producen consecuencias que vimos el lunes pasado, porque ese día el desplome de la Bolsa [de Milán] fue realmente muy grave.

-¿Piensa que el euro está realmente en peligro?

-Creo que Europa es una zona económicamente fuerte. El euro no está en peligro si Alemania y Francia quieren salvarlo. En cualquier momento pueden hacerlo. Esperaría un poco más de cooperación de parte de los ingleses, porque siguen mirando sin tomar partido.

-Volviendo a la decadencia de Berlusconi, ¿para Ud. cuánto durará?

-Berlusconi está en vías de irse. Claro, los tiempos son importantes. Si se va dentro de seis meses, hay ciertas consecuencias; si se va dentro de dos años, otras, porque ya demostró que no es apto para gobernar. Por lo tanto, quedaría patente una gran debilidad italiana si Berlusconi siguiera otros dos años sin gobernar y con las tensiones que crea entre él, Tremonti y otras personas del gobierno.

-¿Cree que Berlusconi logrará terminar su mandato, en 2013?

-Me parece muy difícil. También porque él mismo puso en marcha un proceso que difícilmente le permita quedarse hasta el final de la Legislatura. Nombró como jefe de su partido, el Partido del Pueblo de la Libertad (PDL), al joven Angelino Alfano, que para reforzar el partido, que es el gran objetivo, debe reducir el poder de Berlusconi, que automáticamente se va a debilitar. En segundo lugar, en el PDL hay quien entendió algo muy importante, que la centroizquierda no entendió, que es que el centrista Pier Ferdinando Casini está dispuesto a volver a ese partido, siempre y cuando Berlusconi se vaya. Y lo mismo pasa con el ex aliado Gianfranco Fini. Entonces, si el PDL quiere ganar las próximas elecciones, necesita que Berlusconi se vaya, porque necesita de esos dos aliados.

DUDAS SOBRE LA REELECCIÓN DE CRISTINA

ROMA (De nuestra corresponsal).- Pasquino conoce muy bien la Argentina y viajará en breve al país para recibir un doctorado honoris causa de la Universidad Católica de Córdoba. Durante la entrevista con La Nacion, se refirió a las posibilidades que tiene Cristina Kirchner de ser reelegida. "Mi impresión es que Cristina está en una situación relativamente buena, pero no significa que no pueda pasar a estar en una situación totalmente mala, porque me parece que no está para nada descontado que va a ganar las elecciones. Lo que pase de aquí a octubre es importante porque hay posibilidades de que haya dificultades", dijo.