EE.UU. tiene listas sanciones contra la supuesta amante de Putin, pero todavía es cauteloso en aplicarlas
Alina Kabaeva es sospechosa de haber desempeñado un papel en la ocultación de la riqueza personal del presidente ruso en el extranjero
- 6 minutos de lectura'
NUEVA YORK.- Han pasado varias semanas desde que Estados Unidos y sus aliados impusieron por primera vez sanciones a las mayores empresas rusas y a sus dirigentes empresariales y políticos, incluido el presidente Vladimir Putin.
Sin embargo, una persona se ha librado, en una decisión de última hora: Alina Kabaeva, la mujer que el gobierno estadounidense cree que es la “amante” de Putin y la madre de al menos tres de sus hijos.
Kabaeva, ex campeona olímpica de gimnasia rítmica conocida en el deporte por su extrema flexibilidad y por un escándalo internacional de dopaje, es sospechosa de haber desempeñado un papel en la ocultación de la riqueza personal de Putin en el extranjero, dijeron funcionarios estadounidenses, y sigue siendo un objetivo potencial de sanciones.
La creencia entre los funcionarios norteamericanos que debaten la medida es que sancionar a Kabaeva se consideraría un golpe tan personal para Putin que podría escalar aún más las tensiones entre Rusia y Estados Unidos. El Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que según funcionarios estadounidenses preparó el paquete de sanciones contra Kabaeva, ahora en suspenso, declinó hacer comentarios.
El Kremlin ha negado durante mucho tiempo cualquier relación entre Putin y Kabaeva. En 2008, el presidente ruso dijo en respuesta a los informes de los periódicos sobre su supuesta relación con la gimnasta: “Siempre me han disgustado aquellos que, con sus narices mocosas y sus fantasías eróticas, irrumpen en los asuntos privados de otras personas”.
Putin lleva un estilo de vida casi monacal, dedicado al servicio público y con apenas tiempo para su vida personal, según los retratos que se hacen de él en los medios de comunicación estatales. El líder ruso tiene dos hijas de su anterior matrimonio con Ludmilla Shkrebneva: Katerina Tikhonova, de 35 años, y Maria Vorontsova, de 36, que fueron incluidas en el paquete de sanciones.
El sábado, Kabaeva hizo una rara aparición pública en el VTB Arena de Moscú para presentar una actuación de gimnasia rítmica en el festival Alina, una exhibición que lleva su nombre. “Cada familia tiene una historia relacionada con la guerra, y debemos transmitirla a las siguientes generaciones (...) La gimnasia rusa se hará más fuerte gracias al aislamiento internacional”, dijo frente a una valla publicitaria cubierta de logotipos “Z”, el símbolo de apoyo a las operaciones militares de Rusia en Ucrania. “Sólo ganaremos con esto”, añadió.
Putin's rumored mistress Alina Kabaeva made a rare appearance in Moscow, at the gymnastics festival "Alina" (named in her honor). Standing in front of a backdrop covered with "Z" symbols, Kabaeva spoke of WWII and said, without a hint of irony: "Every family has a war story." pic.twitter.com/5ELCdDjgzV
— Julia Davis (@JuliaDavisNews) April 24, 2022
Está previsto que el festival Alina se emita en mayo, como parte de las celebraciones para conmemorar la victoria de Rusia sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial. Los analistas rusos han dicho que Putin podría utilizar la celebración para proclamar una victoria militar en Ucrania.
El movimiento contra Kabaeva es una de las acciones que se consideran lo suficientemente conflictivas como para complicar aún más los esfuerzos para una paz negociada en Ucrania. “Hemos preparado sanciones para una serie de personas que aún no han sido sancionadas, y seguimos pensando en cuándo imponer esas sanciones para que tengan el máximo impacto”, dijo un funcionario estadounidense en respuesta a las preguntas de The Wall Street Journal.
Kabaeva y su familia se han enriquecido gracias a las conexiones con personas del círculo íntimo de Putin. Una evaluación clasificada de la inteligencia estadounidense durante la investigación sobre la presunta interferencia rusa en las elecciones estadounidenses de 2016, nombra a Kabaeva como beneficiaria de la riqueza del presidente ruso.
Los funcionarios occidentales dicen que no conocen la posición exacta de Kabaeva en la estructura de poder del Kremlin. La reconocida gimnasta ha permanecido en Suiza durante largos períodos de tiempo, donde vivió en una mansión de altos muros con un helipuerto en Cologny, un lugar aislado para multimillonarios y estrellas del deporte en las colinas sobre el lago de Ginebra. Un funcionario estadounidense dijo que los asociados de Putin realizaban negocios allí.
El gobierno ucraniano ha intensificado sus llamamientos a Occidente para que emprenda acciones contra ella. La Rada escribió este mes al gobierno suizo exigiéndole que prohíba la entrada de Kabaeva al país y que confisque los bienes inmuebles que posea. El gobierno suizo dijo que no tenía ningún indicio de que estuviera en el país.
Kabaeva nació en Uzbekistán y abandonó la escuela secundaria para dedicarse al deporte. Tenía 21 años cuando ganó una medalla de oro en gimnasia rítmica en los Juegos Olímpicos de 2004 en Atenas. Se convirtió en una estrella nacional, conocida por un movimiento característico, que se denominó “Kabaeva” en el reglamento de gimnasia rítmica. Eso le valió el título informal de “la mujer más flexible de Rusia”.
En 2001, Kabaeva fue despojada de sus medallas en los campeonatos mundiales de Madrid tras dar positivo por un diurético prohibido. Afirmó que la sustancia procedía de pastillas contaminadas que había comprado en una farmacia cercana. La deportista cumplió una sanción de un año y volvió a ganar el siguiente Campeonato del Mundo y la medalla de oro en Atenas.
Su nombre se mencionó por primera vez en el sitio web del Kremlin en 2001. Putin asistió a un espectáculo deportivo y fue fotografiado junto a ella, que en ese entonces tenía 18 años. El Moskovsky Korrespondent, un periódico sensacionalista ruso, informó en 2008 que el presidente, que estaba casado en ese momento, y Kabaeva estaban comprometidos. El periódico fue cerrado días después por su propietario, National Media Co., después de que Putin desmintiera furiosamente la historia.
Por aquel entonces, Kabaeva se retiró de la gimnasia y entró en la política como legisladora del partido gobernante Rusia Unida de Putin. Recibía un salario de 11 millones de rublos, unos 140.000 dólares.
La ex gimnasta dejó el parlamento en 2014 para convertirse en presidenta del Grupo de Nuevos Medios de Comunicación de Rusia, que controla los principales sitios web de televisión, radio y noticias progubernamentales. Fue nombrada por el propietario de NMG, Yuri Kovalchuk, el mayor accionista de Rossiya Bank.
Desde alrededor de 2013, Kabaeva y sus familiares han adquirido seis departamentos, dos casas y acres de tierra en cuatro de las regiones más exclusivas de Rusia, según los datos del registro de la propiedad de Rusia, Rosreestr.
Funcionarios occidentales dijeron que Kabaeva viajó a Suiza y dio a luz a un hijo Putin en 2015, algo que el Kremlin luego desmintió.
En 2019, Kabaeva dio a luz a gemelos en Moscú, dijeron funcionarios estadounidenses, aunque no se informó oficialmente. El sitio web del periódico Moskovsky Komsomolets publicó una noticia sobre los gemelos. El artículo, que no nombraba al padre, fue rápidamente retirado.
The Wall Street JournalOtras noticias de Guerra en Ucrania
Con capacidad nuclear. Ucrania denuncia que Rusia disparó por primera vez un misil intercontinental
5800 kilómetros de alcance. Cómo es el misil intercontinental RS-26 Rubezh que lanzó Rusia, según Ucrania
“Al límite de nuestras capacidades”. El agotamiento de las fuerzas ucranianas ante la renovada ofensiva de Rusia en la guerra
Más leídas de El Mundo
Nueva fase. El juego político en las potencias mundiales que explica la última escalada en la guerra de Ucrania
Tensión en Ucrania. EE.UU. y países europeos cierran sus embajadas en Kiev ante el riesgo de un “ataque aéreo significativo” de Rusia
Desregulación y ajuste. El abrupto giro a la derecha de Nueva Zelanda tras tener uno de los gobiernos más progresistas del mundo
1000 días de guerra. Ucrania, agotada: “Quizás vale la pena decir de acuerdo, tomen esta parte, pero déjennos en paz”