El Cáucaso ruso, caldo de cultivo de células terroristas
El conflicto armado en la zona convirtió a esa región en epicentro de insurgentes islamistas
MAJACHKALA, Rusia.– Extremistas de Chechenia y otras regiones intranquilas en el Cáucaso norte lanzaron ataques y orquestaron tomas de rehenes en Moscú y otras áreas. Pero, si se confirma que las explosiones en Boston están vinculadas con esa violencia, sería la primera vez en que el conflicto ruso genera un ataque terrorista en Occidente.
Los dos sospechosos del ataque en Boston fueron identificados como Tamerlan y Dzhokhar Tsarnaev, dos hermanos de la región rusa cerca de Chechenia, pero no había información inmediata de si tenían lazos con grupos extremistas allí.
El tío de los sospechosos confirmó la información oficial de que el joven abatido es Tamerlan, oriundo de una región cercana a Chechenia, y que era hermano mayor de Dzhokhar A. Tsarnaev, de 19 años, que anoche fue arrestado.
Antes de radicarse en Estados Unidos, en 2002, Dzhokhar –a quien su padre definió como "un verdadero ángel"– y Tamerlan vivieron en Majachkala, capital de Daguestán, una república predominantemente musulmana, que se convirtió en epicentro de la insurgencia islamista proveniente de Chechenia.
El conflicto armado en Chechenia comenzó en 1994 como una guerra separatista, pero se transformó rápidamente en una insurgencia que buscó la creación de un Estado islámico independiente en el Cáucaso.
Los soldados rusos se retiraron de Chechenia en 1996 al finalizar la primera guerra chechena, dejando el territorio de facto independiente y básicamente en caos, pero regresaron tres años más tarde, luego de explosiones en edificios de apartamentos en Moscú y otras ciudades atribuidas a los extremistas.
Chechenia se estabilizó bajo el férreo control del presidente Ramzan Kadyrov, un ex rebelde cuyas fuerzas fueron acusadas de múltiples violaciones de derechos humanos. Pero la violencia islámica se extendió a provincias vecinas, con Daguestán, ubicada entre Chechenia y el mar Caspio, escenario de ataques diarios contra policías y otras autoridades.
Extremistas islámicos en Chechenia y provincias vecinas lanzaron ataques terroristas en Rusia, incluida una toma de rehenes en un teatro en Moscú, en 2002, en la que murieron 129 rehenes; otra toma de rehenes en una escuela en la sureña ciudad de Beslán, que causó 330 muertes, y bombas en Moscú y otras ciudades.
En años recientes, sin embargo, los extremistas se abstuvieron de ataques fuera del Cáucaso.
Las autoridades rusas afirman que los rebeldes chechenos mantuvieron fuertes vínculos con la red terrorista Al-Qaeda. Según sostienen, decenas de militantes de países árabes se infiltraron en Chechenia durante el conflicto armado allí, mientras que militantes chechenos fueron a luchar a Afganistán.
Estados Unidos instó al gobierno ruso y a los separatistas en Chechenia no alineados con Al-Qaeda ni con otros grupos terroristas a encontrar un acuerdo político.
Pero Washington siempre respaldó la unidad territorial de Rusia, y nunca apoyó el deseo de los separatistas de un Estado independiente. El gobierno estadounidense, además, apoya, desde siempre, a Rusia en su lucha por erradicar el terrorismo en la región.
Chechenia, un eterno polvorín
- La lucha armada
El conflicto armado en Chechenia comenzó en 1994 como una guerra separatista, pero rápidamente se convirtió en una insurgencia islámica, que buscó la creación de un Estado islámico independiente en el Cáucaso. - La situación actual
Si bien en los últimos años Chechenia se estabilizó bajo el férreo control del presidente Ramzan Kadyrov, un ex rebelde cuyas fuerzas fueron acusadas de múltiples violaciones de derechos humanos, la violencia islámica se extendió a las provincias vecinas.
A. Mollayev y V. Isachenkov