Desde Mar-a-Lago, Donald Trump sigue siendo amo y señor del Partido Republicano
El exmandatario dirige una ofensiva sin cuartel para desbancar a su principal blanco en el Congreso: la legisladora Liz Cheney, hija del exvicepresidente Dick Cheney
- 3 minutos de lectura'
WASHINGTON.- Desde su resort Mar-a-Lago, Donald Trump sigue manejando los hilos del Partido Republicano. El firme control del exmandatario quedó a la vista esta semana, cuando el trumpismo desplegó toda su furia contra una figura puntual del Congreso: Liz Cheney, la tercera republicana más importante de la bancada opositora en la Cámara de Representantes, hija del exvicepresidente, Dick Cheney.
Trump y sus aliados en el Capitolio han desplegado una ofensiva para reemplazar a Cheney, congresista por un distrito de Wyoming, de la cúpula republicana en el Congreso, una disputa que tiene como trasfondo la gran discusión que ha signado a los republicanos desde al año pasado: la acusación, falsa, de que el presidente Joe Biden ganó la elección presidencial gracias a un fraude masivo.
“La belicista Liz Cheney, a quien prácticamente no le queda apoyo en el Gran Estado de Wyoming, continúa diciendo, sin saberlo y tontamente, que no hubo fraude electoral en las elecciones presidenciales de 2020 cuando, de hecho, la evidencia, incluidas las aprobaciones legislativas, como lo exige la constitución de Estados Unidos, muestra exactamente lo opuesto”, dijo Trump esta semana, en un comunicado difundido por su oficina de prensa, perpetuando lo que en Estados Unidos ha pasado a llamarse “la gran mentira”.
Unas horas más tarde, Cheney publicó una columna en The Washington Post en la cual afirmó que el Partido Republicano se encontraba en “un punto de inflexión”.
The 2020 presidential election was not stolen. Anyone who claims it was is spreading THE BIG LIE, turning their back on the rule of law, and poisoning our democratic system.
— Liz Cheney (@Liz_Cheney) May 3, 2021
“Trump busca desentrañar los elementos críticos de nuestra estructura constitucional que hacen que la democracia funcione: la confianza en el resultado de las elecciones y el Estado de Derecho. Ningún otro presidente estadounidense ha hecho esto nunca”, escribió la congresista. “El Partido Republicano se encuentra en un punto de inflexión y los republicanos deben decidir si vamos a optar por la verdad y la fidelidad a la Constitución”, apuntó.
Pero los republicanos en el Congreso parecen decididos a respaldar a Trump. La bancada republicana de hecho ya parece tener lista a su reemplazante: Elise Stefanik, congresista de Nueva York, una partidaria incondicional de Trump. El jefe de la oposición en la Cámara baja, Kevin McCarthy, también ha dado sobradas muestras de su respaldo al magnate.
El control de los republicanos quedó en evidencia también en una fotografía difundida esta semana en Twitter. El senador Ted Cruz, antaño rival de Trump en las elecciones primarias de 2016, viajó hasta Florida para compartir una cena con el exmandatario, y sacarse la foto de rigor.
“Tuve una gran cena esta noche con el presidente Trump en Mar-a-Lago”, tuiteó Cruz junto con la imagen. “¡Está de muy buen humor! Pasamos la noche hablando sobre trabajar juntos para volver a tomar la Cámara de Representantes y el Senado en 2022”, continuó.
Had a great dinner tonight with President Trump at Mar-a-Lago.
— Ted Cruz (@tedcruz) May 5, 2021
He’s in great spirits! We spent the evening talking about working together to re-take the House & Senate in 2022. 🇺🇸🇺🇸🇺🇸 pic.twitter.com/OdtUBxHGSn
El continuo respaldo de los republicanos a Trump volvió a dejar en claro que el trumpismo sigue siendo la principal fuerza política de la oposición. Muchos republicanos en Washington aún sostienen que a Trump “le robaron” la elección, una postura que arroja un manto de ilegitimidad sobre la presidencia de Joe Biden, aun cuando las legislaturas estatales, el Congreso, y la Justicia –más de 60 tribunales estatales y federales rechazaron las acusaciones de fraude– avalaron los resultados de los últimos comicios.
Cheney ha quedado aislada y en solitario, ensayando una defensa de un Partido Republicano que muchos creen perdido para siempre a manos de un culto a Trump.
“La historia está mirando. Nuestros hijos están mirando. Debemos ser lo suficientemente valientes para defender los principios básicos que sustentan y protegen nuestra libertad y nuestro proceso democrático”, escribió en The Washington Post. Nada sugiere que el partido responderá a ese llamado.
Otras noticias de Donald Trump
Más leídas de El Mundo
Tensión en Ucrania. EE.UU. y países europeos cierran sus embajadas en Kiev ante el riesgo de un “ataque aéreo significativo” de Rusia
Giro en la guerra. El mapa que muestra hasta dónde pueden llegar los misiles de largo alcance lanzados desde Ucrania hacia Rusia
Desregulación y ajuste. El abrupto giro a la derecha de Nueva Zelanda tras tener uno de los gobiernos más progresistas del mundo
1000 días de guerra. Ucrania, agotada: “Quizás vale la pena decir de acuerdo, tomen esta parte, pero déjennos en paz”