Descubren un fósil de cangrejo de 310 millones de años con el cerebro intacto
Un estudio publicado en una revista especializada explica por qué la presencia de un mineral fue clave en la conservación de los tejidos blandos del artrópodo
- 3 minutos de lectura'
A lo largo de los años, los científicos han descubierto un sinfín de restos de los animales más diversos que habitaron la Tierra en distintos períodos. Pero un estudio reciente sorprendió a los especialistas por una característica única en lo que a conservación se refiere: un fósil de un cangrejo herradura de más de 310 millones de años con su cerebro intacto.
Un estudio reciente publicado en la revista Geology dio muestras de un descubrimiento sorprendente. Encabezados por el doctor Russell Bicknell de la Universidad de Nueva Inglaterra, en Estados Unidos, los científicos descubrieron un cangrejo herradura (Euproops danae) de 310 millones de años con su cerebro intacto.
A menudo, los expertos suelen encontrarse con caparazones o huesos antiquísimos de animales que alguna vez poblaron la faz de la Tierra. Sin embargo, dada su fragilidad y facilidad a la descomposición, encontrar tejidos más débiles u órganos internos es mucho más difícil. De ahí la importancia del estudio de Bicknell.
El fósil de cangrejo herradura analizado por el equipo de especialistas proviene del depósito mundialmente famoso de Mazon Creek, a orillas del río homónimo, en el estado de Illinois. Los distintos fósiles de este lugar se conservan dentro de concreciones hechas de siderita, un mineral de carbonato de hierro.
En el caso particular del cangrejo herradura estudiado, el cerebro se conservó gracias a un mineral de arcilla de color blancuzco llamado caolinita. “En nuestro fósil, el cerebro de Euproops está replicado por un mineral de arcilla de color blanco llamado caolinita. Este molde mineral se habría formado más tarde dentro del vacío dejado por el cerebro, mucho después de que se hubiera descompuesto. Sin este llamativo mineral blanco, nunca podríamos haber visto el cerebro“, destaca Bicknell.
Uno de los grandes desafíos de interpretar la anatomía de estos antiguos artrópodos marinos es la falta de parientes modernos cercanos disponibles para comparar. Afortunadamente, los científicos pudieron hacerlo con las cuatro especies de cangrejos herradura que existen en la actualidad.
“Aun para el ojo inexperto, una comparación del sistema nervioso del fósil con el de un cangrejo herradura moderno ofrece pocas dudas de que las mismas estructuras se encuentran en ambas especies, pese a que están separadas por 310 millones de años”, añade Bicknell.
Se ha demostrado que los cuerpos de los animales de Mazon Creek no solo fueron moldeados por la rápida formación de siderita que los sepultó, sino también que este mineral encerró rápidamente sus tejidos blandos internos antes de que pudieran descomponerse. El descubrimiento de estos especímenes excepcionales les brinda a los científicos una visión poco común del pasado profundo, mejora la comprensión de la biología y de la evolución de animales extintos hace mucho tiempo.
Otras noticias de Arqueología
- 1
The Economist nombró al país del año: cuál fue el elegido y qué dijo sobre la Argentina
- 2
Uno de los opositores venezolanos asilados salió de la embajada argentina para entregarse a las autoridades chavistas
- 3
Video | Así fue el atropello masivo en un mercado navideño en Alemania
- 4
El Ejército israelí informó que un proyectil lanzado desde Yemen impactó cerca de Tel Aviv: al menos 20 heridos