"De repente vi que todos corrían hacia mí": el relato de una argentina en Plaza Cataluña
Amorina Cereigido vive en Barcelona hace pocos días y almorzaba a pocos metros del lugar del atentado; "No quiero salir de mi casa", contó a LA NACION
Amorina Cereigido llegó a Barcelona a principios de mes y consiguió un lugar para vivir recién la semana pasada. Esta mañana decidió hacer un parate en su búsqueda laboral y se sentó a almorzar en plena Plaza Cataluaña, a pocos metros del lugar donde ocurrió el atentado.
"Estaba sentada en un bar cuando empecé a sentir cada vez más gritos. Al principio no entendía qué era lo que estaba pasando, pero en un momento me paré y empecé a ver cada vez más gente gritando, corriendo, llamando desde sus celulares", contó la joven de 26 años en diálogo con LA NACION.
"Enseguida empezaron a aparecer los policías en la plaza. Era como 20 patrulleros, camionetas, un helicóptero", relató Amorina con la voz todavía agitada. Su departamento está a unas 10 cuadras del lugar del ataque.
"Soy periodista y quise ir a ver qué era lo que estaba pasando, pero cuando di unos pasos vi cómo todos corrían hacia mí. Había mucha gente asustada, a los gritos. Empecé a moverme yo también y corrí sin dirección varias cuadras hasta que me tuve que sentar. Estaba asustada y pensé que me iba a desmayar", explicó.
"Ahora estoy en el departamento y en un rato tengo que ir al aeropuerto a tomar un vuelo, pero no sé qué hacer. Dicen que hay atacantes sueltos y armados. Que están cerradas todas las estaciones de bus y el metro, así que no sé qué hacer. Prefiero quedarme acá y no salir a ningún lado", expresó nerviosa.
Mientras habla con LA NACION, Amorina le manda mensajes a su familia en Buenos Aires y les avisa que está bien. Su aventura en Europa empezó con un gran susto.