Crece la preocupación global por el avance del coronavirus y adoptan medidas extremas
PEKÍN.– Nuevas declaraciones de emergencia sanitaria, más cierre de fronteras y restricciones de viajes, repatriaciones masivas, cuarentenas. La comunidad internacional reaccionó con determinación a la emergencia declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS)por el coronavirus , que desborda los límites de China y se expande en forma inquietante en el mundo.
Las medidas y los países afectados por casos de contagios continúan en aumento, mientras las autoridades chinas se ven obligadas a actualizar aceleradamente sus normas de seguridad para estrechar el cerco al virus, un patógeno que ya dejó 258 muertos y más de 10.000 contagiados, casi todos en la provincia central de Hubei, pero con numerosos casos en puntos cada vez más alejados de la geografía. Los 56 millones de personas que viven en la zona aislada en Hubei no pueden salir de la región. Entre ellos hay miles de extranjeros.
Ya son 23 los países que revelaron la presencia de casos confirmados, y otros gobiernos evalúan los casos de pacientes con los síntomas correspondientes al coronavirus, pero aún sin confirmar. Es la situación de Brasil, que elevó de nueve a 12 los casos sospechosos de haber contraído el mal.
Estados Unidos, donde se registraron seis casos, declaró emergencia de salud pública por el virus. En ese sentido, emitió una advertencia de nivel cuatro para pedir a sus ciudadanos que "no viajen" a China, y puso en cuarentena a 195 repatriados que sacó esta semana con vuelos chárter de la ciudad de Wuhan, el centro de la crisis. También prohibirá el ingreso a extranjeros que viajaron a China en las últimas dos semanas.
El presidente Donald Trump destacó vía Twitter que su país continúa "trabajando en estrecha colaboración con China". Pero eso no alivió la irritación de Pekín, que criticó las advertencias de viaje emitidas por Washington y dijo que no eran medidas "correctas ni apropiadas".
"Estados Unidos se apresuró a ir en sentido contrario" de la OMS, cuya declaración de emergencia no desalentaba los viajes a China. "No fue un gesto de buena voluntad", declaró con indignación el vocero de la Cancillería, Hua Chunying.
El embajador chino en Ginebra, sede de la OMS, Xu Chen, dijo que "no hay que entrar en pánico innecesariamente, ni tomar medidas excesivas", al exhibir un optimismo que no cosechó adherentes.
Además de la crisis sanitaria, las autoridades chinas intentan hacer un control de daños diplomático. La embajada china en Italia protestó por la "intolerancia" hacia su país. "En los últimos días en Italia hubo casos de intolerancia, que incluso resultaron en episodios de insultos y discriminación contra los ciudadanos chinos", dijo un vocero de la legación.
Italia declaró el estado de emergencia un día después de que los temores al coronavirus llevaran a las autoridades a dejar durante varias horas en cuarentena un crucero con 7000 personas a bordo, hasta que autorizaron el desembarco.
En Gran Bretaña se confirmaron los dos primeros casos, ambos "miembros de una misma familia", indicaron las autoridades. Rusia también confirmó los dos primeros enfermos en su territorio y anunció la evacuación de sus ciudadanos de varias regiones chinas.
Estados Unidos y Japón fueron los primeros en evacuar, el miércoles, a una parte de sus ciudadanos.
Un avión fletado por el gobierno británico con 83 de sus ciudadanos y otros 27 extranjeros aterrizó en la base aérea de Brize Norton, a unos 120 kilómetros al oeste de Londres. Otro avión con 200 pasajeros aterrizó en el sur de Francia y sus pasajeros fueron puestos en observación por 14 días cerca de Marsella.
Italia, Alemania y Bangladesh, entre otros, organizan sus propias operaciones de repatriación, y Canadá anunció un acuerdo con China para sacar a su gente.
Otros países decidieron vetar la entrada a su territorio de viajeros procedentes de China, como Vietnam, Mongolia, Singapur e Israel, así como Guatemala y El Salvador, los dos primeros de América Latina en adoptar esa medida.
Wuhan, una ciudad de unos 11 millones de habitantes, está literalmente aislada del mundo desde el 23 de enero, para tratar de contener la propagación de la epidemia. En esta ciudad los hospitales siguen desbordados. Para hacer frente a este problema, se construyen dos nuevos hospitales a toda velocidad; se prevé abrirán el 3 y 6 de febrero.
"Estoy lleno de culpa y remordimiento. Si hubiera tomado antes medidas restrictivas, el resultado habría sido mejor de lo que es hoy", dijo Ma Guoqiang, secretario del Partido Comunista Chino (PCCh) en Wuhan, en una inusual admisión de responsabilidad que dejó sin embargo a salvo al presidente Xi Jinping.
Son muchos los chinos que objetan a las autoridades de Hubei y Wuhan, y se presume que si la emergencia continúa el descontento podría crear un desafío para Xi, que llamó a la epidemia un "demonio".
Agencias AFP, Reuters y AP
Temas
Otras noticias de Covid
- 1
Cómo el caso Pelicot relanzó debates jurídicos y sociales y qué podría cambiar tras la sentencia en Francia
- 2
Un ómnibus chocó con un camión y se prendió fuego: 32 muertos
- 3
Día clave en Venezuela: Maduro extrema la represión y piensa en su nuevo mandato como punto de partida hacia un “sistema cubano”
- 4
Mi Burrito Sabanero: la historia del niño venezolano que popularizó el villancico y no recibió “ni un bolívar partido por la mitad”