Coronavirus: Trump se comparó con un presidente "en tiempos de guerra" y lo mercados caen sin piso
WASHINGTON.- El avance de la pandemia del nuevo coronavirus envolvió a Estados Unidos en un clima de guerra, con calles vacías, gente encerrada, el gobierno federal en Washington apremiado y trabajando a contrarreloj para para poner en marcha planes de emergencia para contener la propagación del virus, y los mercados en caída libre, incapaces de encontrar un piso que frene el colapso de la economía.
El propio Donald Trump dijo que se veía como un mandatario "en tiempos de guerra" durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca, en la cual anunció que enviaría dos barcos hospitalarios a Nueva York, suspendería los desalojos y remates hipotecarios, e invocaría una ley de 1950, aprobada en los albores de la guerra en la península coreana, para poder ordenarle a las empresas que aceleren la producción de equipamiento médico "en caso de que la necesitemos".
Unas horas antes, Trump había anunciado un acuerdo con Canadá para cerrar la frontera a todos los viajes que no sean esenciales, sin afectar al comercio bilateral.
"Lo veo como un presidente en tiempos de guerra. Es contra lo que estamos peleando", dijo Trump, en la sala de prensa de la Casa Blanca, rodeado de algunos de los integrantes del equipo que coordina la ofensiva contra el virus. "Es una situación muy difícil. Tenés que hacer cosas, cerrar partes de la economía que hace seis semanas estaban mejor que nunca. Teníamos la mejor economía que jamás hemos tenido. Y un día tenés que cerrarla para derrotar a este enemigo. Pero lo estamos haciendo", continuó.
A dos meses de que se detectara el primer caso de Covid-19, el nuevo coronavirus ya se propagó a los 50 estados del país, 7664 personas fueron diagnosticadas, y 115 murieron, según el conteo de la Universidad John Hopkins. El estado más afectado es Nueva York, donde el gobernador, Andrew Cuomo, ordenó ayer a las empresas que mantengan al 50% del personal en sus casas, salvo los servicios esenciales.
"Estamos peleando la misma guerra, y estamos en la misma trinchera", dijo Cuomo.
La economía volvó a mostrar el daño de la pandemia. Mientras Trump respondía preguntas en la Casa Blanca, Wall Street se derrumbaba. Los inversores, inmersos en el pánico, sin contención suficiente y sin un pronóstico certero respecto de cuándo terminará el brote, y, por ende, cuán severa será la recesión, se desprendían de todo –acciones, bonos y commoditties, incluido el oro, que suele ser un refugio en tiempos de crisis– para buscar asilo en el activo más seguro de todos: el efectivo.
Ante el tsunami de pánico, los mercados se hundían sin encontrar un piso. El índice Dow Jones llegó a caer más del 10%, por debajo de los 19.000 puntos y perdió todo lo que había ganado durante la presidencia de Trump, pero luego se recuperó un poco antes del cierre. Con todo, igual se desplomó otro 6,3 por ciento. El S&P 500 cayó un 5,2%, y también se dirigía a borrar todas las ganancias de los últimos tres años, mientras que el Nasdaq se desplomó otro 4,7 por ciento.
La peor proyección sobre la economía de Estados Unidos surgió del propio gobierno federal. Ayer, el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, le dijo a los senadores republicanos que el desempleo podría aumentar hasta el 20% sin un plan contundente de estímulo fiscal. Trump dijo que era solo "el peor de los escenarios" posibles por el brote, pero que el país aún está lejos de eso.
La tasa de desempleo está en 3,5%, el menor nivel de los últimos 60 años. Pero esa cifra pronto será historia: la pandemia del nuevo coronavirus puso punto final a la bonanza más prolongada en la historia de Estados Unidos. El banco de inversión JP Morgan confirmó, en su último panorama, su pronóstico de una recesión global. Para Estados Unidos, el banco prevé una caída anualizada del producto bruto interno (PBI) del 14% en el segundo trimestre, peor al freno de la crisis financiera global. El título del informe: "El día que la Tierra se detuvo".
El primer impacto de la crisis económica ya era palpable en las oficinas estatales que monitorean las solicitudes de beneficios para desocupados. En Ohio, solo el lunes, el gobierno estatal recibió más de 36.000 solicitudes, el número que solía recibir en un mes completo.
We will be, by mutual consent, temporarily closing our Northern Border with Canada to non-essential traffic. Trade will not be affected. Details to follow!&— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) March 18, 2020
Mientras el gobierno de Trump intentaba contener la pandemia, legisladores en el Congreso aprobaron un primer paquete de alivio y buscaban llegar a un acuerdo para aprobar lo más pronto posible un hercúleo estímulo fiscal para la economía por al menos un billón de dólares. El principal pilar de ese plan es la entrega de cheques a los estadounidenses para evitar un colapso del consumo. Trump dijo que la cifra aún se estaba discutiendo, aunque, según trascendió en los medios, el monto podría oscilar entre 1000 y 2000 dólares, y podría haber más de un pago.
El Tesoro quiere distribuir dos rondas de cheques a los estadounidenses, una en abril y otra en mayo, por un total de 250.000 millones de dólares cada una, pero el monto final puede variar. Además, el gobierno de Trump quiere entregar préstamos blandos a las pequeñas y medianas empresas por otros 300.000 millones.
A ese paquete de ayuda, Trump dijo que se le agregará un rescate a los hoteles, los cruceros y las aerolíneas, todos sectores que fueron golpeados por la pandemia.
Otras noticias de Actualidad
Más leídas de El Mundo
Reabre el 7 de diciembre. Un video muestra cómo quedó el interior de la catedral de Notre Dame tras la restauración
Derrumbe. Es uno de los hombres más ricos del mundo y perdió 12.500 millones de dólares en un día por una trama de sobornos
Adelanto de sus memorias. Angela Merkel reveló el consejo que le dio el papa Francisco para lidiar con Trump
Tiene capacidad nuclear. Qué se sabe del misil hipersónico "experimental" que Rusia lanzó contra Ucrania