BEIRUT.- El daño causado por la explosión mortal de la semana pasada en Beirut sigue obstaculizando la atención médica en la capital libanesa. La Organización Mundial de la Salud (OMS) inspeccionó 55 establecimientos de salud en la ciudad y halló que la mitad de ellos se encuentran "no funcionales".
Tres hospitales importantes tuvieron que cerrar y tres más tuvieron que reducir su capacidad tras la explosión.
La OMS también advirtió que en algunas instalaciones no se estaban cumpliendo las medidas de prevención del Covid-19.
Más de 200 personas murieron y más de 6000 resultaron heridas en la explosión, según el gobernador de la ciudad, Marwan Abboud. La explosión fue causada por más de 2700 toneladas de nitrato de amonio almacenadas de manera insegura en el puerto de la ciudad.
La población expresó masivamente en las calles su indignación por el hecho de que se haya permitido almacenar tanto material explosivo en el puerto. El gobierno dimitió el lunes tras airadas protestas callejeras.
¿Cuál es el estado de los hospitales?
El Dr. Richard Brennan, director regional de emergencias de la OMS en el Mediterráneo Oriental, dijo que habían evaluado 55 clínicas de atención primaria en Beirut.
La OMS afirmó que su prioridad era lograr que los hospitales y clínicas que habían cerrado, se pusieran en funcionamiento lo más rápido posible. Brennan señaló que para garantizar que los suministros llegaran a quienes los necesitaban, la OMS los estaba distribuyendo directamente a los establecimientos de salud que había identificado en sus propias evaluaciones.
Hizo hincapié en la importancia de restaurar las instalaciones de salud a su máxima capacidad tanto para tratar a los heridos como para hacer frente al reciente aumento de los casos diarios de coronavirus.
El Líbano registró 7121 casos de coronavirus y 87 fallecimientos, según cifras del Ministerio de Salud publicadas ayer.
Brennan elogió la respuesta del país a la pandemia y dijo que había hecho un "trabajo impresionante" para abordarla. Pero advirtió que había habido "un rebrote en el número de casos antes de la explosión", y que el país registró ayer su mayor número de casos diarios.
"Si bien tenemos que seguir respondiendo a las consecuencias de la explosión, también debemos estar atentos con respecto al Covid", insistió.
Cientos de edificios fueron destruidos por la explosión, dejando partes de la ciudad como una zona de guerra, y muchos edificios históricos se encuentran entre los dañados.
Las autoridades anunciaron hoy la prohibición de la venta de estos edificios antiguos para evitar que varios barrios históricos sean destruidos por desarrolladores que buscan obtener ganancias de la catástrofe.
El temor es que estas casas tradicionales puedan ser demolidas y reemplazadas por bloques de departamentos de gran altura, como ya sucedió en otras partes de Beirut en el pasado.
También existe preocupación de que el Líbano pronto se quede sin pan, ya que los silos en el puerto que almacenaban sus suministros de cereales se llevaron la peor parte de la explosión.
Pero el ministro de Economía libanés, Raoul Nehme, tuiteó que el país tenía suficientes suministros de harina para los próximos cuatro meses.
Agencias Reuters, DPA y AFP
BBC MundoTemas
Otras noticias de Actualidad
- 1
Cómo el caso Pelicot relanzó debates jurídicos y sociales y qué podría cambiar tras la sentencia en Francia
- 2
Un ómnibus chocó con un camión y se prendió fuego: 32 muertos
- 3
Día clave en Venezuela: Maduro extrema la represión y piensa en su nuevo mandato como punto de partida hacia un “sistema cubano”
- 4
Vladimir Putin anticipó que habrá “más destrucción” en Ucrania tras los ataques contra Rusia