Contra el drama latino, un maestro con superpoderes
Héctor Rodríguez Para dar a conocer los problemas de millones de personas en la frontera entre México y EE.UU., creó al superhéroe El Peso Hero, que combate a narcos y corruptos
Ala frontera de más de 3000 kilómetros que comparten México y Estados Unidos le sobran villanos. Está plagada de narcos, "coyotes", policías deshonestos y funcionarios corruptos. Lo que le faltaba era un superhéroe justiciero, como Batman, en Ciudad Gótica, o Superman, en Metrópolis, capaz de velar por los millones de latinos que viven o transitan por esos pagos.
Esa ausencia llevó en 2011 a Héctor Rodríguez, un maestro de una escuela primaria en Texas, a crear un "hombre con la fuerza de 1000 caballos y una increíble invulnerabilidad", decidido a proteger a las víctimas del crimen organizado y de las autoridades sin moral. Un hombre al que le dio un cuerpo a prueba de balas, un corazón humilde y al que llamó "El Peso".
"La idea nació por la necesidad de tener a un héroe de nuestros tiempos, centrado en nuestra realidad, que luche por los latinos, especialmente por los inmigrantes", explica por teléfono a LA NACION Rodríguez, de 32 años. "Con ese fin, di vida a El Peso Hero -agrega-, un cómic que gira en torno a temas de la vida real en la frontera y cuyo héroe da esperanza e inspira a los latinos vinculados a ese mundo."
Traficantes de drogas que son perseguidos por agentes estadounidenses; una madre y su hijo que caen víctimas de la violencia cuando intentan cruzar a Texas; oficiales del estado de Coahuila corruptos que apoyan a los narcos... Las viñetas de El Peso, que vive en la ciudad ficticia mexicana de Los Brazos y que debe su nombre a la moneda de ese país, narran ésas y otras escenas lastimosas, que son parte de la peligrosa vida en la desértica línea que divide a México de Estados Unidos. Una vida que Rodríguez conoce bien. "Mi abuelo paterno cruzó ilegalmente la frontera cuando tenía 18 años, y yo nací años más tarde en Eagle Pass, un pueblo fronterizo en Texas", cuenta.
Fue en una de sus visitas a sus familiares en ese lugar donde le impactó escuchar que existían organizaciones criminales integradas por ex oficiales mexicanos que traficaban con personas. En Dallas, donde vive, también lo sensibilizaba la discriminación que sufren los latinos que logran pisar suelo estadounidense sin papeles, así como la falta de representación de la comunidad hispana en los medios de comunicación local.
En un intento de enmendar esas fallas, Rodríguez decidió crear un superhéroe netamente latino, al que le encomendó la tarea de proteger a los más desamparados y promover una cultura de respeto a los derechos humanos. "Quería un héroe que buscase cambiar la realidad de la frontera y que los latinos pudiesen admirar", resume.
Hastiados de la violencia que se vive en sus respectivos países y esperanzados en una vida mejor, cientos de miles de latinos se entregan año tras año a traficantes de personas sin escrúpulos para emprender un camino sofocante, tortuoso e inhumano, que los lleve al país de sus sueños: Estados Unidos. En el último año, más de 66.000 menores trasegaron por esa senda del infierno en la que se transformó la frontera entre México y su vecino del Norte sin la compañía de un adulto. Chicos, en algunos casos, de apenas ocho o nueve años, la edad de los alumnos de Rodríguez, que enseña en la escuela bilingüe Junkins Elementary School de Carrollton, Texas. "En mi próximo libro [el tercero de la saga, que saldrá el mes próximo], El Peso protege precisamente a dos menores que buscan cruzar a Estados Unidos, y en una de las viñetas desafía a las autoridades fronterizas, a las que les pregunta: «¿Por qué mandan a guardias con armas? Deberían mandar a la Cruz Roja»", adelanta Rodríguez a LA NACION.
Ese pedido ficticio contrasta brutalmente con la realidad de una frontera hipervigilada, donde más de 20.000 agentes estadounidenses de la Patrulla Fronteriza buscan contener la ola migratoria, ayudados por cercas de concreto, cámaras infrarrojas y hasta drones de vigilancia aérea. La inversión hecha en años recientes en tecnología y mantenimiento de esa vigilancia, además, supera los 20.000 millones de dólares. Aun así, muchos logran cruzar y tocar su "tierra santa", para pasar entonces a engrosar las filas de los sin papeles en Estados Unidos -más de 11 millones de personas, en su mayoría latinos-, un drama que toca de cerca a Rodríguez.
"Conocí a varios estudiantes que perdieron a sus padres por agentes de migración y cuyas familias quedaron divididas", explica. "Todos ellos encuentran una conexión con El Peso, a quien identifican como un héroe que da voz a sus problemas", dice.
Rodríguez hace toda la historieta a pulmón. Es a la vez escritor, dibujante y distribuidor del cómic, que circula principalmente en Internet, donde su página web (www.elpesohero.com) ya suma más de 10.000 seguidores. "Cuando participo de ferias de historietas, también imprimo copias y las vendo", cuenta. Se trata de un cómic bilingüe: El Peso habla únicamente en español, pero la mayoría de los demás personajes lo hacen en inglés. En sus tres años de vida, el proyecto recibió numerosas críticas positivas y otras tantas negativas. "Bueno o malo, no importa. Lo que vale es difundir los problemas de la frontera", resume Rodríguez.
Frontera México - Estados Unidos
Longitud: 3185 kilómetros.
Patrulla Fronteriza: 20.000 agentes.
Menores que cruzan solos: 66.000 en el último año.
Indocumentados en EE.UU.: más de 11 millones, en su mayoría latinos.
lanacionarMás leídas de El Mundo
Desregulación y ajuste. El abrupto giro a la derecha de Nueva Zelanda tras tener uno de los gobiernos más progresistas del mundo
Instantáneas. Los históricos baños de Estambul que mantienen vivo el ritual del cuidado del cuerpo y de la mente
Nueva fase. El juego político en las potencias mundiales que explica la última escalada en la guerra de Ucrania